I'll Always Love You

Capitulo 35

Madison's POV

-¡Madison! -se escuchó desde la cocina

-Voy mamá -baje rápidamente de mi habitación hacia donde estaba ella, mi padre estaba sentado a su lado en una pequeña mesa y ambos tenían una expresión un poco seria

-¿Sucede algo? -dije un poco confundida

-Sientate cariño -dice mi padre tendiendome su mano

-Madison, tenemos que hablar -dice mi madre

-¿Ahora que hice? -dije un poco desesperada

-No hiciste nada -río -Tenemos que hablar de un asunto importante

-Esta bien -asentí

-Bueno, nuestro trabajo en Pittsburgh nos ha ido de maravilla, las ganancias han subido bastante, tanto así que queremos extender el negocio

-Entonces... -dije un poco confundida ya que no sabia a donde querían llegar

-Entonces queremos extenderlo a otro país, Francia -dijo sonriendo

-Vaya... -suspiré -Eso sería grandioso

-Si, entonces... aquí es donde entras tu -dijo serio -Ya que terminaste la universidad es momento de que vayas buscando trabajo, algo que vayas hacer el resto de tu vida

-Bueno tengo pensado un par de cosas, solo que con lo del accidente... -suspiré -No he tenido tiempo de dejar una idea clara

-El accidente..., me alegro mucho de que hayas recuperado la memoria hija -tomó mi mano -Pero lo que te pasó fue muy grave, no sabemos que efecto secundarios pudo haber dejado y nadie puede asegurar que no pueda pasar algún accidente de nuevo

-¿A que quieren llegar? -frunci el ceño

-Queremos que te mudes con nosotros a Francia

-¿¡QUE!? -grité -¡No! ¡No quiero hacerlo! ¿¡Que les pasa!? Acabo de recuperar la memoria

-Lo sé Madison por favor calmate -dijo desesperada

-¿¡Cómo quieres que me calme!? -grité -¡No lo haré! ¡No me mudaré!

Corrí rápidamente a mi habitaciones y la cerré de un portazo, me recosté en mi cama y las lágrimas empezaron a caer. No podía irme, no ahora.

Quería seguir con mi vida aquí, estoy feliz de que mis padres tengan nuevos planes pero yo no quiero ser parte de ellos, ya estoy grande, vivo sola desde hace bastante tiempo y me ha ido bien, el accidente no ha sido mi culpa, simplemente pasó. Ya me recuperé, ¡Ya estoy bien! ¿Es tan difícil entender eso?.

Quiero recordar como se sentía amar a alguien y como sentía estar olvidando a otra y no podía hacer eso si me iba, eso solo empeoraría las cosas. Sobre el trabajo, desde niña me ha gustado diseño, aquí en Los Angeles hay varias academias en las que me gustaría estudiar, no necesito mudarme, mi vida esta aquí.

Salí de mi habitación con la intención de salir de casa, necesitaba un poco de aire y tiempo a solas, le dirigí una mirada a mi madre para que supiera que todo estaba bien, aunque no fuera así; ella solo asintió y se despidió de mi. Camine un par de calles sin saber a dónde iba, no quería estar un segundo más en casa, me abrumaba estar ahí. Inmediatamente un par de gotas cayeron sobre mi cuerpo haciendo que me estremeciera, seguidamente comenzó a llover.

-Lo que faltaba -bufé

Acelere un poco el paso de vuelta a casa, fue una perdida de tiempo salir, no pude estar sola ni cinco minutos. Mientras caminaba a casa la lluvia empezó a intensificarse así que comencé a correr, un par de gotas se metieron en mis ojos quitándome la vista, tanto así que choque con alguien haciendo que me estremeciera. Me quitó el aliento haberlo visto, sentía que mi corazón estaba en mi garganta. Nuestras miradas se cruzaron y rápidamente el me tomo en sus brazos.

-Madison -sollozó

-Cameron -susurre

-No puedo creer que estoy viendote -dijo sonriendo -¿Qué haces aquí? Esta lloviendo puedes enfermarte, vamos -dijo llevándome hacia su auto

En el camino no hicimos más que intercambiar miradas, había un silencio que resultaba frío. Llegamos a su casa después de un par de minutos, nunca había venido a su casa, me resultaba un poco incómodo ya que no quería conocerla de esta manera. Era absolutamente hermosa, era color blanco perlado, tenia un par de ventanas de madera las cuales hacían buen contraste, tenia un jardín enorme, se veía que estaba bien cuidado. Nos adentramos en su casa aunque yo me quedé un par se segundos en la puerta.

-¿Que ocurre? -me mira extraño

-Estoy mojada... -susurre

-Descuida, te buscare una toalla -sonrió -Pasa

Me senté en un sillón que estaba cerca de mi y espere a que Cameron regresara. En eso escuche un pequeño golpe, como si algo de hubiera caído.

-¿Cam? -pregunté

-No... -dijo una dulce voz

Una pequeña niña salió detrás de una puerta, tenia un vestido color celeste y dos trenzas en sus cabello. Se acercó a mi y empezó a tocar el mi cabello.

-¿Te llamas Madison? -preguntó

-Si, ¿Como lo sabes? -sonreí

-Cam siempre habla de ti -río -Y eres justo como el te describió

-¿Eres su hermana? -pregunté

-Si, me llamo Brynn -sonrió -¿Cuantos años tienes?

-Diecinueve ¿Y tú?

-Seis -me mostró sus seis dedos

-¡Brynn! -gritó Cam desde lejos

-¡Adiós! -salió corriendo hacia la habitación de donde había salido hace un par de segundos haciéndome reír

-Esa niña -dijo Cam sentándose a mi lado

-No sabia que tenias hermana, es muy dulce -sonreí

-Si... -suspiró -Te extrañe como no tienes idea -mirándome a los ojos -No sabes cuanto, todo este tiempo ha sido muy duro, pero se que para ti ha de ser peor, me alegro de que hayas recuperado la memoria, pensé en buscarte pero quizás tus padres querían darte un poco tiempo y yo no quería causar problemas, Kendall me dijo que fue a verte

-Si... hable un poco con ella -baje la mirada

-Te noto diferente -dijo con una sonrisa forzada

-Es que... me estoy adaptando...

-No es eso -me interrumpió -Actúas como si no hubiera nada entre nosotros