Tras una dolorosa ruptura con el idiota del ahora su ex, Nadia busca consuelo en un bar. Quiere disfrutar de la sofocante música, haber si logra disipar la incesante vocecilla que tintineaba en su cabeza burlándose de ella recordándole que ahora era una solterona que no tenía nada que hacer en un sábado por la noche.
Entre tanto intercambia tonterías con el barman que se muestra bastante interesado en su historia de sufrimiento, conoce a un extravagante integrante del sexo opuesto que se presenta en su vida con el nombre de Dylan Cole.
Hablando un rato, comentando sus historias y aceptando el que el chico ojos verdes le pague un trago, la algo ya abandonada ampolleta que habita en la cabeza de Nadia se enciende dándole la grandiosa idea de demostrarle al idiota de Luke Harrison que ella puede disfrutar de la vida sin él. Pero para ello tendrá que crear una personalidad completamente opuesta a la que ya posee; reservada, recelosa y bastante rencorosa. ¿Cómo lo hará? Un solo nombre es la respuesta a sus plegarias: Dylan Caliente Cole.
