Los Juegos Del Hambre 3

Llegada

- Exacto -dice Rick-.

No estoy muy segura de qué voy a hacer yo exactamente. Debería plantearmelo en otro momento.

La sala quedó un rato en silencio. Mi hermano se quedó mirando la ventana y Rick se había ido a hablar con Margaret.

(Es el momento)
Me dije...
Y si esto le afecta en los juegos?
Y si despues se enoja conmigo porque no le dije?
Y si muere no sabiendolo?

Tengo que decirselo...

Me acerco a el de forma lenta y me siento a su lado.

No sé qué hacer... Teo me diría que se lo diga..

- Fede -digo mientras el se da vuelta para mirarme-.

- Qué pasa?

QUÉ PASA?? MIRA TENGO UNA LISTA LLENA DE COSAS HORRIBLES QUE ESTAN PASANDO.

Suspiro.

- Papá llego a saludarte? -digo.

- Sí, me dijo que después iría a verte a ti. Se sentía muy mal, le dolía la cabeza y no paraba de llorar...

Se me llenaron los ojos de lágrimas.

- ... y en momentos parecía que se iba a desmayar pero por suerte no lo hizo... espero que esté bien, sinó no podría seguir... -continuó- el nos enseño todo lo que sabemos... y nos crío sin mamá... es un héroe...

Me quedé callada. Los sentimientos no se me contuvieron y me largué a llorar. Es mi hermanito, no le iba a decir que nuestro padre estaba muerto tirado como una bolsa de papas por ahí.
El me abraza.

- Pasó algo? -dice-.

- Fede... yo... -no puedo decirle- yo espero que esté bien también...-dije-.

El me miró con compasión y mientras le caían lágrimas me abrazaba.

Me siento inútil.
"Tonta" "Tonta" "Tonta" me digo a mi misma. Pero no podía decirle... dijo que no iba a poder seguir...

- Vas a ganar -le dije-.

- No, tu tienes a Thalia y a Teo... basta... no quiero ganar sabiendo que tu mueres.

Respiré tranquilamente y me sequé las lágrimas. El distrito 2 queda cerca del Capitolio por lo que supuse de que ibamos a llegar en un pequeño rato.

El suspira y me dice:

- Cuál es el mayor consejo que puedes dándome? resumiendo todo...

No hacía falta de que piense la respuesta.

- No debes confiar en nadie. -dije- ni en mi... en la arena todos cambian a modo malévolos... son todos asesinos, contándome... y harían lo que fuera TODOS por verte muerto... total serías uno menos para ellos... por eso no creo en las alianzas, solo sirven para amigarte de alguien y despues sentirte culpable y llorar por su pérdida o... para ser falso o que sean falsos con vos y engañar. No me gustan.

El meditó mi respuesta un segundo.

- No te vas a aliar con nadie?

- En los juegos anteriores no tenía intenciones de aliarme con nadie tampoco... salvo con Tom, el era mi compañero de distrito... no le tenia tanta confianza tampoco, pero como te dije... uno con las alianzas solo llora y se siente culpable por la pérdida de tu "amigo". Estos juegos no sé que haré. Supongo que tendré que aliarme con alguien pero no sé... lo tengo que pensar todavia...

El me miró.

- Ese es un buen consejo. -me dice tratando de hacer una sonrisa-.

Yo intento devolversela.

Cuando llegamos al Capitolio bajamos del tren y nos llevaron directamente a los salones de belleza y a los estilistas.