Amores compartidos

Confesión parte II

Marinette escondió a Tikki detrás de unas latas de pintura y después abrió la puerta de la bodega muy nerviosa, se le notaba los ojos cristalinos, señal de que quería llorar, pero al verlo le enseñó una sonrisa y lo hizo pasar y dejó la puerta abierta. Adrien cerró la puerta de la bodega, lo que puso aún más nerviosa a la chica.
Adrien: -emmm, bueno, quería disculparme por lo que hizo Chloe, estemm, no era de su incumbencia, y pues, ummm (el chico pone su mano detrás de su cuello en señal de nerviosismo) bueno, no estuvo bien-.
Marinette: - pero, emm, tu no deberías disculparte, tu no hiciste nada-.
Adrien: -lo sé, pero al menos necesitas una disculpa aunque no sea la de Chloe, ummm, pero, dime Mari, ¿es verdad lo que dijo? ¿Yo...te... gusto?- decía esto mientras miraba a la chica a los ojos.
Marinette desvió la mirada y la fijó en el suelo, no quería mirar al chico y comenzó a sonrojarse.
- Vamos Mari, puedes decírmelo-.
La chica se armó de valor y dijo:
-si, tu me gustas y mucho-
El rubio se sonrojó al escuchar la respuesta de la chica. Se agachó y juntó sus manos, lucía cómo un pequeño niño. Era la escena mas tierna que podrían presenciar los dos.
Adrien:- bueno, mmm, ya tengo que irme, gracias por decirmelo...-iba a darse la media vuelta para salir de ahí, pero en eso la peliazul lo tomó del brazo y le pidió que esperara.
Marinette: - Adrien, eh yo, yo... ¿yo t-te gusto..?- la chica tartamudeaba cada vez mas al hablar.
El chico la miró y después fijó su mirada al suelo, su expresión cambió drásticamente a una mas seria.
Marinette:-¿A-aadrien?-.
Adrien: - Lo sie-ento Mari,eres una chica muy amable, lista y justa, además eres hermosa, desde que te conozco te aprecio mucho, pero,no sé si tú me gustas o no, de verdad lo siento, disculpame- lo dijo en un tono serio.
A Marinette se le entre cortaba la voz mientras decía:- no te preocupes, está bien- agachó la mirada y contuvo las lágrimas.
Adrien se sentía mal por no corresponder a sus sentimientos, al el no le gustaba en alguien en especial, por eso mismo la rechazó, porque no estaba seguro de sus sentimientos por ella. Ahora, por otro lado, él no sabía nada de como hacer sentir bien a las chicas, apenas hace un año había comenzado a conocer amigos y apenas comenzaba a entender cómo eran de lo que su mejor amigo Niño le platicaba.

En un intento de hacerla sentir mejor, la abrazó fuertemente mientras decía:- no te preocupes, por ti no diré nada de lo que pasó aquí, y podemos seguir siendo amigos, bueno, si tu quieres -.

Marinette asintió con la cabeza y continuó abrazada al rubio mientras éste acariciaba su cabello para que ella se tranquilizara, su corazón latía fuertemente, tal vez porque había sido rechazada o porque la consolaba el chico de sus sueños.Era la primera vez que Marinette se sentía mal porque la habían rechazado, pero también se sentía tranquila pues era Adrien Agreste quién la calmaba y daba consuelo. Era verdad, era un caballero y una de las personas más amables que ella conocía.
Poco a poco los latidos de la ojiceleste disminuyeron de ritmo a uno mas normal y el chico la soltó.
Adrien: - Admiro tu fortaleza Mari- dijo el chico mientras sonreía - ¿nos vamos?.
Marinette respondió a la sonrisa del chico con otra sonrisa que apenas se notaba, y después accedió a irse.
Los dos decidieron regresar a clase, pero cuando estaban a punto de entrar al salón, Marinette recordó que había dejado escondida a Tikkien la bodega de intendencia. -Ahora vuelvo, olvidé algo en la bodega- y la chica salió corriendo. Llegó al lugar y la pequeña criatura accedió a meterse en su bolso para que así pudiera acompañarla a todos lados.
Al finalizar las clases, Adrien seguía sintiéndose mal por la situación, por lo que decidió...