Blue Soul (Sans x Frisk)

Capítulo 12: La verdad.

¿Aún no te lo cuenta?
-¿A que te refieres?
Cuestione a la voz dentro de mi cabeza, costaba pensar que no estoy loca luego de esas conversaciones.
Sans, ¿Aun no te cuenta la verdad?
-Sans nunca me ha mentido, Chara.
¿Segura? Inocente Frisk.
¿Enserio estaba segura? Pensé en todos los momentos vividos juntos y las varias mentiras que supe, pero el le mentía a Paps para evitarle dolor...
-Segura, el nunca me mentiría.
Entonces, ¿Por qué no te comento de las lineas temporales? ¡Oh! ¡ya se! Él no quiere aceptar que quien ama fue y sera una asesina... Siempre.
-Ya callate ¡Callate y vete!
Podríamos gobernar este mundo de mentirosos juntas, Frisk.
-¡Vete de mi vida, Chara!
Sans solo te utiliza para traerlo de vuelta.
Mire mi reflejo en el espejo y me sentí asqueada al ver a Chara sonriendome con maldad, lo golpee en un intento desesperado de que se fuera pero solo logre que mi mano sangrara y mis HP bajaran... De igual manera ella ya no estaba.
-Mi niña... ¿Como paso eso?
Preguntó lo último más alterada mientras examinaba mi mano pero solo me limite a observarla mientras lloraba.
-Fue sin querer...
Gimote limpiando las lágrimas con mi manga.
-Oh vamos abajo, te preparare un pie mientras tu padre ve eso.
Asentí cabizbaja pero lo que mamá Toriel me proponía era lo que más quería, volver todo a como cuando comencé esta aventura, ¿Enserio en otra linea cometí el error de hacerle daño a todos ellos? Bajamos las escaleras y papá Asgore ayudo a curarme eso mientras Tori estaba en la cocina justo como cuando era pequeña.
-¿Qué pasa, pequeña?
Negué con mi cabeza para volver a sollozar, debía comentarle a alguien sobre Chara pero no a papá.
-Estoy algo cansada.
Volví a sollozar cuando sentí que me abraza y el olor a pie de canela con caramelo inundaba la habitacion, también debía hablar con Sans sobre lo que Chara me susurraba todas las noches antes de dormir: Te utiliza, solo lo quiere a el de regreso.
-El pie para mis monstruo y humana favoritos ya esta.
Sonrió saliendo de la cocina y nos miro enternecida, dejó el pie sobre la mesa para correr a buscar algo volvió con una antigua cámara y nos fotografió.
-Mamá...
Reclame y ambos rieron.

Recordé la primera vez que vi a Sans en aquel puente cuando me jugo la primera broma, no se alejo de mi nunca más al principio fue porque mamá se lo pidió pero luego siguió por el cariño que me había tomado a pesar de su actitud perezosa el estaba en todos lados cuidandome y lo hacía porque realmente le preocupaba. Luego de que la barrera se abriera nada cambio él seguía tras de mi cada vez que podía solo para cuidarme y yo hacía lo posible para que fueran aceptados, los años pasaron y mi amistad con Sans seguía intacta con el simple echó de que yo ya no lo podía mirar como un amigo... El me gustaba pero habían muchos factores jugando en contra, y-yo realmente no espera que el sintiera lo mismo, no esperaba que me amara como yo a él. Es por eso que ahora que lo tengo enfrente no puedo ni imaginarme el haberlo dañado en otras vida o que el me este utilizando para algo porque cuando nuestras almas se unieron sentí que nuestro amor era verdadero.
-¿Por qué estamos aquí?
El viento movió mi cabello cubriéndome un poco la cara, Sans sonrió divertido para quitarlos dejándolos tras mi oreja.
-Tenemos que hablar.
Sans se tensó, tome aire.
-¿Estas embarazada?
Murmuro casi inaudible y yo solté una risa.
-¿Eso se puede? Digo... ¿Humana y monstruo?
-Yo he... Jejeje.-Rasco su nuca y no pude evitar sonreír por como se veía.- Se lo pregunte a Alphys el otro día y después de leer por horas dijo que si... Supongo que me ilusiona la idea de una familia.
Mi corazón dio un vuelco ante esa pensamiento.
-Sans, ¿Me has mentido alguna vez?
-Si lo he echo fue por protegerte, me importas.
-¿Me has utilizado?
-Sería incapaz.
Se encogió de hombros mientras miraba a Papyrus correr con el pequeño perro por el parque, estábamos en nuestro lugar.- ¿Por qué preguntas?
Era el momento si no lo decía ahora no lo haría nunca.
-Porque... me están pasando cosas raras últimamente, nada importante.
Le sonreí antes de apoyarme en su hombro.
No quería arruinarlo, la verdad podría esperar.