Makarov?

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-Mirajane dejanos un momento.
Asenti.
Sus caras eran de preocupación. Quien es Makarov?
-Hey!
-Buenos días Bixlow.
-Que haces allí parada?
-Ah no acabo de salir del estudio.
-Oh.
Por alguna razón desconocida Bixlow sonrió.
-Pasa algo?
Negó con la cabeza aun sonriendo.
-Bixlow le puedo hacer una pregunta?
-Ya la hiciste jajsjajajajajaja... No te da risa... Okey dime que quieres?
-Quien es Makarov?
-Porque preguntas eso? Donde lo escuchaste?
Por primera vez vi a Bixlow completamente serio.
-Freed fue al estudio y lo mencionó.
Bixlow se fue rápidamente al estudio dejandome aun con más dudas. Mire hacia el timón Ever era quien manejaba ahora el barco. Me gustaría hacer eso.

Pasaba la mañana y ninguno de los chicos salia del estudio. Que tan grave era el asunto? Las puertas se abrieron de golpe. Era Freed. No parecía molesto de echó parecía herido. Pensé en acercarme pero decidí algo mejor.

Xyna era la cocinera de la casa yo siempre que podía me colaba para ver como cocinaba cuando vio lo interesada que estaba me enseño siempre decía que una buena torta arreglaba cualquier dolor y que no hay mejor manera de llegar a un hombre que por su estomago.

-Capitán?
-Que quieres?
-Le traje algo.
Hubo un largo silencio antes de que me permitiera pasar. Coloque el pedazo de torta en el escritorio.
-Que es eso ?
-Una torta.
-Que es una torta?
-Capitán, deberás no sabe que es una torta.
Laxus me fruncio el ceño.
-Pruebela.
Miro extrañado varias veces la torta y a mi. Suspiro.
-Bien.
Su cara cambio por completo al probar la torta, con unas cucharadas mas ya había acabado el trozo.
-Hicistes mas?
Asenti. Sus ojos verdes se veían un poco mas brillantes que la primera vez que lo vi a la cara ya no eran de un oscuro que parecía rozar el negro.
Tocaron a la puerta.
-Adelante.
Bixlow entró con unos papeles.
-Capi aqui es- Hola interrumpi? Hacían?
Bixlow movió sus cejas de una forma divertida. Reí.
-Tienes lo que te pedí?
-Si.
-Mirajane vuelve más tarde con lo que te pedí por ahora dejame solo.
Asenti. Bueno por lo menos le alegre un momento el día.
Al salir me tope con Elfman.
-Nee-san.
Le sonreí.
-Hola Elfman, como has estado?
-Siento como si no nos hubiésemos visto por muuuucho tiempo.
-Yo siento igual.

Pasamos el día hablando de una manera en que no habíamos echo por mucho. Elfman se desestreso un poco al saber que Laxus era amable aunque aun no le agradaba. Me contó que Evergreen le gustaba y que y tenían un tipo de relación pero no quería que nadie lo supiera. También me contó que Lisanna estaba últimamente muy unida a Bixlow me dijo que debería hablar con ella le dije que si solo para que se calmara Lissana sabia cuidarse sola y Bixlow no era un mal chico.

Ya estaba anocheciendo busque por todo el camarote alguna pista de quien era Makarov pero no halle nada. No entendía si Makarov era tan importante porque no hayaba nada sobre el.
Acostada en la cama me puse a pensar en donde podría encontrar algo de información.
La puerta se abrio. Laxus me miro luego miro a su alrededor.
-Que tocaste?
Le sonreí.
-Nada
Suspiro.
-Si buscas algo sobre Makarov no hayaras nada.
-Yo creo que si.
Me miro de manera engreída. Retandome.
-Podemos apostar si quiere, capitán.
-Yo ya tengo todo de ti, que me puedes dar?
-Si gana puede decir usted.
-Un premio sin reglas?
Asenti.
-Bien.
Cerro la puerta. Se acostó a mi lado mirando el techo.
-Que vas a querer de mi?
-Información.
Me miro extrañado.
-De que?
-De toda la que yo quiera sin derecho a mentir y callar.
Fruncio el ceño.
-Usted dice que no hallare nada, deje el miedo capitán.
Me tomo entre sus brazos.
-Yo no le tengo miedo a nada.
-Acepta?
-Acepto. Espero por tu bien que tengas algo para mañana o sostenerte de pie se te sera imposible.
Me soltó, se levanto y salio del camarote. Mi respiración se volvió pesada.
Salí del camarote y fui a uno de los camarotes desocupados eran 3 los que debían estar llenos de tierra y polvo algo hallaría en ellos.

Busque por horas, el amanecer asomaba por las ventanas cubiertas de polvo y no sólo estas estaban cubiertas de polvo yo también lo estaba, además sudaba, me encontraba completamente sucia. De golpe recordé la torta que había dejado en la cocina, salí lo mas rápido que pude a ver si se había caído o dañado de alguna manera para mi suerte estaba tal y como la deje.
-No deberías estar buscando algo de Makarov.
La voz de Laxus me recorrió de pies a cabeza. Asenti.
-Entonces?
-Me rindo.
Las palabras salieron de mi boca casi como si lo hubiesen deseado toda su vida.
-Sabes lo que significa, verdad?
-Si.
-Bien. La torta no ira a ningún lugar así que vamos a tomar un baño se nota que te esforzaste en ganar.

Estaba entre sus piernas recostada en su pecho dejando que lavara mi cuerpo. Mis ojos cerrados disfrutando de su tacto.
-Eres muy terca mujer.
-Mmmm.
Estaba disfrutando mucho de lo que hacia como para responder.
-Porque estas tan interesada en saber de mi vida?
Abrí mis ojos y gire un poco mi rostro para mirarle. No tenia una respuesta para ello. No lo sabia solo...
-Hay algo "interesante" en usted.
-Interesante?
Asenti.
-No esperaba esa respuesta.
-Que esperaba?
-No lo se...

Me coloque la bata que me había dado para estar en el camarote y me metí en la cama con Laxus. Me acurruque en sus brazos.
-Sabes que gane, no?
-Si...
Levanto mi rostro. Me hizo mirarlo.
-Descansa todo lo que puedas, porque no dormiras esta noche. Me recorrió un escalofrío de pies a cabeza.
-Capitán.
-Que?
-Me va a dejar en algún momento?
-Porque lo preguntas? Crees que no podrás contraer matrimonio por no ser "pura"? O quizás es que crees que te dejare en una isla de cierta?
Sarcástico.
-No, solo que... No creo que alguien mas me tome como usted lo hace.

CapitanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora