Save Me

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Capítulo 30 "Save Me"

-Momentos atrás-

Pov. Narrador

-¿Estás listo?-Pregunto el pelinegro dándole una palmada en el hombro del oji ámbar. Este último solo asintió y sonrió con nerviosismo. Hoy le expresaría sus sentimientos a Aome como más lo sabe hacer y eso era cantando. Pero todavía tenía miedo a ser rechazado y más ahora que se preguntaba lo que haría si Aome le dijera que lo prefería a él. Ambas cosas llevarían a situaciones parecidas, él indirectamente le haría daño a la azabache.
¿Por qué? Sencillo. El peliplata se retomaría su gira, ahora iría a Europa. Pensó en que posiblemente eso no le importaría a la morena pero obviamente se sentiría triste, ella ya tenía una vida planeada aquí y él otra vez llegaba solo para volver a irse, pero quería seguir cantando. Cantar era su afición. Amaba cantar las cosas que sentía y amaba sentir como el público se conmovía. Pero Aome también significaba algo muy fuerte en él y quería que ella supiera el cómo se sentía.

-Ya está todo listo joven, estamos listos para tocar, Koga también ha decidido no abandonarnos, aunque añadió que no lo hace por usted, más bien, solo por lucir bien frente a las chicas.-Sebastian lucía diferente, excepto por su forma de hablar, si lo veías con ese atuendo nunca reconocerías que trabaja como mayordomo. Llevaba unos jeans ajustados y rasgados, con una camiseta sin mangas color vino que también estaba rasgada por algunas partes y unas botas que -si de por si él era alto- Lo hacían lucir mucho más alto y dominante. Todas las chicas ya le habían puesto el ojo, a pesar de que la mayoría iba a ver a Inuyasha.
-¡No digas tonterías! ¡Jamás haría algo por este estúpido perro!-Koga había aparecido tras bambalinas y se encontraba furioso por lo que acababa de decir Sebastian. Más que furioso, en realidad estaba avergonzado.
Inuyasha pensó que quizás -Muy poco probable- Si a Koga nunca le hubiera interesado Aome y se hubieran conocido en unas buenas circunstancias, mejores de las que habían tenido con anterioridad, existía un poco probabilidad de que ellos dos, perro y lobo, se llevaran bien.
El peliplata no dijo nada y sonrió, en realidad iba a extrañar mucho a todos ellos, a Miroku y a Sebastian un poco más que a Koga pero no dijo nada y les pidió a todos que se prepararán, ya estaban vestidos y algunas chicas se ofrecieron a maquillarlos, solo tenían que esperar para poder salir al escenario.
En su mente, el oji ámbar visualizo a Aome en primera fila, hoy le tenía que decir que se marcharía pero que no quería que fuera como hace 3 años, quería que fuera diferente. Diferente-Mejor. Dejaría de preocuparse por su padre y por Sesshomaru. ¿Cómo es que ambos habían estado enamorados de la misma chica? ¿Eso era lo único que tenían en común? Habría deseado que su relación con el mayor hubiera sido mejor. Mejor que cualquier otra. Mejor como hace 11 años.

-Chicos, es hora.-Había aparecido una chica de cabello corto y castaño, ella era la encargada de manejar el escenario, se sorprendió de que no hubiera sido Aome quien les diera el aviso para salir pero prefirió pensar que ella estaba en primera fila como lo había imaginado y cuando Inuyasha saliera las cosas que tenía que decirle saldrían por sí solas, como siempre lo hacían cuando menos imaginaba que sucederían.
Con nervios camino hacía el escenario, se posiciono en su lugar y espero a que las cortinas se elevarán para comenzar a cantar. Lo había hecho tantas veces en infinidad de escenarios, pero ¿Cómo es que ahora sentía que el aire le faltaba? ¿Cómo es que por primera vez él, Inuyasha Taisho, se sintiera tan nervioso que no se acordaba ni de cómo respirar?
Volteo a ver a Miroku, este le sonrió, Sebastian hizo lo mismo mientras que Koga le susurro un "No lo arruines" mientras le dedicaba una pequeña sonrisa y se daba aires de superioridad.

La presentadora dio el anuncio de que empezaría el evento e Inuyasha tomo aire y después lo expulso. Las cortinas empezaron a abrirse y los gritos y aplausos eufóricos de los alumnos del instituto y personas ajenas a la escuela empezaron a resonar en los oídos del peliblanco. Tomó el micrófono entre sus manos mientras que la niebla de colores y todas las luces empezaban a esparcirse, en ese instante, todo se detuvo, la música empezó a sonar y sin importar toda la mierda que tenía por delante, sin importar todo lo que tendría que pasar, en ese momento sintió que alas comenzaban a surgir de su ser y sin limitarse a no hacer algo, decidió actuar. Porque sabía que esta vez sería diferente, este día, no se volvería a ir como el idiota que lo hizo hace 3 años, no, esta vez se iría diciéndole a Aome todo lo que tenía que decirle.
Y en ese momento, todo comenzó a tener luz.

Amor Prohibido || MPA2||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora