Harry Styles, un chico de ojos verdes cual esmeraldas preciosas, pelo largo, castaño y algo rizado, mejillas que estallan en dos hoyuelos inocentes cuando ríe con sinceridad, alto de piernas interminables. En pocas palabras, se puede decir de Harry que es guapo y encantador.
Harry era un niño que soñaba con ser un gran artista, quizás pintar, tal vez cantar, incluso escribir.
Con tanta imaginación, podía incluso llegar a volar.
De niño también solía ser chistoso, hacía bromas todo el tiempo, buscando hacer reír a los demás. A Harry le gustaba hacer reír a los demás.
Y luego las cosas cambiaron.
Harry es hoy día un joven emprendedor, encargado de la gran empresa Styles, dedicada exclusivamente a todo lo referente a la moda, que lo ha hecho renunciar a sus propios sueños por hacerse cargo del negocio, después de que su padre haya tenido un accidente que le impidió volver a trabajar.
Entonces le sucede lo que sucede con todos a los que se les impide soñar, se vuelven amargados, resentidos, tristes todo el tiempo y cuando ni siquiera pueden llorar, es aún peor, porque ríen.
Ríen todo el tiempo con una risa rota y sin gracia.
Desde que sus sueños se frustraron, Harry ríe pero ya nada le causa alegría. Y ya no le gusta hacer reír a nadie.
Harry actualmente busca una asistente para trabajar con él en la empresa, donde todas las que trabajan son o putas o zorras. Puede que sea lo mismo, a Harry no le importa.
Lo que sabe es que todas buscan acostarse con él para quedar embarazadas y asegurarse el futuro como novias del jefe.
Pero a Harry no le gusta eso.
No le gusta ninguna de esas mujeres, no quiere tener hijos con ninguna de ellas, no busca una relación porque el concepto del amor que solía tener, el de hacer feliz a alguien para ser feliz él mismo, ya no existe ni tiene sentido.
Ahora solo quiere que todos a su alrededor sufran lo mismo que él. Sabe que lo llama "Ogro", pues bien, quizás es lo que es.
¿Pero cómo enamorarse si no es feliz?
¿Cómo buscar la felicidad en alguien, si él no sabe ser feliz por sí mismo y no es capaz de ofrecer felicidad?
¿Cómo busca que alguien ría con él, sí ha olvidado como reír?
Entonces sucede.
Sucede que un chico llega a la entrevista y que el chico usa labial rosa y un enorme suéter naranja que parece tragarlo por entero, dejando ver solo sus pequeños dedos, unos jeans completamente rasgados y ajustados perfectamente a sus piernas, unos grandes ojos azules, curiosos y al mismo tiempo asustados, unas mejillas blancas, pálidas, del mismo color que su cuello en donde se ven pecas y lunares salpicados con gracia y una corona de flores.
Una pequeña y delicada corona de flores celestes y blancas, con hojitas verdes alrededor, sobre su pelo rubio, tan rubio que no parece real.
Y Harry nota, puede que no lo sea.
Y entonces habla y Harry jura que no parará hasta hacerlo reír de verdad, solo porque al verlo y escucharlo, fue la primera vez que él mismo volvió a reír de verdad, luego de años de no hacerlo para nada.
— ¿No es aquí donde son las audiciones para la princesa del colegio? —pregunta la voz que de alguna forma envuelve todo en una especie de dulce paz y Harry no puede hacer otra cosa que reír, algo que presiente que hará mucho mientras el chico esté alrededor.
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I'm back!
He pasado por mucho estos últimos meses, quizás ya ni me recuerden ni a esta historia pero espero que alguien siga aquí. Prometo terminarla ahora babys!!!
Lamento si les molestó o algo que haya desaparecido de repente pero necesitaba eso para estar mucho mejor y gracias por todos los mensajes de apoyo. Love you!
