Capítulo 24

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Abrí los ojos y estaba en el sillón, en los brazos de Gonzalo. Nos habiamos quedado dormidos.

Lo primero que se me vino a la cabeza fue Maia, la puta madre.

-Gonza-Intenté despertarlo, era como un angelito-Mi amor, me tengo que ir.

Pero nada, no podía despertarlo. Entonces comenzé a repartir besos por toda su cara.

-Que linda forma de despertarme-Le di un pico.

-Me tengo que ir, la dejé plantada a Maia.

Bufó y se levantó.

-No, no, queda cerca-Le puse una mano en el pecho dandole entender que no era necesario que me lleve.

-Pero mira si te pasa algo...-miró para arriba intentado imaginar alguna situacion que seguramente a el solo se le ocurria.-No, vamos.

Se paró y me agarró de la mano para irnos.

¿Alguna vez voy a poder ganar yo?

-Naranjaas!! me voy, en 5 vuelvo-Le avisó a Tomi y antes de salir me plantó un beso en el cachete. Que amor.

Nos subimos al auto y partimos camino a casa. Estaba tan muerta de sueño que me dormí apoyada en mi brazo. Me desperté unas cuadras antes de llegar, estaba rezando interiormente de que no haya abierto la boca como una morsa o haber roncado.
Frenó al frente de mi casa, habiamos llegado y yo seguía dormida.

-Despertate, bella durmiente-Estaba grabando un snap asi que lo unico que hice fue esconderme más.

-Gonza basta-Me quejé-Me voy.

Le di un pico pero parece que para el no fue suficiente porque me volvió a atraer a sus labios, estabamos chapando.

-Avisame cuando llegues-Le pedí y me bajé del auto, crucé la calle y saqué la llave para abrir la puerta. Me dí la vuelta y Gonzalo estaba esperando a que entré, cuando pude abrir la puerta le tiré un beso al aire y sonrío. Entré a casa y cerré la puerta para después irme directo a mi cuarto.

Una de las mejores noches de mi puta vida.

Enamorada de un pelotudo-Gonzalo GoetteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora