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SeokJin giró sobre sí, nervioso y emocionado de conocer al chico que estuvo enviándole mensajes de texto los pasados meses. Sus ojos reconocieron a un familiar chico de cabellos color rosa pálido.

"NamJoon" SeokJin sonrió, atrapándolo en un abrazo.

NamJoon era alguien en la clase de SeokJin, aunque tuvieron una sola conversación y otras que duraban poco tiempo. SeokJin estaba contento de que fuera alguien que quería conocer. Se separó del abrazo, sonriendo al chico más joven.

"¿Tenías expectativas sobre mí?" preguntó NamJoon. SeokJin sacudió la cabeza, negando y quitando la sonrisa en su rostro.

"Es la hora del almuerzo ahora mismo." NamJoon sacó su brazo, a la espera para tomarlo.

SeokJin aceptó y ambos salieron del edificio de la escuela. NamJoon encaminó al mayor a su auto, abriendo la puerta del asiento pasajero para él. Jin le iluminó con una sonrisa agradecida y se sentó dentro. El menor fue hasta el otro lado del auto, entrando en el asiendo de conductor y encendiendo el auto.

Él lo llevó a una pizzería, una que no le era familiar a SeokJin. Caminaron y ordenaron una pizza para compartir, con algunas bebidas.

Escogieron una mesa cerca de la parte trasera del establecimiento, esperando que su pizza fuera entregada.

"¿Como conseguiste mi número, en primer lugar?" preguntó SeokJin.

"Se lo pregunté a YoonGi" NamJoon sonrió, revelando sus hoyuelos.

SeokJin no pudo controlar sus acciones, inclinándose sobre la mesa para tocar los hoyuelos del chico más alto.

Jin no se percató de lo que estaba haciendo hasta que notó el congelamiento de NamJoon. Se apartó y se sentó, murmurando una disculpa.

Conversaron mucho más luego de aquello, sonriendo y riendo cada vez. Su pizza finalmente llegó e inmediatamente comenzaron a comer. No se dieron cuenta que se comieron la pizza entera hasta que vieron que no había más sobre la mesa.

"¡¿No hay más?!" SeokJin dijo.

"Ah... SeokJin, tienes un poco de salsa en tu mejilla" NamJoon señaló.

SeokJin trató de limpiarlo, sin éxito. NamJoon rió entre dientes, alzando una servilleta y limpiando la mejilla del contrario. El rostro de SeokJin inmediatamente se tornó roja, su corazón latía rápido.

NamJoon no lo notó y se levantó, yendo a pagar la pizza. Ambos caminaron hasta el auto del menor, volviendo a la escuela.

En el camino SeokJin no podía dejar de sonreír, pensando en lo que NamJoon había hecho.

ᴀɴᴏɴʏᴍᴏᴜs ▪ ⁿᵃᵐʲⁱⁿDonde viven las historias. Descúbrelo ahora