Mientras los sobrevivientes no están LEMON (+18)

Una bochornosa noche

**Ya habían pasado 2 semanas y media luego del infectado 0, logre escapar de la ciudad pero dejando todo atrás, a pesar de ello en esta larga travesía que me ha tocado experimentar he conseguido llegar al límite de un bosque y he logrado formar un grupo, el cual no es el mejor pero estoy satisfecha, a pesar de ello no los necesito del todo, en el día es muy fácil transitar por los bosques, por lo que puedo darme el gusto de caminar sola, pero al caer la oscuridad, el bosque se distorsiona a un laberinto del cual es muy fácil perderse, lo que significaba la muerte, se que mientras este cerca del chico menor y mi mejor amiga durante la noche estaría a salvo...o al menos eso creía pensar...

Nos adentramos en el bosque por última vez con el fin de conseguir, esta vez, escabullirnos silenciosamente a través de las desmedidas oleadas de zombis, por lo que al más mínimo fallo ya estábamos fritos, caminamos por lo menos 1 hora hasta llegar a un sendero que ya había sido transitado, por lo que seguimos en línea recta intentando seguir el camino, llegamos a una arboleda pequeña al lado del sendero por lo que el chico dio la idea de descansar un rato, ya que no comíamos del día anterior.

Corrí hacia el césped donde planificaba acostarme, mire hacia atrás y veía como mis compañeros se veían cada vez más lejos, solté una carcajada ya que me hacían señas para que los esperara pero nos les hice caso, llegue a la arboleda y procedí a sentarme, pero me llamo la atención que mis compañeros me hicieran señas despavoridos, sentí como algo me tomo del brazo y finalmente di cuenta de lo que me intentaban advertir mis compañeros, un caminante se abalanzaba con violencia hacia mí a intentar morderme, vi a través de un gran agujero hecho en el hombro del caminante como el chico preparaba su rifle y se preparaba a disparar, cerré los ojos y al escuchar un bullicio, el zombi cayó muerto sobre mí, me levante lentamente para darle las gracias al chico, al mismo tiempo sentí como corría sangre de mi hombro... la bala había penetrado al zombi y quedo incrustada en mí.

El chico intento pedirme disculpas, pero lo hice callar y le pedí un par de analgésicos, esto debía de hacer efecto hasta que encontráramos un lugar seguro donde curarme, así que seguimos con nuestro camino.

Al terminar el sendero encontramos el preciado refugio, una cabaña en medio del bosque, esta vez el chico entro primero, y este al examinar que no existiera ningún peligro nos hizo unas señas para entrar, mi amiga me ayudo a acostarme en un sofá muy antiguo, sus únicas palabras fueron ''Respira hondo'' y me sacó la bala que estaba en mi hombro, luego de eso desinfecto la herida y me vendó, en una esquina el chico miraba su celular, y empezó a contarnos finalmente su historia, tras el caos que ocurrió en la ciudad se separó de su novia y esta termino convertida en un zombi, tras contarnos esto rompió en llanto, casi me dio lástima.

Tras el paso de 2 horas, decidimos seguir nuestro camino, debíamos apresurarnos ya que empezaba a oscurecer, y tras esto ningún lugar del bosque era seguro, mientras pensaba que pasaría si llegaba la noche mientras nos encontrábamos aquí, a lo lejos escuchamos gritos, seguidos de infectados corriendo hacia nosotros, rodeándonos, nuestra única escapatoria era luchar, abrimos fuego, a la vez que salíamos de la cabaña para no quedar acorralados, disparándo a todo lo que se moviera a lo lejos, esto alertó a los zombis del bosque debido al eco, a pesar de que nuestro fin estaba cerca, disparar a esas cosas directo en la frente me hacía disfrutar demasiado.

De repente, el suelo empezó a temblar y a lo lejos veía como zombis salían por los aires, era un Tank, un zombi que cayó en residuos tóxicos, le disparé con todo el plomo que tenía cuando mi mejor amiga le tiro un cóctel molotov y el Tank empezaba a arder, furioso, empezó a seguirla, ya solo quedábamos el chico y yo.

Mientras disparábamos, el chico me trataba de gritar algo pero no entendía que era, cuando me di cuenta que lo que necesitaba era munición una especie de tentáculo comenzó a arrastrarlo hacia unos matorrales, me acomodé la gorra e intenté dispararle pero fallé el tiro, al mismo tiempo vi una sombra que saltaba de árbol en árbol hasta finalmente aterrizar sobre mí, caí en el suelo y con sus filosas garras comenzó a arañar mi cuerpo, casi despedazando mi ropa y provocándome una herida en mi estómago, tras esto el Hunter se detuvo y me miró fijamente a los ojos, los cerré rápidamente esperando mi muerte, pero en eso sentí como Hunter deslizaba sus manos arañando desde mi cuello hasta mis muñecas, sujetándolas con fuerza, sin posibilidad de moverme, antes de que pudiera intentar zafarme, sentí los labios de Hunter sobre los míos, presionando a tal punto de que sentí un poco de dolor en mi boca, el empezó a resbalar su lengua sobre mis labios, lentamente abrí mi boca permitiéndole el paso, rápidamente el metió su lengua dentro de mi boca, comenzando lo inevitable, Hunter separó su boca de la mía, quede estupefacta por lo que acababa de hacer ese zombi y antes de poder intentar empujarlo para liberarme, Hunter comenzó a despojarse de su hoodie azul, dejando su marcado torso al descubierto, empezó a sujetar con energía mis muñecas, llevándolas por encima de mi cabeza, sentí el sonido de una tela, en pocos segundos, Hunter me había atado mis muñecas con solidez con ayuda de su hoodie, el empezó a acercar su cuerpo hacia el mío y sentí el calor de su abdomen sobre mí pecho, no podía liberarme por más que forcejeara, el me tenía bien sujeta.

