Goodbye my love [MyungYeol] -Mini Fic-

Mil lágrimas no te traerán de vuelta

La canción al fin término, todos se retiraron los audífonos que llevaban puestos mientras grababan.

—Buen trabajo chicos es todo por hoy mañana...— El CEO de la compañía no término de hablar cuando SungYeol ya había salido corriendo de la cabina de audio.—¿Se encuentra bien?

El otro de los Manager el que al igual que el resto de la banda era MyungYeol Shipper miro la escena preocupado.

Myung Soo salió tras el alto y todos se miraron atónitos.

—Ellos necesitaban ir al baño.— Argumento nervioso Gyu.— Es más todos lo necesitamos.

Dicho esto todos salieron corriendo también de la cabina.

MyungSoo buscaba desesperadamente a SungYeol por todos lados.

—Los lugares solos, y oscuros por alguna razón son mis favoritos.— Recordó.— Te dejan esconder todo lo que llevas dentro.

Y en ese momento entendió donde estaría este. Aquella compañía que constaba de 14 pisos tenía uno oculto del cual nadie sabía más que ellos dos. Aquel piso oculto era el escondite que SungYeol le mostró solamente a Myung.

El de facciones felinas ni si quiera llego al elevador cuando los sollozos provenientes de uno de los pasillos lo detuvo. Miro hacia este y su corazón se volvió a romper; su Yeolli estaba tirado tras una de las macetas del final del corredor, sus piernas estaban encogidas contra su pecho y su cabeza recargada en la fría pared, mantenía los ojos cerrado y las lágrimas salían de estos.

Myung se acercó despacio, con cada sollozo del alto sentía como su corazón se contraía y el nudo de su garganta se hacía mil veces más grande.

—Y...Yeolli.— Llamo despacio cuando estuvo a una distancia conveniente.

El alto levanto la vista encontrándose con quien había estado evitando por todas aquellas semanas.
Se puso de pie intentando marcharse pero el azabache se lo impidió tomándolo de la me mano.

El sólo tocar su piel le dolía, el sólo verle le dolía pero el no tenerlo, el saber que ahora en lugar de ser el causante de sus sonrisas era el causante de sus lágrimas lo mataba.

—Yeolli detente.— Rogo.— Por favor.

—Sueltame MyungSoo.

—Yeolli lo siento, lamentó haber dicho todo lo que dije aquella noche, lamento haberte lastimado de ese modo, lamentó ser un idiota pero lo que más lamentó es ser el idiota que te dejo ir sin más.— las lágrimas se juntaron en los ojos del azabache.— Lo siento SungYeol, lamentó hacer dicho que te quería lejos de mi pero todos esta mal, te necesito junto a mi más que nada, más que a nadie.— Las lágrimas por fin calleron.— No hay un maldito momento en el que no deje de pensar en ti, en el que quiera salir corriendo y pedirte perdón, decirte lo mucho que te amo y que si tú no estás a mi lado ya nada importa.

Sung Yeol no sabía que decir, sólo se mantenía con la vista gacha, nunca se imagino que MyungSoo estuviera diciendo aquellas palabras.

—Te necesito Lee SungYeol, te necesito incluso más que a mi propia vida, no quiero a nadie cerca de mi; nadie que no seas tú.

El alto atrajo a este hacía si juntando sus labios en un tierno beso.

Dos corazones latientes que se complementan por fin estaban juntos, dos almas unidas como una, un amor que durará toda una vida. Por qué eso es lo que son aquellos dos, MyungSoo había descubierto que eran el hilo rojo del contrario, por más que se estirara, se tensará y se enredará jamás se rompería. Habían encontrado el soporte que necesitaban y se encargarían de que esto nunca se acabase.