¡Dios que más me tiene que pasar hoy!
- Ay Anastasia tú si que sabes como entretener- me dice Connor mientras me ayuda a levantarme, yo mientras tanto pienso mil maneras de como asesinarlo...Estúpido, estúpido ESTÚPIDO!!
- Verá SEÑOR en este hotel los empleados somos de variados talentos-. Digo, bueno más bien creo que le grite un poco, pero en mi defensa el hombre es un experto rompe huevos y para respuestas sarcásticas llevo la delantera .
Mientras el jefazo suelta otra carcajada, nos quedamos de pie con mi mano aún en las suya. Me quedo mirando nuestras manos, la de él, grande y cálida envolviendo mis pequeños y fríos dedos, me atrapa y no solo por mi mano, todo el me consume y aunque no quiera admitirlo me tiene... cautivada. Es mientras nos observo que siento que alguien se aclara la garganta y recuerdo que he estado mirando como una obra de arte nuestras manos mientras Daniel esta en la habitación, siento que mi cuello y mejillas se sonrojan. Eso es Anastasia sigue haciendo el ridículo.
- Hola Dani, lamento interrumpir tu turno, pero como verás tengo problemas en coordinar mis piernas-. le sonrío señalando la mesa con la que solo hace unos segundos tuve un encuentro cercano y... doloroso.
-Hola Sia, no te preocupes preciosa es mi trabajo, además conozco muy bien como eres y tus piernas con vida propia-. me da un guiño mientras se acerca a mi y me lleva a un sillón de la habitación. Mirando donde Connor sigue de pie noto que su cara tiene un gran ceño y esta dirigido a Daniel.
- Señor Fernández si pudiese comenzar con su trabajo se lo agradecería, verá, tanto la señorita ANASTASIA como yo tenemos cosas por hacer- Wow el guapote es un gruñón, Dani que no se da cuenta del tono del jefe o decide ignorarlo planta una sonrisa en su cara.
- Por supuesto señor con mucho gusto- y lo último lo dice mirándome, yo le doy una sonrisa sincera, Dan es un chico guapísimo, igual de alto que Connor, con un pelo rubio como el oro y una sonrisa de portada, lástima que sea un conquistador empedernido y no me provoque ni un aleteo. Siguiendo con su trabajo mientras Connor recoge la mesa que di vuelta, suelto un chillido cuando Daniel presiona mi cabeza.
- Bueno chica tienes una montaña en tu cabeza, el golpe debe haber sido más fuerte de como lo dices-. conteniendo las lágrimas me encojo de hombros- bueno yo recomiendo que visites el hospital para descartar alguna contusión de mayor gravedad, te recetaré estos medicamentos, para el dolor y detener la hinchazón, ahora estira la pierna para limpiar esa herida-.
Levanto la vista cuando Connor se acerca a mi lado y me observa con ojos de preocupación después de escuchar a Daniel, antes que diga nada me adelanto
- Estoy bien, no necesito ir a perder el tiempo al hospital, no es nada que mi cabeza no haya recibido, de verdad, estoy bien, solo un chichón-.me mira con cara de que no le gusto para nada mi respuesta, pero, soy yo, así que se jode.
Anastasia el señor Fernández tiene razón, de hecho es donde debería haberte llevado cuando ocurrió, a penas termine tu receta te irás derechita al hospital-. ¿Qué?
Parece que no me han oído, estoy bien solo es un golpe no es el primero ni el último que me daré, ya estoy perdiendo demasiado tiempo aquí y si quiero salir a mi hora tengo que dar marcha ya...-. y como la suerte no esta de mi lado el jefazo me interrumpe.
- Anastasia no seas tan terca que no es cualquier golpe, las cosas pueden esperar, además no te olvides que el jefe aquí soy yo, así que te doy el día, ya no requiero tus servicios por hoy-. Me mira fijamente como desafiándome a que le discuta, luego me da una sonrisa engreída, el maldito se esta burlando de mi.- Señor Fernández ¿ha terminado?-.
- Si señor su rodilla esta en perfectas condiciones nada por lo cual deban preocuparse-.
-¡Perfecto! Gracias señor Fernández puede volver a su puesto de trabajo, Anastasia usted vaya a arreglar sus cosas yo tendré un vehículo en la entrada del hotel para que vaya al hospital-.
Yo que hasta el momento, estaba en shook por este maldito y sexy hombre es capaz de sacarme de quicio, ni siquiera me di cuenta que Daniel ya había abandonado la habitación.
-Pero...pero..mmm-.
Connor se acerca a donde estoy, y se inclina hasta que yo debo inclinarme en el sillón - Nada de peros Anastasia, tú me vas a obedecer como la buena niña que eres, te cuidarás y volverás a mi sana...-. Lo último lo susurra cerca de mis labios
-Correeeecto, ir, cuidarse y volver... anotado, Conn... digo ¡Señor!..mmm-. el me mira todo el tiempo los labios y cuando termino suelta una sexy carcajada.
- Olvidó el sana Anastasia, sana y recuperada, con todas sus fuerzas, la necesito, fuerte, ahora mueva su sexy trasero de ese sillón y vaya a buscar sus cosas... ¿Anastasia?-. su voz nunca pierde el tono de burla maldito.
- ¡oh si! Anastasia yo, esa soy yo, me voy ahora, mmm, gracias Señor-. Me dirijo rápido a la puerta y cuando estoy a punto de salir su voz me detiene
- y ¿Anastasia?
-¿Si señor?
- Me alegró haber entrado por la cocina fue un encuentro... inolvidable-. Sus ojos me confirman lo que su boca dice.
-Para mi también Connor- y salgo de la habitación.
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Quiéreme tú
Teen FictionAmor.... ¿Qué es el amor? Para una persona que jamás le fue entregado, es un ideal inalcanzable. Ese es el caso de Anastasia una joven de 21 años que nunca tuvo una vida normal. En una tarde de loco trabajo en la cocina de una construcción y despué...