Little White Lies (Harry Styles)

Capitulo 16 #Harry....

El bullicio no me deja pensar, me siento desconcertada y mareada, oh dios. Miro al rizado frente a mí, tiene una lata de cerveza en la mano y ríe descontrolado hablando con sus amigos. Noto como las chicas comienzan a bailar y yo sigo pasmada, recibo un codazo por parte de alguna de ellas y no tengo más opción que concentrarme



Me incorporo a la coreografía e intento no tener cara de asombro, quito la vista de Harry y hago lo mío, el baile esta a punto de terminar y se lo que sigue, debo ir con el "cumpleañero" debo ir a bailarle, no puedo hacerlo, no puedo.



Deja de pensarlo regaña mi cerebro



Ya es tarde, es mi turno, intento tranquilizarme ¿Qué mas da si me descubre? A la mierda, todo lo hare, y tomando aire profundamente avanzo decidida a el.



« Yo no se bailar »

« Solo déjate llevar por la música »



Los recuerdos de la fiesta acudían a mi mente, aquella extraña noche, mi "primer baile" con Harry y baile en general, recordé como había perdido la vergüenza y la forma en que había disfrutado aquello, ya lo había hecho una vez ¿Por qué no podía hacerlo una segunda? Por las razones obvias, este baile era mucho más provocativo, sin contar mi falta de ropa....



Harry estaba sentado en una silla en el medio de la sala, llevaba una camisa azul con corazones blancos que le quedaba perfecta. Cuando estoy lo suficientemente cerca me volteo y al ritmo de la música comienzo a mover mi trasero en su dirección, escucho a lo hombres extasiados a mis espaldas, continuo con esto durando uno pocos minutos, subiendo y bajando, meneando de aquí para allá.



Siento las manos de Harry sobre mi piel, me atrae mas a su cuerpo mientras sigo moviéndome al ritmo de la música, tiene ambas manos en mi cadera y deliberadamente me da una nalgada, apostaría que tiene una sonrisa extasiada en el rostro al igual que todos los hombres en el lugar



Vuelvo a voltearme y lo observo a los ojos, confío en que mi antifaz y el alcohol en su cuerpo le impidan reconocerme. Deliberadamente me siento en su regazo, el esta sonriéndome y ríe con los comentarios sucios de sus amigos, sabes, comienzo poco a poco a perder el miedo y a disfrutar de esta sensación.



El vuelve a poner sus manos una a cada lado de mi cadera, acerca sus labios a mi cuello pero lo tengo y coloco un dedo en sus labios negando con la cabeza, los gritos a nuestro alrededor aumentan, comienza a gustarme el poder tener alguna clase de control sobre el. Trato de memorizar todos y cada uno de los concejos que me dieron las chicas, todos aquellas formas de interactuar con el, jueguitos de provocación y cosas por el estilo.



Me bajo de su regazo y camino a su alrededor, con el rabillo del ojo atisbo a ver a Macy bailándole a Louis. Camino hacia uno de lo chicos del montón y le quito su corbata, el chico parece tan excitado que temo que se me lance encima. Vuelvo hacia Harry y llevo sus manos a su espalda amarrándolas con la corbata. Regreso y me siento en sus piernas, el aun sonríe y noto que sus ojos están oscurecidos. Comienzo a succionar su cuello mientras desabrocho lentamente su camisa, aun moviéndome al ritmo de la música, una vez abierta por completo hago un trayecto con mis labios por su pecho, por ultimo descubro que puedo ir mas haya y lamo su pecho tatuado.



¿De donde salio todo esto? No sabia que poseía este lado un poco mas atrevido y salvaje



Harry comienza a mover deliberadamente sus caderas contra mi y siento como la situación se va tornando demasiado caliente, me paro poniendo una pierna entre las suyas y la otra del lado izquierdo para así poder tener mas movilidad, vuelvo a bailar pero esta vez de forma mas lenta y contra su cuerpo, al compás de sus caderas contra las mías. Reconozco como pronto la música esta llegando a su fin, debo ir acabando el "show" para hacer la gran despedida.



Vuelvo a caminar a su alrededor y le quito la corbata, la enrosco a su cuello tirando de ella para que nuestros rostros queden a centímetros, beso su cuello y me alejo deliberadamente al centro de la pista contoneando mis caderas, hacemos una clase de pose grupal cuando las ultimas notas de la canción suenan. Los gritos de aclamación no se hacen esperar mientras salimos de la habitación.



