UNA TARDE JUNTO AL OCÉANO:

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Yo nunca podré olvidar esa última noche de verano.La noche en que decidimos descubrir los secretos de la Posada .

Todo comenzó una tarde mientras caminaba junto al océano.Soplaba el viento desde el sur levantando remolinos de arena mas allá de las dunas.Yo avansaba solo por la orilla, hundiendo mis pies en la arena gruesa y rompiendo a mi paso caparazones de crustáceos mientras el agua me salpicaba.
El mar era gris y las olas rompían Viejallenas de espuma dejando un sabor intenso a salitre en el aire. Algunas gaviotas porfiadas elevaban vuelo y los graciosos gaviotines caminaban muy juntos tratando de evitar ser arrastrados por el viento. De pronto desde lo alto de los médanos mis dos amigos bajaron en una loca carrera y me llevaron por delante. Los tres quedamos tirados en la arena y nos reímos porque a Alexia se le enredó la pinza de un cangrejo anaranjado en el pelo y a Valentín se le pegó un manojo de algas en la frente. Yo simplemente me llené de arena y agarré la mano extendida de mi amigo para levantarme.
Seguimos caminando juntos sin hablar, no hacia falta que dijéramos nada, estábamos un poco tristes por la partida. Faltaban apenas dos días para que terminaran nuestras vacaciones. Descubrir aquel pueblo perdido junto al océano me había parecido mágico y ya lo estaba extrañando.
Además había hecho amigos y me iba a costar separarme de ellos. Sin querer nos fuimos alejando del pueblo y caminamos cerca de dos kilómetros hasta que llegamos a una punta rocosa. Íbamos a dar la vuelta, sin embargo Valentín insistió en que nos subiéramos a la roca mas alta para ver la playa siguiente. Trepamos los tres saltando como monos y al llegar arriba Alexia quedó petrificada. Ella había sido la primera en llegar y estaba de pié en el punto mas alto mirando a lo lejos. Nosotros la alcanzamos un tanto agitados y entonces también la vimos:allí estaba recortada contra el cielo la silueta fantasmal de la gran construcción.
El sol todavía no se había ocultado aunque ya se aproximaba al horizonte, t la casona de piedra de más de dos pisos, que se elevaba sobre un promontorio rocoso,?se iba volviendo cada vez mas oscura, sobre un fondo anaranjado y añil.
Muchas eran las historias que se contaban en el pueblo acerca de aquella Posada Abandonada desde hacía décadas, y nadie sabía muy bien porqué se habían ido sus dueños.
Simplemente un dia habían desaparecido y la Posada Vieja habia quedado muda, guardando sus secretos.

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⏰ Última actualización: Nov 08, 2016 ⏰

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Secretos en la Posada ViejaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora