Enamorada de un... ¿Nerd?

Capítulo 5* Te lo agradezco pero no.

Te matará. Corrección, nos matará.

-¡Hola mamá!- dije poniendo la sonrisa más inocente que pude.

-¿Por qué tan tarde? Y ¿Era Evan?- me preguntó cruzándose de brazos.

-Emm- puse mi mano en mi cabello como gesto nervioso- verás mamá, a la salida Evan y yo nos quedamos platicando en las canchas... El tiempo se nos fue volando y cuando vi la hora, ya era muy, pero muy tarde y se ofreció a traerme en su moto.

-¿Eso es todo?.

-Claro mamá, ¿Qué querías escuchar?- puso cara de se besaron. Lo sé. Así que me apresure a quitarle esa loca idea de la cabeza- ni lo pienses madre.- dije con tono acusador.

Soltó una fuerte carcajada y me hablo.

-La cena esta en el horno.

-¿Qué?, mala familia que no me espera para cenar. ¿Sabes lo que significa ohana? Significa familia, y tu familia nunca te abandona.- grité con tono dramático.

-No te esperaríamos toda la vida cariño.

-Solo me retrase unas horas, y en realidad nunca cenamos tan temprano.

-Te retrasaste cuatro horas y media.

El tiempo no perdona. Cállate.

-¡Oh!, en ese caso no Hay problema.

-Y dime ¿Qué tal van las cosas con Evan?.

-Normales, como siempre.

-¿Solo amigos?- pregunto mi madre alzando una ceja.

-Solo amigos.- Afirme.

Comenzó a lavar los platos de la cena (en la que no estuve presente).

Eres muy dramática.  Somos muy dramáticas.

En la pequeña radio de mi mamá sonaba Where Are Ü Now (de Skriller y Diplo whith Justin Bieber.)

Comencé a comer pensando en la linda sonrisa de Evan y en el color de sus ojos...
Y sus hoyuelos...

-Peter llamó.- dijó mi madre sacándome de mis pensamientos. En el momento en el que escuche el nombre de mi adorado primo deje mi cena esperando escuchar la noticia completa...- Dijo que nos extraña y que tiene la próxima semana libre, la aprovechará para visitarnos.

Mientras mi cerebro procesaba toda la información, tardé como cinco segundos más y sin importarme nada grité como loca mientras me paraba de la silla y brincaba.

-¡Vendrá!,  Pan vendrá.- grité y alcé las manos al cielo mientras bailaba la canción que sonaba en la radio.

Peter es mi primo literalmente crecimos juntos, el me gana con 2 años (ahora tiene 18 y esta soltero 7u7) va a la universidad en Carolina del norte. Se que quieres saber porque crecimos juntos,  es una historia triste, te contaré el principio:

Celebrabamos el inicio de vacaciones de verano y estabamos en casa de nuestra abuela jugando en el jardín trasero con pistolas de agua yo tenia cuatro años y el seis, corríamos, reiamos y nuestros rostros regordetes y pequeños solo presentaban felicidad...

Pero de manera tan repentina escuchamos unos sollosos procedentes de la cocina,  mi mamá y mi abuela estaban ahí, así que corrimos hasta llegar a ellas.

- ¿Qué pa-pasará con Peter?, soy vieja y no po-podré hacerme cargo de él to-todo el día.

Cuando escuchamos eso Peter me frenó y nos ocultamos detrás de la puerta, yo estaba muy asustada, mi madre y mi abuela jamás lloraban, yo las consideraba las mujeres más fuertes del mundo...