Enamorada de un pelotudo-Gonzalo Goette

Capitulo 18

Abrí los ojos a causa de que escuchaba a los chicos hablar "despacio" por que lo que menos hacian era hablar despacio. Nadie me estaba mirando, volví a cerrar los ojos.

-Dale pelotudo, acostala acá-se empezaron a cagar de risa y Gonzalo se agachó un poco para recostarme, despues pude sentir que se acostó al lado mío, escuché los pasos de los chicos y después el ruido de la puerta cerrandose.

Estábamos solos.

Me empezó a tocar el pelo con sus dedos, una delicadeza que no se imaginan. Después de unos minutos paró y se quedo en silencio y me dio un beso. Cuando se empezó a separar lo agarré del cuello y lo empujé a mis labios de nuevo, correspondiendolé su beso.

-Sos una salvaje, no puedo ser dulce-Dijo en el medio del beso y me agarró de la cintura subiendome arriba de el.

-Vos conmigo podes ser como vos quieras.

Seguimos en la nuestra y estuvimos así toda la noche.

-Apaaa, como estamos por aca...-Era otra vez Tomi, me cae bien pero a veces lo odio. Sarcasmo.

-Dale boludo, tomatela-Le pidió Gonzalo aunque fué en vano porque Tomas ya había empezado a grabar.

-Ojala que seamos amigos para que el dia que tengas novia yo vaya a joderte-Me quejé

-A todo esto, ¿vos no estabas dormida, pequeña?

-Dejanos en paaaaz-Le gritó Gonzalo y le tiró con una almohada

-Paren, eu, me dan lastima los dos porque tipo andan a los besos y apretadas pero no es nada oficial lo de ustedes-Sin pedirle que lo haga, se fue de la habitación y me quedé pensando en lo que dijo, tenía razón.

Me bajé de arriba de Gonzalo y me acosté a su lado.

-Boluda, ¿Qué te pasa?-Preguntó

-Nada, Gonzalo.

-Dale, decime eu

-No te das cuenta que Tomas tiene razon, no somos nada. Ni siquiera amigos porque hace 2 semanas nos conocemos

-¿Y que tiene? hay veces que es normal.

-¿Qué es normal?¿Qué siempre esté atrás tuyo como un perro?¿que siento que no te merezco?-Levanté la voz.

-¿Y entonces qué es lo que queres?

Suspiré y pasé por arriba de él para irme al baño, no hay chance de que entienda lo que quiero. Y lo peor es que el sabe que lo que tenemos es más que una amistad pero menos que una relación. Ya no doy más, ¿Cuándo va a entender que lo necesito?.