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Sé que todo lo que diga en esta carta puede resultar absurdo y bastante inconcebible o puede que en algún fragmento pueda dar la impresión de que todo esto es un broma de mal gusto, pero con el tiempo verás que no es así. Antes que nada discúlpame por la falta de modales, no me he presentado. Soy Jimin, Park Jimin. Sí, tenemos el mismo nombre y no es ninguna coincidencia porque yo soy tú, o sea tú eres yo. Suena confuso pero soy tu yo del futuro, y te escribo esta carta a ti, mi yo del pasado, porque sentía la urgente necesidad de pedirte un caprichoso favor. Quiero contarte acerca de todos los errores que cometí en el pasado para que los evites y puedas borrar mis arrepentimientos.

Dejó de leer inmediatamente aquella carta. Era obvio que nada de todo eso podía ser real.-Una broma pesada de Hoseok. Sí, tiene que ser eso.-pensó intentando autoconvencerse. Devolvió la carta al sobre y la metió en la mochila inmediatamente para abandonar su casa pues iba a llegar tarde a su primer día de instituto.

Llevaba mes y medio de vacaciones y todos sus amigos habíamos estado de viaje fuera, así que no habíamos podido vernos en absoluto, y hoy volveríamos a reencontrarnos todos juntos después de las vacaciones. Pensó que seguramente tendríamos muchas cosas que contar, y él en cambio, poco había hecho durante su estancia en la monotonía de Nagano, lo más llamativo que le había sucedido era la enigmática carta recibida esta mañana y en la que seguramente alguno de ellos estaría involucrado. Así que se limitaría a escuchar atentamente las anécdotas de sus amigos como estaba acostumbrado a hacer, pues Jimin era, por lo general, un muchacho de pocas palabras.

Aceleró la marcha en cuanto se percató de que tan sólo quedaban segundos para que el director diese comienzo a la ceremonia de bienvenida. No daría muy buena impresión llegar tarde desde el primer día, y su reputación de chico aplicado y puntual podría verse mancillada. No lo podía permitir.

Obviamente Jimin logró llegar a tiempo aquel día y nos reencontramos los cinco de nuevo. No estoy muy seguro aún si fue cosa del destino o alguna señal de las estrellas pero aquel año nos tocó a todos juntos en la misma clase: 2º-B. Este sería sin duda un curso inolvidable (y, efectivamente, así fue).

Justo como había predicho Jimin; Taehyung y Seokjin se pasaron gran parte del tiempo relatándonos sus aventuras en el extranjero. Tae había estado en Francia con su familia, pues al parecer el padre dirigía una importante empresa de exportaciones y solía viajar allí para resolver algunos asuntos referentes al trabajo, pero esta vez se llevó con él a su familia para explorar la zona. Jin, en cambio, había estado visitando a su tía en Corea del sur.

Mientras, Namjoon y yo no habíamos abandonado el país, él fue a visitar a su hermano mayor en Tokio, y yo estuve en la casa de verano de la familia en Kioto, con mis padres y mis abuelos.

Jimin fue el único que permaneció durante todas las vacaciones en la prefectura de Nagano. Su padre trabajaba en una pastelería y no podía abandonar el negocio en plenas vacaciones, pues era una de las épocas del año en que más vendía.

¿Y tú, Jimin? ¿Qué has hecho para pasar el tiempo mientras estabas aquí? ―Pregunté curioso a Jimin aunque ya predecía su respuesta.

Ayudar a mis padres en la pastelería y leer, nada interesante.―respondió en un murmullo. Justo como había imaginado, habrá aprovechado al máximo cada segundo para leer todas las novelas que tenía pendientes.

La conversación fue rápidamente interrumpida por Taehyung. ―¿No deberíamos ir a clase ya? Aún nos queda conocer al resto de compañeros...― hizo una pausa y después, mirando a Jin con complicidad, añadió.― Y compañeras de clase, por supuesto.

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⏰ Last updated: Dec 20, 2016 ⏰

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Orange ➳ YoonminWhere stories live. Discover now