Los ojos de mi princesa.

Capítulo 1: Oh Dios me salvaste la vida.

SCARLETT NARRA:

RINGGGGG!!!!!!!! RINGGGGG!!!!!!!

Odiaba ese despertador y más aún cuando me decía que era el primer día de clases. Estaba por cursar el tercer año de media-QUE HORROR- no es que odiara la escuela ni nada por el estilo, porque tampoco tenía razones para odiarla era muy buena alumna, tenía muchos amigos, unos varios de cada salón porque en mi escuela la secundaria es del primer año de media hasta el noveno año de media pero bueno que se le hiba a hacer, otra no razón para odiar la escuela es que los chicos babeaban por mi y no es que me gustara ni nada, solo que ayudaba a mi autoestima porque a mi me gustaba uno y solo uno y fue así desde que entre en la secundaria. Alán es mi amor platónico, simplemente él era perfecto, demasiado perfecto que daba miedo porque yo siempre escuchaba esa frase horrible que decía: " Hombre perfecto no existe y si existe no es hombre" eso me asusta un poco aunque no mucho porque yo creo que es todo un MACHO QUE SE RESPETA, jajaja me causaba gracia, pero no sé Álan me encantaba tanto en su aspecto físico como en el aspecto psicológico. Es alto, de cabello castaño, ojos color café que te penetraban el alma, sonrisa de comercial, holluelos que sacaban de sus casillas a cualquier chica, el mejor pecho del mundo con sus 8 cuadraditos enamoradores bien marcados y sus pantorrillas Oh Dios esas eran las mejores, un buen estudiante ( de los primeros puestos), todo un caballero, tenía mucho sentido del humor, cantaba demasiado lindo, etc. El partido perfecto para cualquiera.

Bueno era hora de dejar de meditar y levantarme para irme a la escuela. Me puse de pie y me dirigí al baño me vi en el espejo. No era muy alta pero lo suficiente como para que no me denominaran como una enana, mi cabello era de un color oscuro y caía sobre mis hombros en ondas bien definidas, mis ojos eran grandes y de color caramelo, mis labios carnosos y a la vez delgados y mis mejillas poseían un rubor natural, me parecía mucho a mi padre ( claro que en versión femenina )

Me di un baño súper rápido y fui corriendo a mi habitación a secarme y a vestirme con el buzo de la escuela, me sequé el cabello y me fui a la escuela tras despedirme de mi mamá y mi hermano. Mi hermano entraba después por ser alumno primarioso. Al salir de mi departamento me encontré con mi amigo César, yo vivía solo a unos pisos arriba de su departamento y también se iba a la escuela.

- Scar!!!!! - dijo el levantando los brazos.

- César, hola, Cómo estas? - dije yo dándole un beso en la mejilla como saludo.

- Bien, bien, y tu? - dijo él con una sonrisa enorme y saltando como si se muriera de ganas por orinar.

- Igual que tu, oye me acompañas a la escuela? -

- Oh no, es que... -

- Qué pasa? - sabia que me ocultaba algo, César cuando esta nervioso le tiemblan las manos, así que es fácil identificar situaciones como esta.

- Perdóname por no contarte, ya se que nosotros nos contamos todo pero estaba muy emocionado por esto que no se lo dije a nadie pero ahora ya todos saben pero no porque yo abriera mi boca, sino que... -

- Deja de balbucear y dime ya!!!!!! - lo callé antes de que me hiciera vieja escuchándolo.

- Ahora Camila y yo estamos juntos - soltó el como si nada mientras mi mandíbula caía al piso.

Camila es mi mejor amiga desde que tengo memoria y César la persigue desde que tengo memoria, los tres somos los mejores amigos pero ahora cada vez que salgamos juntos yo estaré ahí de violinista nada más.

La verdad es que lo envidiaba, mis relaciones no han sido las mejores que digamos. El octubre y noviembre del año pasado estuve con un chico llamado Diego Russel pero no duro más de 2 meses porque el solo me tenía para presumir con sus amigos. El enero y febrero de este año estuve con un chico llamado Sebastian Montenegro, lo nuestro fue lindo hasta que él prefirió no seguir más porque se cambiaría de escuela (lo cual no hizo). Este año quiero experimentar algo nuevo, algo diferente, algo de verdad. Si me gustaba Álan, pero no iba a quedarme sola mientras lo esperaba además esos chicos también me gustaron pero no tanto como él. YA NO QUIERO relaciones de niña boba, quería algo más serio, algo sincero, algo que solo podría darme Álan.

- Oh vaya los felicito, bueno me voy - dije yo abrazando a César y despidiéndome con la mano de él.

Bajé las escaleras corriendo y vi mi reloj, gracias a mi gran suerte todavía no era tarde y caminé a la escuela, no estaba muy lejos solo a unos cuantos pasos.

Como cosa del destino giré mi cabeza para mirar hacia atrás y lo vi, tan guapo como siempre a pesar de que no tenía expresión en el rostro, igual me encantaba. Estaba a solo unos pasos de mi, cuando un grito me sacó de WonderÁlan y era una señora con sus 34 años encima que gritaba: "Cuidado niña que viene un carro!!!!!!!" no entendí al principio pero luego me di cuenta que estaba parada en medio de la pista. Volteé para ver a un camión solo a unos metro de mi y lo único que hice fue resignarme y aceptar mi muerte cuando una fuerza me mandó hacia atrás y vi como el camión avanzó y el conductor soltó una palabra que daño mucho mi autoestima y finalizó rompiendo su claxón contra mi oído.

Volviendo a la parte de como había sobrevivido me encontré rodeada de unos brazos fuertes y musculosos y al frente mío un rostro angelical.

- La pista no es buen lugar para pararse - dijo Álan mostrándome una de sus mejores sonrisas.

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Bueno este ha sido mi primer capítulo no se olviden votar y comentar si les gusto o no, recuerden que estoy abierta a ideas innovadoras y nuevas.

Ok me despido con un abrazo psicológico. <3