Odio esto. Ya lleva meses y cada vez que cambia, es para mal. Siento como cada vez que lloro todo lo que esta a mi alrededor se torna acido y como aquellas lagrimas que bajan por mis mejillas queman ¿Será que estoy encadenada a esto? ¿Qué no hay llave que me libere? ¿Que tal vez todo lo bueno que me llega es solo un juego retorcido de los de arriba solo para ver como sufro cuando aquello también torna en algo malo? Solo faltaba esto, la última estupida gota que rebasa el vaso haciendo que una vez más las lagrimas acidas caigan, pero esta es la última vez que me lo hacen.
El trueno de aquella arma de fuego inunda toda la habitación. Sangre. Gritos. Lagrimas. Un dolor punzante llega a mi cabeza y hace un recorrido hasta la punta de mis dedos. Puedo ver ahora la lluvia, la cual cae en mi cuerpo, es acida.