No todos somos fuertes.

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No todos somos fuertes por naturaleza, algunos tenemos que aparentarlo o intentarlo. Ese fue el caso de aquella niña que a pesar de su pasado oscuro quería un presente con luz propia. Pero todo se torció. Sin darse cuenta callo en la peor cárcel de todas, se enamoró, y no de cualquier enamoramiento sino uno no correspondido. Ella lo amo y lo cuido desde aquella pared la cual sabía cuanto ella había llorado y sufrido por el. ¿El chico? Solo la ignoraba y la menospreciaba solo por su físico. Ella 3 años y medio después decidió olvidarlo aunque tiempo atrás lo intento varias veces y nada. Pero esta vez si lo conseguiría, y así fue. Un tiempo después ella puedo sonreír sin necesidad de un motivo en concreto, con sólo saber que se quería a si misma le valía. Pero cuando la vida se va enderezando es cuando más se curva.

Aquella Chica fuerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora