Capitulo 3

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Sus ojos eran bellísimos, no eran azules o verdes sino cafés, pero del que te deja imnotisada con lo potentes que son, no se veía con un cuerpo súper desarrollado pero se notaba que hacia ejercicio, estaba vestido con una polera de color gris, unos jeans oscuros y llevaba su pelo despeinado, se veía como todo un chico malo, pero misterioso. Cuando salí del transe pude ver que se disponía a hablar.

-Disculpa .- dice él de los ojos lindos- no te vi .- se agacha a recojer mis libros.

Realizo el mismo gesto, haciendo que nuestras manos rozen sintiendo un escalofrío por todo mi cuerpo.

- Tranquilo, yo fui la despistada - nos quedamos viéndonos unos segundos, cuando decide romper el silencio.

- Soy Aaron, por si no lo has notado soy nuevo .- dijo mientas levantaba su mana para poder estrechar la mía.

- Soy Emma- dije estrechando su mano.

- Buenooo, si no te molesta necesitaré alguien que me muestre la escuela, claro, si no te molesta- me miro fijamente con un sonrisa picara.

- no-o claro me encantaría, pero tengo clase y ahora mismo no podré lo siento.- dije con lastima, en realidad si quería mostrarle la escuela al de los lindos ojos, digo Aaron.

- No hay problema, ¿te molestaría en el receso?

- No hay problema

Me regaló una pequeña sonrisa

- Bien, te dejo para que no llegues tarde aa.... - alargó la a mientras revisaba mi libro que tenía en su mano, para ver que clase me tocaba- Química, adiós Ems, ¿Puedo decirte Ems ?

- Claro todos lo hacen

- Perfecto, Adios Ems - Dijo mientras se alejaba

Levante mi mano para despedirme, sinceramente no podía decir mucho, iba a pensar en esos ojos todo él jodido día. Reaccioné y salí corriendo a el salón de química.

Cuando llegué, él peluquín estaba ahí.

- Señorita Walker, ¿Estas son horas de llegar?- Me dice el mono peluquín feo.

Bueno no es la primera vez que llego tarde, no tengo idea porqué le sigue molestando tanto.

- Lo siento l tuve un inconveniente- dije algo agitada por correr.

- Por fin una escusa decente señorita Walker- me miro sorprendido

- Si, trabajo en ello - digo más calmada mientras camino a mi asiento al final de la clase.

Jamas he sido de las que se portan excelente en clases, siempre me sacan a dirección o me anotan y no presto mucha atención en clases, pero por alguna extraña razón el día del examen me va súper bien, una de las razones por las cuales el director ya no es tan severo conmigo

La clase trascurrió y yo lo único que hacía era escuchar música y debés en cuando miraba para el lado para ver que hacían en el otro salón. Pude visualizar a Aaron bien concentrado, me daba mucha risa verlo hací, se volteo y me descubrió mirandolo, le sonrei tímidamente cuando sentí a alguin tocer a mi lado me di vuelta.

-Señorita , si no quiere prestar atención la invito a ir a la oficina del director- dijo el peluquin apuntando la puerta- pero antes resuelva el ejercicio de la pizarra.

Me paré cabreada, tome él plumón de la mesa y realize él ejercicio, era muy sencillo, deje el plumón nuevamente en la mesa .- ahí tiene su ejercicio.- me volte rápidamente, pero pude notar a mis compañeros de clase con la boca abierta por la rapidez en que había realizado él ejercicio.

Al llegar a la oficina del director Richard, toque la puerta y sentí su voz dando me paso a la oficina.

- Señorita walker, ¿por qué no me sorprende verla aquí?-dijo mientras entrelazaba sus dedos y colocaba sus codos en el escritorio.

- No lo se Richard, el profesor es un paranoico .- dije sentándome en la sillita que gira para darme una vuelta.

- 1.No me digas Richard, 2.Por algo te mandaron aquí- dijo enumerando sus acotaciones.

- Solo estaba escuchando música, pero me pidieron hacer el ejercicio de la pizarra y lo hice en tiempo récord.

- Bueno, puedes irte- dijo cansado.

- Gracias Richard- dije levantándome para salir de la oficina.

Mi próxima clase era Lengua y no iba a ir, me aburre y mi profesora me odia, así que me voy a mi guarida, que es donde me escapo de el estrés de la escuela. Solo es un hueco en la pared del cuarto del conserje que esta al fondo del pasillo, ese hueco lleva a un pequeño cuarto el cual lo hemos decorado con Pía, veníamos a saltarnos clases, pero desde que sale con Josh, ni viene conmigo.

Iba entrando a el cuarto del conseje, cuando siento unos pasos detrás de mi, miro de reojo para atrás, logro ver la silueta de quien me sigue. En un giro lo tomo del brazo y lo llevó a su espalda levantándolo lentamente para que le duela, cuando veo bien su rostro me sorprendo al ver de quién se trataba.

Contra Mi DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora