Chat Noir

412 23 7
                                    



Hojeo de a poco el libro que sostenía, mientras que al mismo tiempo le tendía unos pedazos de queso a Plagg (De forma discreta, claro) Plagg salía de su bolsa a tomarlos alegre y Félix continuaba con sus investigaciones en un rincón solitario de la biblioteca. Su celular empezó a vibrar.

»Felix necesito que atiendas al evento de tu padre hoy, hazlo por tu madre al menos una vez«

Volvió su mirada al libro y parte de los periódicos con homicidios en las primeras planas. Eran homicidios y tragedias recientes que estaban ocurriendo no solo por todo Paris, sino por casi toda Francia.

Aunque no era algo nuevo que casi todo Paris estaba en alerta por las explosiones que causaba "El mimo"

La cabeza del rubio comenzaba a doler y a pulsar por pensamientos que no era conseguir un beso de Ladybug para revertir su mala suerte, si no... solo su padre, su madre y... su soledad. Miro por unos instantes a Plagg, pero continuo sintiendo aquellas nauseas molestas.

Aunque tenía a ese odioso kwami, continuaba sintiéndose solo.

Era como si fuese explotar, lo desesperaba a más no poder.

Apretó su puño y Plagg lo miro incrédulo.

-Vámonos de aquí-dijo fríamente Felix levantándose del sofá. Plagg estaba a punto de entrar a la mochila del chico, pero esté lo detuvo. Se dirigió a una intersección de la librería donde nadie podía verlo con facilidad.

-Plagg... transfórmame.

-¿¡Que?! ¡¿Por qué?!

Felix lo miro-Solo hazlo-y el solo quería salir de allí.

Plagg suspiro y se adentró al anillo, en un abrir y cerrar de ojos Chat Noir se encontraba allí para después salir sigilosamente de la biblioteca.

La campana de la escuela anuncio la siguiente hora. Chat Noir se alejó de la escuela escalando por las azoteas y tejados, luego acelero su paso sin siquiera fijarse por donde iba.

Subió a un edificio que era evidentemente alto y en un punto se quedó mirando abajo, queriendo solo caer. Estaba a comenzar a sentir un poco de mareo.

No le importaba, algo le gritaba que gritara y que no hiciera nada en contra de ello.

»¡¿Felix?! ¿¡Que haces?!«

Era la primera vez que sentía como Plagg le hablaba, pero eso fue algo imposible, pero suficiente para hacerlo reaccionar.

Luego unos gritos se escucharon.

Chat Noir había sentido como el tiempo había pasado de forma lenta, pero la realidad era otra. La policía ya había llegado al incidente donde el Mimo se había encontrado y Ladybug estaba de su lado.

-Otra vez... llegue tarde-mascullo la chica queriendo golpear la pared.

Chat Noir quería contestarle, pero solo se sintió estúpido. Y su garganta estaba tensa al punto que no sentía que el aire fresco le llegara.

Fue su culpa en parte.

No era algo que quería realmente, ser un héroe. El anillo fue cedido a él y no sabía ni siquiera el por qué, pero era una jodida miseria. Masajeo su sien y bufo.

-Lo siento-dijo finalmente y Ladybug lo miro, incrédula.

-¿Por qué te disculpas?

-Pude...-comenzó-Pude haberlos salvados pero no lo hice-la chica giro los ojos y lo tomo de la mano.

The Tales of Chat Noir and LadybugDonde viven las historias. Descúbrelo ahora