Camino por el pasillo y nos detenemos en otra sala, respiro hondo, estoy agitada y el corazón me late como los mil demonios. Me acercan una botella de agua y la bebo recostada contra la pared, no puedo mas, las emociones están revolucionando mi sistema, solo quiero volver a mi casa, meterme a la cama y procesar todo lo que acaba de pasar, algunas copas no me vendría mal...



-¿Ya nos vamos?- pregunto impaciente



Las chicas me observan curiosas y algo divertidas pero se ahorran sus burlas, se ponen sus abrigos mientras charlan de cosas tribales



-Ya nos vamos- anuncia el Grinch, luego me observa dudando- Menos tu Clary, El cumpleañero...Harry, quiere verte



¿Verme? ¿A mi? oh no dios mío me descubrió, estoy segura de ello, creo que palidezco un poco mas de lo que ya me encontraba, me aferro con toda mi fuerza a la botella mientras la adrenalina vuelve a correr por mis venas y mi corazón galopa en mi pecho. Quiero correr y esconderme en algún lugar hasta que todo pasa, pero otra parte de mi esta sutilmente empujándome en dirección al Grinch el cual se supone va a guiarme a Harry ¿verdad?



Sin que pueda pensarlo mis piernas ya están en movimiento, El Grinch me indica el camino, por supuesto no va a guiarme por lo que medio me tambaleo por los pasillos abandonados del lugar, la música aun retumba por todos lados y es muy probable que todos sea un caos en la otra habitación tratándose solo de hombres



Llego a la puerta de la habitación indicada, estoy comenzando a temblar y la sensación de mi pecho me esta inmovilizando, Vamos no seas una cobarde me digo a mi misma. Llevo la mano al picaporte y con una respiración honda, entro a la habitación



El lugar esta a oscuras, una muy leve luz que viene desde la ventana me permite ver las siluetas, y diviso una muy cerca, mi corazón se acelera por que se que es el, se que es Harry por la sombra de su mata de rizos



-Hola- pronuncia



No respondo. Se acerca a mi en la oscuridad, llevo una mano a mi rostro y agradezco sentir aun el material del antifaz, con mucha confianza coloca sus manos en mis caderas, no puedo observar muy bien su rostro pero se que tiene sus ojos fijos en mi.



-Sabes, me gusto tu baile de hace unos minutos-detecto una media sonrisa, lleva su mano a mi cabello y lo deposita en mi espalda dejándole vía libre a mi cuello- me gustaría saber si estas dispuesta a pasar otro rato conmigo...



Otro rato con el, me quedo pasmada analizando todo como si fuera cámara lenta, lleva sus labios a mi cuello y comienza besarme, cierro los ojos disfrutando de la situación. Besa mi clavícula y continúa hasta el borde de mis senos. Se detiene por lo que abro los ojos y me encuentro muy cerca de el, sus labios se unen a los míos y me siento tocar el cielo, sus manos en mi piel me dan escalofríos.



El beso no es para nada lento ni menos cariñoso, todo lo contrario, es tan fogoso y seductor que me cuesta respirar, muerde mi labio y luego lo recorre con su lengua. Todo esta yendo tan rápido, me empuja contra la pared y medio me levanta, por instinto coloco mis piernas a su cadera cruzándolas tras su espalda, mi pecho sube y baja al ritmo de mi respiración acelerada.



Jamás había experimentado algo como esto, sentía como la sangre corría con fuerza por mis venas cargadas de corrientes eléctricas que Harry parecía provocar en mi. Se me escapa un gemido pero es silenciado por la boca del rizado. Este comienza a moverse y en algún momento me deposita suavemente en la cama mientras se sube sobre mi pero manteniendo su peso con su brazo derecho.



