Sentimientos Confusos

Nueva vida

Di gracias a Dios que iba a poder dormir durante el vuelo ya que no era a escala, ya estando en el aire me coloque mis audífonos porque era un viaje largo para estar sin escuchar música, saque un libro, otra cosa que no sabían de mi me encanta leer puedo leer de todo pero mi genero favorito es el romance, mientras leía mi hermano trataba de lidiar con las mocosas que estaban en el asiento de atrás eran dos rubias todas operadas por todos lados, si de esas chicas llenas de bolas y químicos en el cuerpo, se ven tan estúpidas, pobres no saben que mi hermano no las pelara, ya apunto de quedarme dormida una de ellas se le ocurrió quitar mis pies y poner su trasero para sentarse a lado mío donde estaba mi hermano provocando que me asustara y así perdiera el equilibrio provocando que casi cayera

—Ey fíjate barbie, casi me tiras con tu...

—Disculpa

Me contesta la rubia haciéndose la ofendida

—Lo que escuchaste rubiecita

—Ay cariño lamento informarte que tu también eres rubia

—Uy aparte de rubia, sin cerebro, lamentó informarte querida que este no es rubio, es castaño claro y si no sabes qué es castaño claro, dile a tu estilista de cuarta que te enseñe la gama de tintes y te pongas a leer para que al menos seas inteligente en algo, ahora si me disculpas deja a mi hermano en paz porque lo que no sabes es que el no se fija en las personas sin cerebro como TÚ comprenderás, ahora si me permites me voy a dormir así que regresa a tu asiento sino le diré a la azafata que me estas molestando.

Dije orgullosa y terminando con la conversación, provocando que la rubia se levantara enojada e hiciera un chillido tan agudo un tanto desagradable para mis oídos y los de los demás pero en fin, por fin me volví a acomodar en los asientos acurrucándome en el hombro de mi hermano, cerré los ojos y logré quedarme dormida.
Desperté antes del aterrizaje, al bostezar y estirarme, me di cuenta de que mi hermano seguía dormido, me alegra haberme despertado antes que él sino me hubiera estado molestando tomándome fotos dormida.
Pero que gran idea se me ocurrió, meto mi mano al bolso buscando mi celular a tientas lo encuentro, lo desbloqueo y abro la aplicación de la cámara, te tomo la foto y con una basto para que se despertara

—Que carajos... Eline ¿Me tomaste una foto mientras dormía?

Mierda, se me olvidó quitarle el sonido a la estúpida cámara

—No... Hermanito como crees que yo haría eso—y lo miro escondiendo el teléfono detrás de mi y haciéndole ojitos junto con un puchero

—Más te vale mujer, ¿No sabes si ya vamos a llegar?

*Atención señores pasajeros, abronchense los cinturones porque estamos a punto de aterrizar*

—Eso responde a tu pregunta hermanito—y lo volteo a ver con una sonrisa mientras me abrocho el cinturón

Al bajar del avión vamos camino hacia las maletas mientras busco el número de mi tía

—¡Por fin!—suspiro mientras que dramáticamente me tiro al suelo del aeropuerto de rodillas y levantando los brazos en forma como si alabara a alguien—llegamos después de mil horas de vuelo—digo mientras hago una mueca, me levanto y las personas que van caminando se nos quedan viendo, «Dios que vergüenza» pienso mientras me pongo roja como un jitomate

—Ay niña deberás que eres una exagerada, si apenas fueron como cinco horas

—Pues díselo a mi trasero que esta todo entumió—le reprochó señalando mi linda retaguardia

—Ah pero ¿Qué tal dormiste? Eh

—Bueno... Si lo pones de esa manera dormí bien, eres una muy buena almohada hermano mío, yo creo que te rentare como una en lo que consigo trabajo