Comencé a sentir como Hunter había comenzado a lamer y besar mi cuello, cada tanto mordisqueaba con ligero vigor, haciéndome soltar un suave gemido, realmente no quería soltar esta clase de sonidos, vi la pequeña sonrisa de Hunter cuando los soltaba. Solté un gemido ahogado cuando una de sus manos apretó uno de mis pechos, Hunter me dio un arañazo de tal forma que destrozó los pocos botones que quedaban de mi camiseta y el resto de mi brasier, velozmente tiro de estos dejando mis pechos al descubierto, Hunter se detuvo un momento e intenté girar mi cuerpo en un intento de cubrirme pero no hubo caso, al rendirme curvé mi espalda hacia atrás, Hunter comenzó a lamer uno de mis pezones casi con la punta de su lengua, me mordí el labio tratando de evitar que algún gemido saliera de mi boca, me quedé sin aire cuando comenzó a mordisquear y chupar mi pezón, mientras que con su mano masajeaba y jugaba con el otro.

No podía evitar sentirme extraña, no podía evitar retorcerme debajo de él, aun así deseaba más, luego de unos minutos Hunter cambió al otro pezón, pero esta vez su mano derecha levantaba mis caderas y su mano izquierda bajaba hacia mi entrepierna, estaba tan concentrada en el, que no noté que hizo una rasgadura en mi pantalón con sus garras, provocando heridas en mis muslos, Hunter acercó su mano izquierda a mi entrada, y comenzó a acariciar con sus dedos por encima de lo que quedaba de mi ropa interior, eso provocó que me retorciera aún más debajo de él, sentía como mi cara ardía y como mis gemidos aumentaban cada vez más, de repente sentí como rasgó lo que quedaba de mi ropa interior, dejándome desnuda frente a él, no podía evitar temblar, pero de lo que estaba segura es que ya no era por nervios, sino por la sensación que sentía en todo mi cuerpo gracias a Hunter. Grité con fuerza, Hunter empezó a meter dos dedos dentro de mí y comenzó a tocar mi interior, concentrándose con su boca en mi clítoris, su lengua hacía círculos haciéndome gemir energéticamente.

Hunter se puso de pie ágilmente, me levantó y procedió a desatar mis muñecas, el Hunter me miraba como esperando algo, entendí lo que me quería decir, me agaché y bajé su pantalón junto con su bóxer, dejando salir su duro miembro, empecé a masturbarlo con una mano mientras que con la otra tocaba su abdomen, metí su grueso miembro a mi boca, dándole excitación a su palpitante amigo, jugaba con mi lengua rozándole cada parte y sentía como crecía, Hunter alejó mi cabeza, y agresivamente me tomó de las caderas para darme media vuelta y dejarme en cuatro, para luego comenzar a rozar su pene en mi entrada hasta que sentí como la punta de su pene presionaba contra mi vagina, de a poco empecé a sentir como el entraba rompiendo mi virginidad, derramé unas lágrimas tras gritar de placer, cuando entró por completo empezó a chocarme cada vez más rápido, embistiendo con potencia, arañando bruscamente mi trasero y nalgueandome cada vez con mayor intensidad, tras un rato me giró, se acostó, y esta vez me posicioné arriba de él, mientras él ponía su palpitante miembro en mi intimidad, me deje caer y sentí que me volvía loca, empecé a saltar cada vez más fuerte, dando movimientos circulares, cada vez más adentro, mientras el manoseaba mis pechos, finalmente pude verlo de cerca, era realmente atractivo, no pude evitar ruborizarme más, Hunter se dio cuenta de esto, me acerqué a el y deslizó su lengua dentro de mi boca, mis gemidos comenzaron a ahogarse por la boca de Hunter, que no dejaba de besarme, los cuales me ayudaban a aumentar el placer, en busca de más y más, Hunter se percató de esto y comenzó a aumentar el ritmo haciéndome sentir que en cualquier momento me partiría en dos, sacó su miembro y lo colocó nuevamente, esta vez en mi trasero, el empezó a meterla un poco más adentro, se movía despacio, pero luego se empezó a mover más rápido, lo abrazé y no pude evitar arañar su espalda, a lo que Hunter sólo gruñó y me dio más fuerte, aceleró el ritmo a las estocadas, mis gemidos llenaron el bosque, Hunter soltó gruñidos similares a los de un animal, estos se vieron mezclados con algunos gemidos con una voz profunda que me provocaba temblores, Hunter comenzó a golpear cada vez más mi interior, así siguió por unos minutos hasta que curvé la espalda con fuerza mientras sentía como llenaba mi interior con su semen, quedamos en la misma posición por unos instantes, casi aguantando la respiración, finalmente caí exhausta a su lado, di comienzo a jadeos, tratando de recuperar el aliento, Hunter dirigió su vista hacía mí, tirando de mi cuerpo hacia él, dándome el último beso para luego levantarse, y comenzar a saltar para desaparecer a través de la espesura del bosque, no tardé mucho en recordar que el chico que había sido arrastrado seguía siendo atacado por el zombi, por lo que intenté levantarme con las pocas fuerzas que me quedaban, lo cual fue en vano y caí desvanecida...