If I Could Fly [l.s] [os.] [au.] [mpreg.]

O.1

1 mes después...

Llevaba tres meses sin mi pequeño, sin el amor de mi vida. Cada día sentía que me ahogaba mas, el no tenerlo en mis brazos me dolía. Extraño sus besos y sus dulces caricias por la mañana. Extraño sus pequeños susurros que me decían te amo. Simplemente extraño todo de él.

"Hey, Harry ¡salgamos!" Dijo mi amigo Liam mientras entraba a mi habitación

"Hey Li, gracias, pero no, gracias. No me siento muy bien que digamos" le di una pequeña sonrisa desganada

"Oh, ¡vamos pequeño rizado! Niall dijo que estaría en la vieja cafetería del pueblo"

Liam Payne y Niall Horan. Mis dos mejores amigos desde que tengo memoria. Ellos siempre estaban ahí para mi como yo para ellos. Durante estos tres meses, han intentado sacarme de mi habitación varías veces. Ninguna de ellas funcionó.

"Solo quiero saber dónde está mi chico. No es tanto pedir." rodé los ojos y me cubrí hasta la cabeza con mi cálida manta color azul. Como los ojos de Louis.

"Bien, entiendo. Pero así nunca lo encontrarás" bufó "te llamaré más tarde Styles. Sal de este lugar, por favor."

Probablemente los chicos tenían razón —siempre la tienen— y tenía que hacer algo para encontrar a Louis. Decidí que era tiempo de hacer algo. Me levante de mi cómoda cama con desgano y me puse mis botas color marrón —ya un poco desgastadas— me enfunde en unos skinny jeans negros y decidí que no cambiaría mi playera. No he salido en varió tiempo y no parece estar sucia. Mi miro en el espejo y... Lo mejor sería cambiar mi playera, tiene una mancha de helado de chocolate del lado izquierdo y lo que parece ser moco en la parte inferior.

[...]

Me encontraba sentado bajo un gran roble en la plaza central del pueblo. Nunca me había puesto pensar en cómo mi vida había cambiado tan drásticamente desde que Louis Tomlinson entro a mi vida hace tres años. Recuerdo cuando conocí a Jay, yo era un manojo de nervios. El momento en el que pise la casa de los Tomlinson, gritos y grandes sonrisas brillantes salieron a la luz.

Un foco dentro de mi cabeza se encendió. ¿Como no lo pensé antes? ¡La casa de los Tomlinson! Jay debe saber dónde está Louis.

[...]

La casa de los Tomlinson —o como yo prefería llamarlos "equipo Tomlinson"— estaba frente a mis pies, con sus bellas rosas regadas por el jardín principal y las pulcras paredes pintadas de blanco. Estaba justo como la primera vez; tan hogareña, con ese olor a canela por doquier.

Varios gritos se escuchaban desde adentro, por lo quería creer que el equipo Tomlinson debería estar en casa. Toque el timbre esperanzado por tener respuesta. Y así fue. Una castaña cabellera, acompañada de unos grandes ojos se postró ante mi. Era una de las gemelas.

"¡Harry!" grito con entusiasmo cuando me vio y se aferró a mis piernas "¡Mama! ¡Lottie! ¡Fizz! ¡Vengan todos! ¡Harry esta aquí!"

La primera en salir fue Johanna mientras que un pequeño y mofletudo Ernest mordía su pulgar izquierdo.

"Harry, ¡que gusto verte por aquí muchacho!" Me sonrió maternalmente "Lou ha estado muy triste desde que se fue de tu lado."

"Jay, amo a Lou, el es mi vida entera. No entiendo porque se fue" Las lágrimas pican en mis ojos color esmeralda mientras tomaba su mano "Juro que nunca hice nada para dañarlo."

"Harry, cariño, está no es mi historia. No soy la indicada para informarte sobre lo que está sucediendo, el que debe decirte es Louis."

"¿Dónde está el?" Mordí mi labio mientras sollozaba.

"El está en su habitación. Ya sabes dónde es."

"¿El estuvo todo el tiempo aquí?"

"Claro que lo estuvo, no quiere salir desde hace ya tres meses" suspiro "No en su estado."