D U D.[YoonJin]

o n e

Salté la reja como cada miércoles y corrí lejos de allí, la escuela en un par de minutos quedó atrás.

El bosque donde solía ir era mi lugar favorito; solitario, misterioso, silencioso, tranquilo.

Como él.

Me senté apoyando mi espalda en uno de los grandes árboles y de mi mochila saqué un libro para continuar con mi lectura -'sacrificio'- junto con mis auriculares.

Avancé en el libro hasta que un par de pies se pronunciaron delante de mí y sonreí como siempre; este era nuestro lugar secreto.

- Hola, SeokJin - cada que esos labios emitían una palabra, mi cuerpo entraba en alerta-.

- Hola..- fue lo que alcancé a decir ya que sus labios atraparon los míos en un roce dulce, como a mi me gustaba-.

Yoongi se sentó a mi lado y apoyó su cabeza en mi hombro.

- ¿Qué tal la escuela? - preguntó entrelazando nuestras manos-.

- Sin novedad.

Yoongi desapareció de mi vida cuando apenas tenía 7 años, volviendo a aparecer hace un año atrás, en este mismo bosque. Después de diez años sin verle.

Y fue en este mismo bosque donde empezamos una extraña relación. Es por eso que este lugar es mi favorito, por encima de todo.

Corrigo; Yoongi es mi lugar favorito.

Su mano acariciaba mi pierna sin pudor, tentandome. El libro pasó a segundo plano hacía un buen rato y mi cuerpo sólo se concentraba en lo débil que me hacían sentir sus caricias.

Tomé su rostro con mis dos manos y él me regaló una sonrisa, de esas que me derretían por dentro, de esas que producían las típicas mariposas en el estómago.

Yo estaba completamente enamorado de Yoongi; él era mi todo, absolutamente.

- Hazme el amor, SeokJin.

Fue directo, y por segundos mis mejillas se volvieron rojas. Lo recosté despacio en la tierra humeda, su espalda chocaba con las hojas secas y el ruido de éstas hacían eco en ese lugar.

Era perfecto, no pedía absolutamente nada más.

Lentamente lo despoje de cada una de sus prendas, su pálida piel era única. Yoongi era una obra de arte.

Nuestros cuerpos hacían fricción y sus suaves gemidos, esos suaves gemidos eran música para mis oídos, amaba escucharlo gemir.

Me introduje en él repetidas veces, sus uñas se enterraban en mi espalda como si este fuese el último día, con desespero; escucharlo gritar mi nombre no tenía ningún punto de comparación.

Su respiración era irregular, su pecho subía y bajaba rápidamente y mis penetraciones eran aún más profundas.

- Uhm..Seok-SeokJin...

Atrapé sus labios, jugando con ellos.

Su entrada se volvió estrecha y sabía que estaba por venirse.

- Espera un momento, cariño.

- No...puedo, SeokJin...uhm

Su mirada estaba pérdida, él estaba en otro mundo.

- Sólo un momento, mi amor.

Asintió y comencé a moverme otra vez pero ahora de manera más lenta, su trasero estaba rojo debido al choque de piel.

Nos vinimos, juntos. El sudor corría por nuestros cuerpos y hacía que estuvieran pegajosos; nada me importaba más que su felicidad, nada.

- SeokJin

Escuché su voz después de un rato.

-¿Hm?

- Lo eres todo.

Estúpido.

Sonreí como un estúpido.

Yoongi se levantó y limpió su cuerpo con su sudadera, sentado y desnudo en la tierra observé cada uno de sus movimientos, como cada miércoles.

Después de que él estuviera completamente vestido, se agachó hasta quedar a mi altura, dejando un suave beso en mi frente.

- Nos vemos, SeokJin. Y ya sabes, no me sigas.

- Lo sé.

Comenzó a caminar desapareciendo entre los árboles.

Me vestí rápidamente ya que la noche estaba llegando y no quería ningún reto por parte de mis padres; en el camino a casa mi rutina era recordar cada uno de sus movimientos, el sabor de sus besos, lo suave de sus caricias, su dulce voz, su cuerpo. A Yoongi.

Estaba en mi punto máximo de felicidad.

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WEYYY HOLI
LOS CAPÍTULOS SERÁN CORTOS, NARRADOS POR SEOKJIN (en algún momento dado, Yoongi lo relatará).
SO, NUEVO FIC.
#PERDÓN:(((

OJALÁ ME APOYEN IGUAL QUE EN LOS OTROS, ME HACE MUY FELIZ VER SUS COMENTARIOS!♡