Por otra parte, su mano libre recorre mi abdomen y anula mis sentidos, sus labios me quitan la respiración, su lengua escanea cada milímetro de mi boca y me siento desfallecer, dios este hombre va a volverme loca. Su mano escala mas arriba y llega mi corpiño de encaje, no, esto esta yendo demasiado lejos, no puedo hacer esto



Mi cerebro parece tan confundido, procesa cada uno de sus movimientos mandando corrientes de emociones a cada parte de mi sistema, haciéndome disfrutar cada segundo, pero por otra parte, ese espacio mas pequeño en mi cerebro el cual esta asustado y temblando, el cual contiene cada una de mis emociones sensatas y esta clamando que detenga esto



-¿Por qué no te sacas esto?- lleva una mano a mi antifaz- quiero conocer a la misteriosa chica que me tiene tan caliente



Sus palabras hacen estragos en mi organismo, quiero experimentar esto con el, pero el pánico es mas fuerte y sustituye la excitación, tengo ganas de correr, no estoy lista para esto, menos con Harry, la parte sensata de mi cerebro entra en acción y esta mandándome todos mis mayores temores pero me siento tan confundida y dividida con las opiniones en mi cabeza, por un momento pienso en quedarme ¿Qué podría perder?



Pero no, no puedo, jamás me han gustado la clase de chicas fáciles que solo pasan un momento con alguien y ya están bajo sus sabanas, no pienso ser una de ellas, no quiero serlo, tengo muchas inseguridades y estas están tomando control de la situación, no quiero que mi primera vez sea algo espontáneo y que la otra persona se olvide de ello al otro día, si va a ocurrir, al menos me gustaría hacerlo con alguien que me quiera mas allá de la calentura o mi cuerpo.



-Harry- intento hablar pero casi suena como un gemido, quito su mano de mi rostro



El no se detiene, esta dejando marcas en mi cuello y sus manos están acariciándome de tal forma que estoy apunto de arrepentirme y dejarlo que haga conmigo lo que quiera. Me siento estupida en muchos sentidos



¿As meneado tu trasero frente a el mientras otros cientos de hombres te veían y ahora tienes pudor? Reclama la vocecita en mi cabeza



Lo empujo deteniéndolo, el me mira desconcertado y confundido, me salgo de debajo de su cuerpo y corro a la puerta, las manos me tiemblan por las emociones por lo que me cuesta abrirla.



Corro por los pasillos y una parte de mi se arrepiente por abandonar aquella habitación, pero mi parte sensata esta intentando calmarme, casi puedo imaginarla acariciando mi espalda a forma de consuelo...



De alguna manera acabo fuera de la casa, el viento helado de la madrugada me golpea y me ayuda a despejarme, tengo ganas de llorar por alguna extraña razón. Me siento en el suelo helado, tiemblo y se me eriza la piel, he olvidado mi abrigo en algún lugar de la casa



Llevo las manos a mi rostro y suspiro, pienso y pienso, el Grinch ya se ha ido ¿Cómo volveré a casa? No puedo tomar el autobús en estas condiciones, tampoco llegare con vida a mi casa si alguien me ve así en el barrio, probablemente no volvería a ver la luz del sol. No puedo pedirle a Harry que me alcance por miles de razones obvias, descubriría quien soy, también se enteraría que toda mi vida es una maldita mentira, que no vivo en un barrio de lujo, que no soy rica...



Dejo de sentir el frío en la espalda cuando algo calido me cubre, levanto la vista sorprendida y observo al chico de ojos cafés que me observa con una sonrisa, acepto su abrigo por que realmente estoy congelándome y el se sienta a mi lado.



-¿Disfrutando de la noche?-pregunta amablemente



-Sinceramente no



-¿Por qué no?



-No tengo como volver a mi casa, ni ropa para cambiarme, no tengo dinero, ni un celular - suspiro y luego lo observo- ¿Y que tal tu? ¿Disfrutas de la noche?



-No mucho, allí están todos descontrolados y ebrios, yo no bebo, bueno, no tanto al menos- suelta una risita y yo también- estaba por irme de hecho- suspira, a lo lejos aun se oye la música, se pone en pie y me tiene su mano- vamos, voy a llevarte a tu casa



-¿Qué? No esta bien, te lo agradezco pero...



-Nada de peros, no vas a quedarte así en medio de la noche



Lo observo por unos minutos y luego tomo su mano, me levanto fácilmente del suelo y me coloco la campera que me dio el moreno, emprende la marcha y lo sigo mientras caminamos hasta su auto, el cual es tan nuevo y moderno.



Una vez que subo, me hundo en el cómodo asiento, me quito el antifaz y observo, ¿Cuál es la costumbre de subirme a los autos de desconocidos? No lo se y justo ahora no me importa en lo mas mínimo, por alguna razón este chico destilaba confianza, se veía tan bueno y dulce



-Por cierto, soy Liam