"En La Guerra No Hay Ganadores"

Capítulo 22. Batalla.

Lugar Desconocido.
12:00 A.M.

Y ahora! Con todos ustedes! El evento principal!.

Una gran puerta se abrió frente a nosotros haciendo que la luz del exterior iluminara todo el cuarto.

Yoel, despierta... Esto... Parece que va a empezar...

Mire a Beatríz a duras penas, ella parecía cansada sin embargo también se veía lista para lo que viniera.

Adelante!

Nuevamente resonó aquella voz por las bocinas, las cadenas que nos sujetaban a la pared se rompieron repentinamente, me acerqué de prisa a Beatríz pues callo al suelo de rodillas.

Estas bien?... Puedes quedarte aquí si no te sientes bien.

Mis palabras fueron en vano pues las paredes nos comenzaron a empujar hacia afuera.

Tsk... Todo estará bien Beatríz...

Al salir completamente pude apreciar que nos encontrábamos en un Coliseo pues la forma de las gradas era igual, la arena tenía muros altos alrededor para que no escapáramos.

Peleadores! Esta vez tenemos a un invitado especial!... Probaremos sus habilidades y veremos si vale la pena, esta persona es Yoel! El portador del Gen Perfecto!

El público grito al unísono, todos parecían ser parte de bandas o organizaciones criminales, sólo había un grupo reducido de personas en lo más alto los cuales parecían tener dinero por montones pues todos portaban trajes de gala.

Ahora! La primer arma de la noche será una katana, esta katana tiene varias funciones, los luchadores pelearan hasta que quede una pareja de pie, los ganadores se la llevaran.

Varias compuertas se abrieron alrededor de la arena, de estas salieron varias personas, personas que jamás había visto.

Beatríz... Esto se pondrá muy feo... Necesitamos sobrevivir.

Beatríz me miró un momento y regresó su mirada a los demás peleadores, se veía mal herida, tenía que protegerla de alguna u otra manera.

Hagamos lo mejor que podamos.

Dijo ella, seguido un gran estruendo se escuchó, el cañon que anunciaba el inicio de este caos.

Todos los peleadores dudamos un momento, mirábamos a los demás, nadie parecía querer pelear hasta que alguien de la tribuna disparo matando a una chica que se encontraba en la arena, todos reaccionamos al instante y comenzamos a correr al centro para intentar tomar la katana.

El caos que venía era inminente, teníamos que pelear y aunque no supiera de que hiba todo esto sabía que tenía que sobrevivir, sobrevivir yo y ella.

Vamos, si tomamos la katana tendremos ligera ventaja.

Beatríz se me adelantó, a pesar de estar herida era más rápida que yo, parecía que los nanobots no se habían desactivado en ella pues la velocidad que llevaba era demasiada.

Enemigos por la derecha, por la izquierda, nos mirábamos sin embargo no atacábamos.

La arena era grande, cuando estuvimos cerca de el centro el suelo comenzó a temblar y de un momento a otro se dividió dejando plataformas con poco más de 2 metros de separación, nuevamente todos nos quedamos quietos, nadie quería caer mucho menos morir.

Beatríz salto, confirme que los nanobots en ella estaban activados, corrió ella sola al centro sin embargo un chico y una chica de distintos equipos también saltaron, tres personas corrían hacia la katana, para mala suerte de Beatríz el chico la tacleo, la chica aprovechó esos momentos para tomar la katana y atacar a ambos pues el chico no era de su equipo.

Beatríz reaccionó rápidamente, se movió y la katana pasó cerca de ella sin embargo no le hizo daño en cambio si se enterró en el pecho del sujeto, Beatríz se levantó con velocidad, la chica alaba la katana para atacar pero Beatríz fue más rápida, ataco a sus piernas y derribo a la chica, tomo la katana y corrió de nuevo hacia donde yo estaba.

Toma la katana!

Beatríz no lo pensó y la arrojó hacia donde yo estaba, la katana callo por un lado mio, la tome rápidamente, apuntaba en ambas direcciones por si me atacaban sin embargo todos me miraban sin moverse de su lugar.

Las cosas tomaron un rumbo diferente! Yoel tiene la katana en sus manos, ahora sólo es cuestión de que comienzes a asesinar!.

Beatríz llegó a donde yo estaba, se colocó detrás de mí cubriendo mi espalda.

Yoel... Que hacemos?

Estaba helado, tenía que asesinar sin embargo no quería.

El equipo de Yoel no se mueve! Será que no quiere asesinar a los demás jugadores!

Tanto Beatríz como yo nos mantuvimos quietos esperando a ver qué hacían los demás pero nadie se movía, todos permanecían quietos.

Parece que nadie quiere atacar! Supongo que tendré que darles algo que los motive!

Aquel sujeto, su voz era irritante, me enojaba tan solo escucharla.

El equipo que termine con la katana en sus manos tendrá el privilegio de dormir con comodidad esta noche, será atendido por médicos y comerá un delicioso banquete!

No entendía de que hablaba sin embargo la atención médica la necesitaba Beatríz, tenía que ganar y que la atendieran.

Todos se abalanzaron, se veían animados, probablemente tenían mucho tiempo en este lugar como para que atacaran sin pensar.

Un equipo frente a mi, otro equipo frente a Beatríz, cuatro personas por cada lado o por lo menos en estos momentos.

Beatríz, corramos hacia los de mi lado, los dejaremos heridos, no mataremos a nadie, sólo heridos recuerda, golpeare con la parte trasera de la katana, la que no tiene filo.

Beatríz asintió, corrimos hacia nuestra primera confrontación, teníamos que dejarlos sólo sin moverse.

Atacamos, Beatríz salto para golpear el rostro de la chica, yo me deslice por el suelo, había volteado la katana, ataque a la espinilla del sujeto, el golpe fue seco y bien centrado, no tardó nada para que estuviera en el suelo.

Beatríz había golpeado a la chica en la cara, su fuerza estaba aumentada por lo que de igual manera y en cuestión de nada la chica ya estaba en el suelo con la nariz sangrando.

Bien, corramos de regreso, enfrentemos a los dos sujetos que vienen por detrás.

Apenas giramos nos percatamos que aquellos sujetos ya estaban detrás de nosotros, atacaron, uno de ellos lanzó un golpe hacia mi rostro, quize bloquear con la katana sin embargo no me percaté que está tenía el filo hacia enfrente, su mano, se incrustó en la katana dividiéndose y formando un balón de sangre, el corte fue tan profundo que había cortado las venas que llegan a su mano.

Estaba helado y bañado de sangre, el sujeto se hecho para atrás, callo al suelo y gritaba del dolor, la multitud enloqueció, gritaban animados por lo que había pasado sin embargo yo, yo no sabía si seguir adelante, no quería matar a nadie, no quería.