Football One Shot

Marco Reus

2 de la mañana,  esa era la hora que marcaba el reloj cuando desperté. Marco estaba a mi lado dormido, sentía su respiración en mi hombro. Podía escuchar la lluvia, por alguna extraña razón comencé a sentirme un poco triste,  tal vez era la hora,  el clima o simplemente la fecha.
Eran ya 2 años desde ese trágico día,  pero aún podía recordarlo como si fuera ayer.

Era una noche normal, habíamos decidido comprar un hogar y mudarnos juntos,  había sido más decisión de marco que mía,  pero yo sabia que era lo correcto. Marco y yo llevábamos 6 meses "oficialmente juntos"  pero 1 año de conocernos.
Para ese entonces yo ya tenían casi 3 meses de embarazo. A ambos nos había tomado por sorpresa,  pero más a mi. Marco era la persona más feliz del mundo, quería gritarle al mundo que sería papá,  pero por mi se detuvo. Yo no estaba lista. Nunca había estado en mis planes nada de esto,  Marco se supondría que no se volvería nada serio,  yo tenía un mal momento cuando conocí a Marco pero gracias a él todo era mejor. Aún así un embarazo no era lo que yo quería, apenas terminaba la universidad y lo menos que quería era un tener que hacerme cargo de alguien más, era una niña inmadura  aparentando ser alguien madura.
Pero seguí con marco y me mude con el a nuestro "hogar".
Ese día marco salio de viaje debido a un partido con el Borussia Dortmund y había incisistido en que Marcel su amigo se quedara conmigo. Marcel era el único que sabía de mi embarazo, nunca nos habíamos llevado bien, el sabia que yo era una niña consentida que no estaba segura de su embarazo y nunca me había visto bien para estar con marco. Pero a partir de esa noche Marcel y yo nos volveríamos amigos.
Había discutido con Marcel y estaba cansada por lo que me fui a dormir temprano.  Eran las 2 de la mañana cuando me despertó un fuerte dolor,  siempre recordaré ese dolor y ese momento, tenia miedo como nunca lo había tenido. Puse mis manos en mi vientre pero el dolor no paraba, debí estar gritando bastante por que Marcel corrió a ayudarme. Había un poco de sangre en mis sabanas y yo sabía que no era buena señal. Marcel me llevo al hospital, no recuerdo como llegue ahí o que paso después.
Cuando desperté en la habitación del hospital pude ver a Marco dormido en un sofá enseguida de mi. No debería estar aquí, el no regresaría hasta dentro de 2 días.
Puse mis manos en mi vientre y algo se sentía diferente, nadie tuvo que decir lo que había pasado, yo ya lo sabia. Comencé a llorar y eso hizo que Marco se despertará. Tomó mis manos en las suyas y me miró, él estaba triste como nunca lo había visto, se que no quería llorar, quería ser fuerte por mi. Pero una lágrima recorrió su mejilla.
"Perdón" dije aun llorando y sin mirarlo.
"Nada de esto es tu culpa" contesto Marco mientras tomaba mi rostro en sus manos y me hacía mirarlo "Amor, esto no es culpa de nadie, mucho menos tuya"
"Yo quería esto Marco, yo no quería estar embarazada y ahora no lo estoy" Era verdad yo aun veía todo eso como un error. Era mi culpa.
"No,  y deja de decir eso. Esto pasa, y lamento tanto no haber estado contigo" mientras decía eso yo seguía llorando, Marco no sabia como hacerme sentir mejor, porque ni siquiera el lograba sentirse mejor.

Tuve un aborto, después de eso nuestra relación se volvió complicada, o en realidad yo era quien complicaba todo. Marco tuvo paciencia conmigo y me dio todo el amor necesario para lograr sanar. Y con el tiempo me di cuenta que no lograría estar sin Marco.
Son las 3 de la mañana y mientras veo el rostro de Marco, descansando, soñando, en tranquilidad.  Me doy cuenta que lo amo. Nunca he amado a alguien como lo  amo. Marco es todo lo que necesito.

Su cabello más largo de lo normal cae sobre su rostro, con una de mis manos lo apartó de su rostro. Y comienzo a tocar su rosto.  Él toma mi mano y la besa "No tienes que despertarme  cuando tu estas despierta" dijo Marco con su voz aun dormido y ojos cerrados.
"No quería despertarte"
"Mentirosa"
Sonreí, claro que quería despertarlo odiaba estar despierta sola. 
"Marco,¿ De verdad te quieres casar conmigo?"
"No, solo se me ocurrió pedirtelo,  claro que quiero casarme contigo amor. Deja de hacer preguntas y vuelve a dormír"
Aún tenía los ojos cerrados,  era obvio que quería seguir durmiendo. Pero yo no.
"Pero ¿por qué te quieres casar conmigo?"
"Me caes bien"
Incluso aun dormido marco seguía siendo él mismo.
"Marcooo" dije mientras ponia mi rostro frente al suyo.
Finalmente abrió los ojos, sus ojos hermosos de ese color verde, pero no un verde cualquiera.
"Te amo y no quiero pasar ningún día sin ti, te amo tal y como eres, pero ahora mismo no te amo tanto porque insistes en despertarme" dice sonriendo. Y yo también sonrió.
"Son las 3 de la mañana, ¿por qué no vuelves a dormir?"
"No puedo"
Un pequeño silencio entre nosotros, marco esta acariciando mi cabello, sabe que eso me hace dormir más rápido.
"¿Qué pasa si no puedo tener hijos? Tu deberías encontrar a alguien"
"Basta" me interrumpe, después de el aborto los médicos dijeron que no era fácil de recuperarse de algo así.  Ni física y psicológicamente.
"Tendremos 4 hijos, 3 niños y 1 niña. El primero con tus ojos, los otros 3 con los míos."
Sonreí, el sabia como animarme.
"Pero"
"Pero nada, te amo."
"Te amo mas"
Mientras digo eso lo beso. Los besos a las 3 de la mañana son incluso mejores que a las 3 de la tarde. Aunque cualquier beso de Marco era bueno no importaba la hora.
"Además, siempre nos queda el practicar"
"¿practicar?"
"Para hacer a nuestros hijos, es mejor practicar para que sean realmente lindos"
Sonreí.
" Y ya que me despertaste creo que es justo que practiquemos ahora"