"La muerte es algo que no debemos temer porque, mientras somos, la muerte no es y cuando la muerte es, nosotros no somos" Antonio Machado
la lujuria: el deseo prohibido de los pensamientos incultos ante el amor que se une con el pasión de la exacerbación hacen reflejar lo siniestro de la tentación sexual, matar: el deseo macabro de ver la sangre áspera e intocable de aquel ser que nos a hecho sentir el ser mas putrefacto de la vida y el suicidio: el deseo sanatorio de unirse con la muerte en un baile de dolor. Estas son las fantasías mas temibles, las fantasías mortales de una sociedad amante del sufrir, que hacen que nuestras mentes se saturen en lo que puede ser bueno y malo de la vida.
En el momento inquietante en que Alice vio el reflejo impetuoso de Evan en aquel cristal de vidrio, sintió ella quizás las fantasías mortales se asomaban sus ojos candorosos, Evan simplemente le hizo una sonrisa algo macabra, su manos impetuosas estaban de un color rojo extraño y sus ojos reflejaban haber visto el infierno, el se acerco fluidamente a Alice y con su mano le acaricio el rostro de Alice, el la miro fijamente a sus labios áridos y le dijo:
- Alice, Alice tus sonrisa me ha hecho aclamar a mis peores pesadillas...Alice, Alice sálvame sálvame por favor
Después de declamar esta palabras una y otra vez Evan callo violentamente al suelo, Alice atemorizada levanto con gran fuerza el cuerpo de Evan y lo llevo vertiginosamente afuera de la fraternidad
-Evan, Evan, no me dejes sola- replicaba Alice con una voz temblorosa mientras que es sus mejilla se arrastraban lagrimas, Alice estaba aturdida, en los brazos de Evan aparecían grandes heridas de figuras abstractas, Alice cogió una navaja del bolsillo de Evan, y paulatinamente pero con vigor paso la navaja por su mano, la sangre que se resbala del la mano de Alice caía con brusquedad en las heridas de Evan mientras ella recitaba palabras inexplicables, misteriosamente las heridas de Evan sanaban, pero cada vez que esto sucedía Alice se ponía mas débil.
cuando las heridas de Evan desaparecieron, el despertó y asustadamente observo a Alice, ella estaba pálida, sin fuerzas, abstraído Evan levanto el cuerpo seductor de Alice y lo llevo rápidamente su casa donde la dejo reposar en su cama
Al dia siguiente cuando Alice despertó observo que al lado de la cama había una nota que contenia un perqueño poema el cual decía:
Querida Alice:
suspiraste la maldad de mis ojos malditos
acompañados por el delirio de mis labrios
hiciste un "juego de sombras"
la noche desolada
en que habitaba el incenso
de la sangre de mi amado cuerpo
extrañe el pensamiento de la pasion
que traspaso tus flácidos labios
desgarre la tensión de tus manos
atraves del deseo del morir
Evan Rockwell
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amor inmortal
Romanceesta es mi primera novela, poco a poco iré publicando los nuevos capitulos cierra los ojos imagínate que eres Alice Saymoure una chica tímida, jamas besada, que tiene un gran poder y que vive en un abismo de oscuridad deseando ser rescatada, ahora i...
