Día de Sorpresas: Parte II

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Al día siguiente Arley, se levantó con los ánimos muy bajo, miro hacia su derecha y vio a Gino dormido, se enterneció debido a que su amigo se había quedado a cuidarle, se levantó con cuidado, fue a la cocina y empezó a preparar papas fritas con tocino y batido de zarzamoras, mientras tanto el chico sintió el olor y se despertó.

- Huele delicioso - se levanta de la silla y baja a la cocina, al ver a la chica sonríe - buen día principessa -

- B-Buenos días, Gino - se sonroja -dentro de unos minutos, estará el desayuno listo, siéntate - se concentra para terminar

- Claro linda - se sienta con tranquilidad y espera

- Termine - sirve el desayuno de ambos, le pone el plato junto con el vaso - buen provecho - se sienta al frente del italiano

- Igualmente - sonríe y degusta del desayuno - esta delicioso - comenta con una sonrisa

- Que bueno, me alegro que te guste - sigue comiendo hasta terminar

- Ven yo recogeré todo - empieza a tomar los platos y los vasos de los dos

-Yo los lavare, deberías bañarte, para luego salir por ahí - dice de manera tranquila y se acerca al lavaplatos

- Está bien, por suerte pediste que me trajeran ropa - le mira y deja los platos donde debe - tú lo lavas y yo los acomodo - ve que la chica asiente

- Gracias de verdad, Gino por quedarte conmigo, después de lo de ayer - dice mientras lava los trastes

- Arley, no tienes que agradecer, siempre estaré para apoyarte en todo - toma los platos ya lavados, los seca y los pone en su lugar

Luego de que la chica y el portero terminaran todo, ambos se fueron a dar una ducha, en sus respectivos baños, luego en sus cuartos se visten y se encuentran en la sala de la casa y salen juntos.

- Me alegro que te animaras a caminar, eso te hace bien, Arley - le sonríe de manera especial

- G-gracias a ti, por soportar mis pataletas - se sonroja levemente y ve hacia un lado, se encuentra a Rika muy sonriente - esa maldita marginal - susurra enojada

- Genial lo que nos faltaba - dice con sarcasmo el portero y viendo como la chica se acercaba

- Vaya Gino Hernández, que gusto verte - sonríe muy coqueta y mira Arley con frialdad - No sabía que salías con bebés -

- Pues yo debo decir que para mí, no es un gusto verte - responde el chico con repulsión - Además ella no...-

- A ver, niña descerebrada, no soy una bebé, apuesto mi cabeza que soy más mujer que tú - intervine con lo que él italiano vaya a decir y replica molesta

- Como te atreves, yo no soy eso, además por algo Schneider, me beso - replica de manera victoriosa

- Pues tú y él me la pelan, que sean felices juntos - sonríe y camina

- Yo no soy Karl, Rika así que olvídate de que existo y si intentas hacerle algo, te las veras conmigo - va tras Arley

Rika se quedó sola y haciendo rabietas por lo ocurrido, no podía creer que el italiano prefiriera a Arley, antes que a ella, eso no le agradaba para nada. Por otro lado el Káiser, estaba mal por lo ocurrido y buscaba la manera de hablar con la mujer que amaba.

- Debo verte, hablarte y decirte todo Arley - se susurra a si mismo el el rubio mientras camina por la cuidad

- A ver Gino a donde me llevaras - pregunta la chica con una sonrisa

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