Apenas puse un pie fuera de la cama me di cuenta que este día iba a ser igual que los demás. Y pensé ¿por qué cambiaría?
Que tonta que soy a veces. Mis días siempre son iguales: me preparo, desayuno, me voy y empieza el infierno.
Tengo un hermano. Él es uno de los popus.. Extraño tanto cuando hablábamos. Se preguntaran ¿qué fue lo que pasó? Bueno, cuando a mi me empezaron a maltratar, el se alejó como un cobarde para que no le hicieran nada a el. Fin del comunicado.
Tengo una mejor amiga, en realidad mi única amiga. Pero estamos iguales, siempre nos esperan a la salida y nos dejan tiradas, a veces sangrando otras solo con golpes. Ni yo se porque nos hacen esto.
En fin mi vida es una mierda con todas las letras. Pero se que algún día todo va a acabar y voy a cumplir mis sueños. Eso espero.
En eso tocan mi puerta
-Pase.- Entró mama, aveces la odio tanto. Pero en fin la quiero, es mi madre ¿no?
-Hija ya esta el desayuno, anda bajando.- se la veía triste pero no puedo hacer nada. Me termine de preparar y baje. Liam ya estaba sentado al lado de papá. ¿les dije quien es Liam cierto? Mi hermano. El cobarde.
-Buenos días.- Dije y me lo devolvieron. - Ma, ¿pasa algo? Te noto rara.
-Les tenemos que decir algo. - La mire para que siga - Con tu padre nos salio un proyecto de trabajo. Nos pagaran muy bien. Pero lo malo es que tendremos que viajar y dura todo este mes. Estaríamos volviendo a fin de mes.- Me levante de la mesa. Siempre lo mismo.
-Buen viaje.- Dije y salí para ir al instituto.
En todo el camino fui pensando en el viaje de mis padres.