"El"

"Hasta Que Te Encuentro"

"3:00 am aún sigo recordando ese momento, quien era ese sujeto?, que quería?, porque me perseguía a todas partes? Mi madre me decía que no tuviera miedo pero... era imposible, su simple voz susurrando mi oído y su aroma a muerte me era difícil olvidar..."

(...)
El sonido del teléfono me despertó, eran las 12:30 pm, "carajo!! Debo ir a trabajar" , me levante rápido de la cama, tome la camisa de cuadros de ayer, agarre un pan con mermelada y salí corriendo...

Jejeje No me olvide de alimentarte "Manchas"- dije mientras entraba de nuevo a casa

Con tanta prisa se me había olvidado alimentar a "Manchas" mi lindo y obeso gato, me dirigí a la cocina y saque de los gabinetes un sobre, con su comida.
Termine de servirle y salí de mi casa apresurada.

Llegue al trabajo y el gerente me estaba esperando en la puerta del restaurante

Pero que tenemos aquí?, señorita Stirling otra vez tarde? Según usted no se repetiría esto...- dijo el gerente con cara molesta
Lo sé pero si alguien me quisiera prestar una motocicleta, cualquier persona de este mundo...- decía mientras lo miraba con una sonrisa pícara
No empieces, sabes perfectamente que tienes prohibido utilizar la motocicleta del trabajo Ellie- dijo mientras cruzaba sus brazos
-De acuerdo, pero no se lo digas al jefe porfavor si se llega a enterar...

De pronto una voz me interrumpió esa voz era imposible de confundir, era el señor Smith mi Jefe

-Si me llevo a enterar de que?
De nada señor miller- dije mirándolo a la cara

El solo miro a Joshep y entro al restaurante, salude a todos como de costumbre incluyendo ala amargada señora Williams

Buenos días señora Williams-
Que tiene de buenos!?- contestó enojada, como de costumbre

Me dirigí a tomar mi mandil y trabajar como de costumbre.
Llego la hora del almuerzo y me atreví a invitar a Joshep, ya que él y yo además de tener una relación laboral tiempo atrás habíamos tenido una relación

-Hola Joshep
-Hola Ellie, se supone que es hora de que vayas a almorzar- dijo mientras miraba unas hojas
-Si lo sé y... me preguntaba si, tú quisieras...-
-Ir a almorzar contigo?
-Si!:3
-No gracias tú y yo nunca volveremos a ser novios...

Después de eso hubo un silencio incómodo así que mire a todos lados y me retiré con una sonrisa.
Tome mi teléfono y llame a mi amigo, para mí suerte no contesto a sí que decidí ir a casa.

Llegue a casa y todo parecía ser normal, entre en ella y llame a "Manchas", pero él no me contesto.
Camine por la casa en busca de él pero no me daba alguna respuesta...

(...)
Unos ruidos extraños detuvieron mi búsqueda, provenían de el sótano se me hace muy extraño ya que vivía sola... "y si el de los ruidos extraños era "Manchas"? Dije en mi mente. Tome una lámpara de la cocina y me dirigí a el lugar, abrí la puerta y note que había demasiadas telarañas, baje por las escaleras lentamente

Manchas, manchas? Donde estás?- dije con esperanzas de recibir alguna respuesta de el, pero no maulló como de costumbre. Camine por el sótano y me topé con un viejo espejo, algo en el hizo que llamara mi atención, así que pensé en cubrirlo con una sabana para que se re ensuciara más de lo que ya estaba,

De pronto un ruido que provenía detrás de mí me asusto haciendo que volteara, pero no había nada, mire por el espejo y vaya mi sorpresa se miraba una sombra detrás de los escombros el cual reconocí de inmediato, era aquel hombre que atormento mi niñees no pensé volverlo a ver, mire como salía de ese lugar y se acercaba lentamente a mi, yo me quedé paralizada por el susto haciendo imposible que me moviera, cada vez lo miraba más cerca. Cerré mis ojos para no verlo, empecé a contar hasta 3 tal y como lo hacía de pequeña

1... 2... 3...

Abrí mis ojos lentamente y ahí estaba, aún lado mío me estaba mirando fijamente se acercó a mí oído y susurro aquellas palabras que hicieron que mi sangre se helara...

"Hasta que te encuentro"

Gire mi cabeza para verlo pero él ya no estaba, salí corriendo del sótano y cerré con llave la puerta. Me senté en el suelo a llorar "Porque regreso?, que es lo que quiere ahora?" Me hacía esas preguntas una y otra vez, se acercó manchas y se acurrucó conmigo...