¿Tipos como yo?/ Cap 2

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Estaba entrando al salón de clases, buscando mi asiento cerca de la ventana, alguien delante de mi escuchaba música y movía su cabeza al ritmo de la música, me acerque lentamente a ella- Me gusta como te mueves, imagino que verte bailar sería un sueño -Dije con mi sonrisa más coqueta. Ella giro bruscamente dejándome ver sus ojos verdes y su cabello castaño cayendo en cascada a los lados de su cara.

-Sería un sueño que no me vengas con esa mierda tan temprano -Dijo levantándose para cambiar de lugar. Era la misma chica de anoche, aún no sabía su nombre y me estaba comenzando a interesar .La seguí y ahora no me senté detrás de ella, me senté a su lado.

-¿Me dirás tu nombre o seguirás enfadada por lo de anoche?- Dije elevando un poco mi voz para que nos escucharan. Ella miro a las personas que nos veían y esbozo una sonrisa burlona para mi.

-Si esa es tu manera de jugar a "soy muy irresistible con las estupideces que digo" créeme no te será tan difícil ganar.

-¿Te han dicho que te vez hermosa cuando te enojas?- Le guiñe un ojo

-¿Te he dicho que me importa una mierda lo que digas?

-¿Qué desayunaste hoy? Te puedo llevar a comer si quieres, así cambia tu humor- Se giró hacía mi volteando los ojos bastante irritada.

-¿A tí que más te da?- Suspiro pesadamente. -Mira, déjame en paz por favor- ¿Qué la dejara en paz? No, esto apenas esta iniciando, es lo más divertido que me ha pasado en semana, que mal humor tiene, me hace gracia.

Se abrió la puerta de golpe llamando la atención de todos, el señor Montana me miro a mi y luego a la chica que estaba a mi lado, fue suficiente para saber que este asunto quedaría después de clases- Buenos días clase- Dijo con su tono seco habitual

-Ni tan buenos...- Dijeron al fondo del salón, pequeñas risitas escaparon de varias personas.

-Muy gracioso Victor, te daré una clase especial de orientación ¿De acuerdo?- No esperó que le respondiera, el avanzó hacía  Victor él cual estaba más asustado que mi hermanita pequeña viendo esas películas de miedo- Si giras tu cabeza a la derecha veras una puerta, al pasar por ella caminas derecho y al llegar al final del pasillo doblas a la izquierda, la tercera puerta esa será tu destino.

-¿La tercera puerta?- El estaba haciendo una clase de cuentas con sus dedos- Pero... Ahí esta la dirección.

-Muy bien, más 100 por tu buena orientación, ahora largo de mi clase- Después de ese acontecimiento, la clase continuo normal, sentía unas ansias increíbles por hablar con esta chica. Al sonar el timbre me levante en el momento que lo hizo ella, pero...

-Samantha espera un momento -Dijo el señor Montana- Quiero discutir contigo el última composición que escribiste.

Así que se llama Samantha decidi que la diversión no se iba a terminar en clase así que la espere mientras hablaba con el señor Montana, a los minutos salio con una sonrisa en su rostro la cual se borro por completo al verme, se dio media vuelta en dirección opuesta a donde yo me encontraba, corrí tras de ella y le dije.

-No tienes porque huir de mi, no soy tan feroz como lo aparento - Se paro en seco y puso una mano en mi pecho y me dijo.

-No, basta de esto, o sea lo que estas jugando, déjame fuera de tus planes- Sus expresiones cambiaban cada vez que hablaba, en un momento estaba frunciendo el ceño se le hacían unas arrugas lindas arriba de su nariz ¿Lindas? ¿Y ahora que estoy diciendo?

-¿De qué juego hablas? - Me estaba costando concentrarme en la platica ¡Vamos Damián concéntrate carajo!

-Todos lo saben, haces apuesta para acostarte con todas las chicas, con todo lo que lleve falda

-¡Pero tu no llevas falda!- Dije riendo traviesamente.

-Muy observador...- Suspiro, a todo esto ella aun tenía su mano en mi pecho como si tratará de alejarme- Estoy cansada de los tipos como tú, déjame en paz.

-¿Tipos como yo? Mira barbie de porcelana, no me conoces no te expreses así de mi- Muchas personas me habían dicho esa frase una y otra vez, estaba empezando a molestarme

-Pero bueno, que el chico tiene carácter- Dijo aplaudiendo una y otra vez, sus ojos se clavaron detrás de mí. ¿Qué era lo que miraba?

-Bebé, te he estado buscando- No, ahora no Cristal, se paro en medio de los dos y comenzó a besarme, mis ojos estaban abiertos y pude ver la cara de asco que hizo Samantha antes de irse.

En las tardes siempre era la misma historia Cristal se insinuaba más de lo normal, siempre que creía que íbamos a tener sexo algo le pasaba y salía huyendo. Para calmarme siempre subía a mi motocicleta y me iba al bar de siempre, hoy era Lunes lo cual implica que habría bailarinas, es normal ver a las chicas de baile de la universidad en este bar ganando algo de dinero extra. 


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El capitulo de hoy es muy corto :3 pero espero lo disfruten 



Mi obsesión, eres tú.- (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora