Rey Del Invierno (yaoi/gay)

2 Capitulo 8 Ian

Narra Liu

Días mas adelante estaba leyendo los manuscritos que avía mandado Ian por correo, esta escribiendo mucho últimamente su romanticismos esta siendo explotado bastante y no es normal bueno al menos para mi, ya que el no suele sacar sus capítulos tan rápido sino que se toma como un mes para volverme loco y en el ultimo momento reírse de mi diciendo que no me preocupe y que lo tenia preparado desde antes.

Lo invite a mi oficina ya que querían entrevistarlo en televisión y quería ser yo quien le diera la noticia para sorprenderlo, ver su expresión hermosa al sonreír y quien sabe, invitarlo a comer a algún lugar para celebrar su éxito en ventas. Ok ok me pillaron lo que quiero es invitarlo a salir pero técnicamente es normal ya que soy su editor, aun me llama tanto la atención este chico ni se que tiene.

Al abrir la puerta la de oficina ahí estaba el, como siempre con ropa informal y muy bien arreglado y jajaja al igual que un niño estaba dando vueltas en la silla giratoria de mi escritorio, eso no me lo esperaba, siempre tengo una sorpresa con este chico.

-que haces Ian?- dije acercandome a el y deteniendo la silla quedado frente a frente con el.

-me estoy divirtiendo, te estabas tardando mucho, no me gusta esperar- dijo el con una sonrisa picara en su rostro

Me acerqué mas a el -lamento hacerte esperar~ salia de una junta- acerque mi mano y acaricie ligeramente su barbilla, hoy estaba tan deslumbrante que no podía dejar de mirarlo - ne hoy te veo diferente, te ves feliz-

-sip hoy es el aniversario de mi matrimonio, me siento feliz, estaba preparando una gran cena en casa- dijo Ian...JODER!! Que tiene ese maldito? Que daría yo por solo tenerte una noche.

-oye nunca has pensado en otra persona que no sea tu esposo o tu familia? - dije levantando una ceja

-te refieres al bultito en tus pantalones con el que me estas rozando?- dijo Ian, a que mediga hora tuve una erección!!? - pues evito pensar en eso, normalmente este tipo de cosas me ponen de buenas mas que todo en una oficina, ya sabes tener un secretario sexy~-

Como le puedes decir eso a un hombre que te desea como si nada, ahora tenia mas ganas de que fueras mi secretario solo para violarte salvajemente en cada reunión al terminar el día, entonces ahí me di cuenta, mi atracción con Ian era mas que todo física y mas con esos encantos que tienen por eso no me importa si ama a su esposo solo quiero follar con el, simplemente quiero esa experiencia quiero que el sea mio y poder penetrar ese traserito Justo ahora ya que no me aguanto las ganas.

-Ian, no quisieras tener una aventura- con mis manos lo acorrale contra la silla para que no escapará, esta vez no lo dejare escapar. - en arriesgarte y tener una probada pequeña del sexo alocado que tenias antes~- me las juego en ese momento y le robe un beso ahí mismo, pude notar como el se sorprendía mucho pero...

-hey me estoy sintiendo incomodo... Apartate- dijo Ian poniendo las manos en mi pecho empujandome ligeramente.

Aproveche eso para abrazarlo y meter mis manos bajo su camisa, su piel joder, era como tocar seda muy fina, Ian es bastante vanidoso por lo que el aroma que tiene es extremadamente delicioso y perfecto, ningún perfume fuerte y molesto, sino algo fresco y dulce que te provoca tener ganas de morderlo, que fue exactamente lo que hiciste mordiendo su cuello y luego subí besando su oreja.

-Ngrhh!!.. Dije.. - pude notar que comenzó a jadear y luego me miró fijamente - que TE DETENGAS!!- grito cabreado y con su rodilla golpeó fuertemente mi entrepierna, haciendome caer del dolor al suelo, pero no se detuvo ahí luego vi como el se paraba quitándose un zapato y luego puso su pie en mi cara.

-mira imbécil, yo solo tengo una primavera, solo tengo un maldito perro y SOLO EL ME VA A TOCAR!!! cuando otros lo hacen me da asco, siento náuseas pensar en oler a tu colonea de segunda, tendré que vomitar y luego darme como tres baños seguidos- dijo Ian es primera vez que lo veo tan agresivo - por mi te agarra tu maldita erección y puedes irte a la puta con eso- dijo para luego irse de mi oficina.

Narra Ian

Joderr!! Estaba asqueado cuando llegue a casa, aun sentía las sucias manos de ese cretino tocando mi piel, no recuerdo si les he dicho pero he desarrollado un asco al ser tocado por otras personas... Claro menos Natsu y mis hijos, pero los demás me da una repugnancia.... Por el simple hecho que imagino volver a ser el de antes, que cualquier imbécil me ponían la mano encima y me metía el rabo a fondo, ahora eso me da tanto asco... Solo quiero estar con Natsu solo quiero que el me toque.

Al llegar a mi habitación para cambiarme de ropa pude ver que avía un peluche en la cama, era un conejo blanco y un ramo de tulipanes rojizos.... Son mis favoritas... Pero avía algo más, estaba una de las camisas que Natsuiko lleva al trabajo... Entonces escuche la regadera del baño de nuestra habitación, el estaba aquí. Solté mis cosas en el suelo y me recosté en la cama abrazando la camisa de Natsu, estaba algo sudada pero... Ese olor me encanta, quería el completo aroma en Natsuiko en mi para quitarme la peste que traía, me veía tan patético abrazando la camisa y besando el cuello interno de esta pero no me importaba.

-que tierno conejito me he encontrado~- dijo Natsuiko parado frente a la cama con una toalla amarrada a la cintura y otra en su cuello mientras se secaba el cabello, este hombre tiene un cuerpo ooohh dioss!! Ya siento que me sangra la nariz con solo verlo.

-ven aquí perrito, hoy quiero tener tu olor en todo mi cuerpo- dije a lo que Natsuiko sonrió y se subió a la cama para ponerse sobre mi pegando su cuerpo al mio y aplastandolo ligeramente contra la cama.

-si me dices algo asi tan de repente terminaremos haciéndolo, mas ahora que he estado pensando en ti todo el día-  dijo besando mi barbilla y luego llegando a mi boca, nos besamos apasionadamente. Me aferre a ese cuerpo conveniente mente húmedo acariciando su espalda pero Natsu estaba ansioso, sentí como su mano se metía bajo mis pantalones y agarraba fuertemente mi trasero, dios me encanta cuando se hace el rudo en la cama.

Sentía como el jugaba conmigo mordiendo mi labios inferior mientras metía sus dedos en mi entrada penetrandome con estos, yo gemía para el y me encargue de quitarle la toalla y tirarla por ahí para tocar sus caderas y acariciarlas hasta llegar hasta su miembro, ya me hacia una falta enorme uno de estos momentos de pasión y desenfreno con mi esposo mas después de lo de Helltsu... Pero algo paso Natsuiko se detuvo mirandome fijamente.

-...tienes una marca de mordida en tu cuello que yo no hice- dijo Natsuiko de manera muy fría matando por completo el momento....