Capitulo 4

43 6 0
                                    

 Me levante enseguida de mi asiento, haciendo que todas mis cosas se cayeran, tú me ayudaste a levantarlas, no te mentiré diciendo que no sentí esa descarga cuando tu mano rosaba con mi brazo y no te mentiré porque pude notar que tú también lo sentías.

Tus ojos me veían con remordimiento y tristeza, sabía lo que estabas planeando hacer y no iba a volver a caer.

Te sonreí, haciendo como si no pasara nada, como si no me doliera que estuvieras tan cerca de mí y no poderte tocar o abrazarte por miedo a que lo hicieras por un simpe juego.

Tus ojos toparon con los míos, los mirabas como buscando algo en ellos y cuando parece que lo encontraste, tus facciones se tensaron completamente, comenzaste a negar con la cabeza y a dar pequeños pasos hacia atrás.

Eso me asusto, creo que nunca me había asustado tanto como ese día, parecías loco, no sé qué viste pero parece ser que no te gusto, a lo mejor fue el frio en mi mirada o el resentimiento que tenía hacia ti.

Pero me asusto mucho verte así, cuando te diste cuenta que estaba asustada corriste hacia mí y me envolviste en tus brazos, no decíamos nada, pero estar así, dolía tanto que no aguante y me separe de ti.

Vi el pánico en tus ojos pero no me importo cuando te volviste acercar a mí, una voz nos interrumpió, era mi amigo.

El llego hasta donde estábamos, el comparado a ti si pudo ver que me dolía toda esa situación, no te miró simplemente puso un brazo por mis hombros y comenzamos a caminar a dirección contraria a ti.

Cuando llegamos al final del pasillo, escuche un grito y lo demás que supe es que estabas encima de Jorge golpeándole, te grité y te gritaba desesperada para   que pararas,  le estabas haciendo daño, pero no escuchabas, entonces me acerque para que se separaran, pero tu codo conecto con mi abdomen haciendo que un grito de dolor se escuchara, al parecer eso hizo que los demás chicos que estaban en los vestidores salieran a ver que era lo que ocurria, cuando se percatarón de la situación corrieron hacia nosotros.
Me quede en el suelo viendo como tus amigos te separaban de Jorge al momento que lo soltaste, el corrió hacia mí para saber si estaba bien y entonces te diste cuenta lo que habías hecho.

Me ayudaron a levantarme, baje mi mirada no te quería ver, no sabía lo que había pasado y tú no decías nada, entonces volví a entender "tenía que alejarme de ti" aunque me duela.

"No, no" comenzaste a decir mientras luchabas para zafarte de tus amigos

"¡JODER! NO, perdón nena... ¡PERDÓN!" Volviste a gritar, mientras yo salía del lugar con mis mejillas mojadas

SI NO TE HUBIESE AMADODonde viven las historias. Descúbrelo ahora