Vuelve a empezar.
Todo se vuelve a repetir, y me siento caer de nuevo en ese interminable hoyo negro de sufrimiento y miedo.
Vuelve a ser el principio.
Vuelvo a ser la chica nueva en la escuela que es aterrorizada por un desconocido.
Vuelve el temor.
Y las noches de desvelo.
¡Qué comience el juego!, puedo escuchar en mi mente.
"Tarde o temprano uno pierde". "No pienso ser yo".
Desearía volver a ser pequeña, poder jugar con muñecas, preocuparme solo si me rasguño una pierna, o si Jack me tira la casa de las muñecas. Volver a creer que el hombre del saco vendrá y me llevará con él, o que si no me baño no habrá galletas para mí.
No te enseñan a defenderte de este tipo de personas, no de las que dañan física, emocionalmente y que siempre está un paso adelante de mí, sabe donde estás, y qué estas haciendo. Sabe todo de ti, y de los que te rodean.
Es la razón por la que el Viernes llegó con unas enormes ojeras al Instituto, además de haber estar completando libretas esta semana.
—¡Hey!, ¿Cómo estas?— llega Nathan recargándose en la taquilla que está a mi lado.
—Me he encontrado mejor, créeme— cierro la taquilla, y cierro mi mochila, acto seguido me la cuelgo en los hombros.
—Wow, te creo— exclama cuando me giro a verlo.
Me sonrojo de vergüenza.— Bueno, no tuve tiempo de peinarme— frunce el ceño y su rostro se relaja unos segundos después.
Me doy la vuelta para ir a mi primera clase del día. Nathan llega a mi lado.
—Estaba jugando, te ves preciosa de hecho— miro mis pies para que no vea mi sonrisa.
—Eh, bueno ¿gracias?— dejo de caminar y giro la cabeza a verlo.
—No hay de que— su rostro se tensa mirando algo detrás de mí, trato de voltear pero sostiene mis hombros.— Nos vemos al rato ¿de acuerdo?— asiento confundida.
Se aleja caminando rápido, niego para mi sola y ajusto las correas, suspiro y camino para ir al verdadero Infierno.
"¿No que el Infierno era relajante?". Frunce el ceño Marío.
Bueno no siempre lo es.
(...)
¡No me jodas!.
¿Qué es lo peor qué te puede pasar estando en la escuela?.
Bueno por una parte fue demasiado bueno, pero seguro tomaron evidencia.
Exacto.
Me quedé dormida en clase. En clase de Historia, en mi defensa el profesor alega mucho.
Miro mi pupitre, y despego confundida el post-it de color amarillo.
"¿Sigues pensando que puedes ganar este juego Madison?.
Pero te diré algo, no es así.
Queremos a Dylan, llévalo a los almacenes Dunne esta noche.
A menos que no quieras a tú amigo, Drew".
Le marco a Drew con los dedos temblorosos, rogando en mi interior que se encuentre sano y salvo. Ya que no lo he visto en las primeras cuatro clases.
Sexto tono y me manda ha buzón, después de la octava llamada me doy por vencido y viendo que estamos en la hora de descanso tomo mis cosas, las arrojo a la mochila y salgo corriendo en busca de Jack.
Llego a la cafetería y miro todas las mesas esperando a encontrarlos, los veo en una esquina con sus novias, y otros chicos de quién sabe que grado que no me interesan.
Corro hacia donde están, y dejo caer mi mochila en su mesa, todos en esa mesa giran su cabeza a verme. Me paso mi mano por el cuello, me recordaron a unos búhos.
—Eh, Jack, necesito ayuda— suelto de golpe.
Sonríe, sonríe con sorna, enseñándome los dientes, riéndose de que vengo a pedirle ayuda. Pero no me importa, estoy decidida a rogarle si es lo que quiere, sólo necesito a Drew con vida y a mi lado.
—Ahora sí ¿no?, ¿por que no le dices a tu amigo Blair que te ayuda?— las chicas se ríen, mis mejillas se tornan rojo por la furia.
—Porque él no es mi hermano— las chicas se callan, y los chicos abren los ojos como platos, menos Jason que ya lo sabía.
—No por eso tiene que ayudarte— le da una mordida a su sándwich con una enorme tranquilidad.
—Te estas comportando como un idiota Jack— gira a verme.
—¿Yo?, yo no he sido el que se junta con él imbécil de Blair, así que creo que te equivocas de idiota— puedo sentir mis uñas clavándose en la palma de mi mano.
—No tengo tiempo para juegos o reclamos, necesito encontrar a Drew— exclamo.
—Hazle una llamada, no es mi problema— dice sin importancia, y continua comiendo.
Doy un golpe en la mesa pero no voltea a verme.
—Se convierte en tu problema cuando mencionamos a Dylan— gira a verme de inmediato.— Tienen a Drew, por favor ayúdame, Drew es lo único bueno que me queda, o lo que me recuerda el pasado.
Suspira, ve a Jason y le hace un gesto con la cabeza que solo ellos entienden.
—Bien, vamos— una de las chicas chilla fastidiosamente, no se cuál de las dos, puesto que las dos me parecen irritables.
Toman sus mochilas y caminan detrás de mi hacia la salida (o eso quiero creer) ya que no volteo en ningún momento hacia atrás.
—¿Y qué es lo que haremos?— pregunta Jack una vez que estamos sentados en las bancas de la otra vez cuando vine con Nathan.
—Tenemos que llevar a Dylan en la noche a los almacenes Dunne, ¿Alguno de ustedes sabe donde se encuentra eso?— pregunto buscándolo por Google Maps.
—Yo se donde se encuentra— dice Jason.
—Perfecto, porque está noche iremos— anunció.

ESTÁS LEYENDO
Secretos Oscuros. [Libro #1]
Mystery / ThrillerUn asesinato. Una perdida. Una nueva familia. Una nueva ciudad. Un reencuentro. Un acosador. "Mantén los ojos abiertos... Pueden estar en todos lados". Todos los derechos reservados® /AVISO/: No me hago resp...