Enamorado de la luna.

Nuestro contraste.

Y ahora no sabíamos si decir alguna frase de despedida,ya escrita por otra persona.
Si decirnos "hasta luego" o "adiós".

Ni un beso en la mejilla nos dimos, que era lo mínimo que podríamos habernos regalado.

Ella cruzó al otro lado de la calle,y desde la otra esquina me miraba, me desconocía, me odiaba.Y en el fondo aún me amaba.

Y ahí sentí que le rompí el sentimiento que tenia por mi, que mi visión triste de la vida ,en todo este tiempo opacó su sonrisa.

Pero es que, MIERDA!!!
Nadie sabe amar,todos estamos improvisando.
Lo seguimos intentando, aun con el fracaso atormentandonos en todo momento.

Y es que las personas ya no sabemos amar de una forma genuina.
Últimamente amar es como lanzar primero la mochila del paracaídas y luego tirarse uno tras ella para intentar atraparla.