Capítulo 15.

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Narra Wesley Tucker.

Kelsey me pide que la deje en su casa, al parecer la he cagado y no entiendo el porque, realmente llevo años tratando con mujeres y no las entiendo, en especial a Kelsey, no logro comprender que le molestó, pasamos un buen rato besándonos y después se puso toda loca porque la aparte, no lo hice de mala manera, si hubiera sido por mi me la hubiera follado justo ahí, en mi auto, sin importarme una mierda que alguien viera.

Pero es diferente con ella, aparte sé que es virgen y no podía hacerlo en el auto hubiera sido muy incómodo aparte no va con el plan, tirarmela sería ilusionarla y no quiero hacerlo cuando sé que la terminaré botando como a las demás.

No la miro el resto del camino, cuando la dejo en su casa ni me dispongo a ver su lindo rostro, en parte sé que me doleria ver la tristeza en este, soy un idiota pero realmente me importa que no se enganche conmigo.

Estoy tan encabronado que decido no ir a casa, mi tía seguramente no estará pero Nessa si y es un poco insoportable con sus preguntas.

Recorro las calles fumando un cigarrillo mientras veo un bar cercano, son las 4 de la tarde apenas y tengo planeado ponerme borracho para olvidar los ojos de cierta chica que comienza a volverme loco.

Salgo del auto dando un portazo, me siento tan jodidamente enojado, el enojo es mi estado de humor habitual, siempre me siento enojado y en parte se debe a toda la mierda que conlleva ser yo.

No sabía que venir a Estados Unidos me traería más problemas de los que tenía en Inglaterra, reencontrarme con el pasado de mi padre me ha traído más problemas pero prefiero quedarme callado, no quiero preocupar a mi tía, suficiente tuvo con tener que traerme aquí porque estaba cercano a malas amistades.

Siempre la cago no es por exagerar pero ciertamente soy un idiota.

Entro al bar y me siento hasta que una chica se acerca a mi sonriendo, tiene un ridículo labial rojo que sólo hace que se vea desagradable para mi.

-¿Deseas algo, lindo? -pregunta con voz chillona.

-Una cerveza fría, por favor.

Toma una y la destapa con agilidad, me la entrega y se marcha para atender otros clientes.

Comienzo a beber la cerveza mientras le doy una que otra calada a mi cigarrillo.

Mi padre hizo muchas estupideces cuando era joven y vivía aquí, él iba en River East, estaba metido hasta los talones de deudas gracias a su vicio por el billar, él y su amigo Trevor tenían ese estúpido afán por las cosas ilegales, hasta que ambos conocieron a dos lindas chicas, mi padre cayó rendido a los pies de Isabella, mi madre, y Trevor de la que sería su esposa, antes de salir de la preparatoria mi madre quedo embarazada, tuvo que marcharse a vivir con mi padre huyendo de su casa entonces él comenzo a comportarse como un idiota, maltrataba a mi madre y antes de que ella cumpliera 6 meses de embarazo perdió al bebé, entró en depresión y sólo soportaba a mi padre porque a pesar de ser un idiota ella lo amaba.

Steve (mi padre) no dejo de ver a Trevor, ambos se metieron en problemas realmente graves, la esposa de Trevor salió embarazada y huyó de su lado, él se volvió loco y se metió en mierdas ilegales e importantes, se hundió en su falta de cordura, mi madre también salió embarazada de nuevo y mi padre recapacito para bien, se marcharon a Inglaterra y entonces nací yo, un bastardo hijo de puta.

Los problemas de Trevor llegaron hasta Inglaterra y mi padre volvió a su mierda ilegal, cuando yo cumplí 6 mataron a mi madre por culpa de él y el día de mi cumpleaños número 10 mataron a mi padre en mi fiesta de cumpleaños, él no dejo su mierda y la mierda lo alcanzo y lleno a su familia.

TUCKER.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora