Extraña.

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Y fue así como el destino te puso en mi camino, de una manera tan sencilla, a simple vista, pero inesperada, tan inesperada como esos buenos días por las mañanas. No eres alguien normal, eres extraña. Extrañes que encanta, posee, controla y engaña. Decide embarcarme en un viaje, un viaje que me ayudaría a descubrir el secreto de enamorarte, pero solo me encontré a mi mismo enloquecido por el tesoro que había detrás de tus ojos. Tan enamorado estaba que escribí hojas y hojas acerca de ti, acerca de cada mínimo detalle y es que cada detalle enamoraba, como si de las estrellas se tratará, pero no, eras más que constelaciones. Cada detalle estaba lleno de mundos por explorar, como si de galaxias se tratará, pero no, eras más que universos. Todos los días trataba de soñar contigo pero no lo lograba, eras más que fantasías locas en mi cabeza. Me tenias demente, no necesitaba drogas, simplemente necesitaba escuchar tu risa embriagadora. Eso me llevaba a un lugar que resultaba ser interesante por el hecho de que tu tomabas el control, quería aprender de ti aunque eso me causara dolor, estaba sumiso a ti y a todos tus retorcido deseos, moría por complacerlos. No sé por qué, todo se trata de ti, doy vuelta a la esquina y regreso por ti. Tú nombre aparece por todos los lugares, ya no te puedo quitar de mi mente. El sonido de la alarma es tu voz, ¿Cómo no quieres que me desoriente en esta vida donde la única chica presente eres tú? Eres una maravilla que desluce a las demás, ellas no se comparan a ti en belleza, ni siquiera en arte cultural ya que en ti encuentro más historia que algo más. Puedo decir muchas cosas sobre ti, puedo dedicarte todo una obra teatral, pero nadie entenderá lo que llegue a presenciar. Solo yo poseo los ojos que pueden ver más allá de ese hermoso cascaron.  

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⏰ Última actualización: Nov 04, 2016 ⏰

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