" Alma Triste "
- Recuérdame otra vez porque estamos aquí. - gruño Louis mientras se bajaba del auto junto con su mejor amigo, Harry.
Harry miro a su amigo con una pequeña mueca en sus labios. Ambos caminaban arrastrando los pies hacia la gran casa que estaba delante de ellos. Había un propósito por el cual estar ahí.
- Estamos aquí porque la condición que puso mi tía para prestarnos su casa a cambio de que acompañáramos a la loca de mi prima...- repuso con aburrimiento Harry.
Louis río.- Se nota que quieres mucho a esa chica, Harold.
- Esta loca. Nadie la quiere.
En ese momento se detuvieron en la puerta. Harry entro sin tocar y Louis lo siguió. La casa adentro era gigante. Claro, la tía de Harry estaba podrida de dinero. A nadie le extrañaba que tuviera una casa tan grande. Tal vez la acompañar a la prima de Harry no sería tan malo...
- ¡Harry! - chillo una mujer. Saliendo desde la cocina. O al menos eso creía Louis.
- Tía.
Aquella mujer era la vivía copia de Anne, la madre de Harry. Sólo que su cabello era más claro, y rizado que el da la madre del oji verde. Al igual que la madre de Harry, su tía se conservaba muy bien para su edad.
- No puedo creer que hayan venido, de verdad. - dijo la mujer. Mirando con asombro a ambos chicos. De verdad no creía que ambos estuvieran ahí. - Veo que anhelan hacer esa fiesta mañana.
Harry se encogió de hombros mientras rodaba los ojos.- Bueno, Wendy no va a estar sola, Louis también nos acompañará toda la semana.
La tía de Harry paso a mirar Louis, sonriendo. Al oji azul le aterró un poco lo idéntica que lucía a Anne, pero de todas forma le sonrió lo más cordial posible.
- Si, agradezco eso. De verdad no quería dejar a Wendy sola toda una semana. Pero de verdad necesito ir a Georgia. Trabajo.- comenzó a hablar ella.- Que bueno que están aquí. Tal vez eso ponga algo alegre a mi bebe. Es más, le iré a avisar.
Antes de que alguno de los chicos pudiera decirle algo a la mujer, ya ella se encontraba subiendo escaleras arriba hacia la habitación de su hija. Harry suspiro, con alivio y pesadez.
- Nadie logra alegrar a esa chica.
Louis miro a su amigo.
- De seguro exageras.
Los rizos de Harry se removieron cuando negó con la cabeza.- No lo hago.
(. . . )
" Hay alboroto abajo. De seguro ya llego mi primo..."
" Buena suerte con eso..."
- ¡Wendy!
Ella suspiro cerrando su computadora de golpe.
- ¡Déjame en paz!
La mujer ignoro el comentario. Y entro a la habitación de la chica sin pedir permiso.
- Ya llego Harry.- aviso con una sonrisa de oreja a oreja.- Y trajo a un amigo.
Wendy torció los labios y rodó los ojos, tal vez costumbre de familia. No le importaba quien mierda estuviera abajo. No quería ver a nadie.
- Que bien, Trace.- dijo llamando por su nombre a su madre.- Entonces, ¿qué haces aquí?
Cualquier otra persona hubiera borrado la sonrisa de su rostro, pero Trace era fuerte, y no dejaba que la negatividad de sí hija la debilitara. Así que su sonrisa no hizo ni ademán de borrarse, hasta se podría decir que se amplió.
- Quiero que vayas a abajo a verlos.
La chica negó con la cabeza, no quería ir, para nada.
- Trace..
- Nada de Trace.- interrumpió la mujer a su hija. Por primera vez en un buen tiempo Tracé lució autoritaria, lo cual hizo que Wendy se sintiera intimidada, dejando su frase a mitad. La mujer continuo hablando:
- Te espero abajo en diez minutos. Si no vas, yo misma me encargare de buscarte.
Wendy asintió. Su madre le sonrió y se fue dispuesta a seguir hablando con los muchachos que estaban abajo.
Ella suspiro. ¿Tenía alguna otra opción? No, al parecer no. Tendría que bajar, y vivir la realidad un rato.
(. . . )
Abajo estaban Louis, Harry y Trace, charlando en la sala. Esperando que Wendy diera acto de presencia.
- Creo que mejor subo a buscar a Wendy..
- Déjala, ella pronto baja.- replico Harry aguantando con delicadeza el brazo de su tía.
Antes de que Trace pudiera replicar algo, se escucharon pasos bajando las escaleras. No podía ser otra más que Wendy.
- Ahí viene.
Louis miro hacia la dirección de donde provenían los pasos, preparado para conocer al fin a la prima de Harry. Quería conocerla, quería saber porque Harry la odiaba tanto.
Lo que vio lo sorprendió bastante.
Louis esperaba un Harry versión femenina.. Con pelo castaño y rizos.. Jamás se imagino a la chica con cabello rosa (obvio, teñido) todo enredado, piel sumamente pálida y aura demacrada que se encontró delante de ellos. O sea, Trace y Harry se veían tan alegres y saludables... Y ella tan triste y huesuda, como si nunca comiera.
¿En serio era ella familia de Harry?
Lo único de esa chica que podía familiarizar con Harry y Trace era sus ojos esmeraldas. Porque lo demás... No sabía de donde lo había sacado. Tal vez era adoptada.
- Wendy, querida. ¡Viniste!.- hablo la madre de la chica.
- ¿No era eso lo que querías?.
Louis dio un pequeño respingo, otra cosa que la familiarizaba con Harry, su voz ronca. La chica tenía una voz casi tan ronca como la de Harry. Extraño. Además, era bastante agresiva, ya comenzaba a entender porque su amigo no la soportaba.
- Si, eso era lo que quería.- dijo Trace con una sonrisa falsa en el rostro. Se le notaba.- Aquí te dejare con Harry y su amigo Louis. Ya voy para el aéreo puerto.
Wendy no respondió a eso. Su mamá le dio un pequeño beso en la mejilla y se fue es busca de su maleta, dispuesta a irse. Dejando sola a su hija junto a los dos chicos.
- Deberías tratarla con más respeto, Wendy.- hablo Harry.
Ella torció los labios.- Déjame en paz, Styles. Yo sólo quiero que esta semana pase rápido. Voy por algo de agua..
Wendy se volteó sobre sus talones y se fue hacia la cocina.
Louis soltó un pequeño gruñido.
- Vaya.. Si que es especial.- dijo. Miro a su amigo.- ¿Estas segura que es de tu familia? Es muy.. No se, diferente a lo que siempre veo de tus familiares.. Soy yo, o esa chica no come.
Harry movió su cabeza.
- Esta mucho más delgada que la última ve la vi. Ella ha bajado mucho de peso desde que mi tío murió..
- Será una semana larga..- susurro Louis.
- Ni que lo digas..