Un viejo anciano fue visitado en su casa por un grupo de niños que vendían galletas para una casa de apoyo a niños con cáncer, aquel viejo que siempre fue un hombre alegre y coquetón, poco a poco había ido perdiendo su cabello y eso lo avergonzaba ya que siempre crítico y se burló de los demás llamandoles Enfermos, ninguno de aquellos pequeños tenía cabello a causa del cáncer, el anciano sintió un fuerte golpe en su corazón al ver a esos pequeños niños empezar su vida con un gran reto de luchar por vivir, El anciano compró galletas y los pequeños con una dulce sonrisa siguieron a la casa siguiente.
-¡Que Más Puedo Pedir, Dijo el Anciano, Si He Disfrutado Mi Vida, Aunque He Llorado También He Sido Feliz, He Perdido Pero Aun Así Nunca Me a Faltado Nada, He Vivido 86 Años Sin Ningún Problema, Tuve Mi Hogar y Familia, Porque Ahora Vengo a Quejarme?.
Ser Agradecidos es la mejor acción que Podemos tener hacia Dios.
Y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones, a la que asimismo fuisteis llamados en un solo cuerpo, y sed agradecidos.
Colosenses 3:15
Elena Climaco.
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Fortaleciendo El Alma
РазноеAveces necesitamos una palabra de aliento, de consolación, una palabra que nos motive a seguir luchando, una palabra que nos fortalezca especialmente, pero también una palabra que nos exhorte no para desanimarnos, sino para corregir nuestra vida. De...
