El reloj apenas y se mueve, el profesor Stanley no para de hablar sobre algo a lo que realmente no prestó atención.
Ya faltan tres minutos para que la clase termine y todos iremos a casa, necesito salir de aquí. Aun nosé si lo volveré a ver pero no es un delito soñar.
—Señorita Kaelyn— me llamo el profesor.
"Mierda"
—Diganos un resumen del tema porfavor, ya que se le ve que está tomando apuntes.— señalo el cuaderno que tenia sobre la mesa.
Lo cubri rápidamente con el brazo.
"Si claro, yo tomando apuntes de su clase"
Mas bien estaba dibujando corazones por toda la hoja.
—Yoo.. — y ahora que me invento!
Y como un milagro divino la campana de salida sonó.
"De la que me salvé "
El maestro suspiró y dejó que nos marchemos a casa, no sin antes amenazarme con que la proxima clase tendría que darle el resumen.
"Luego pediría apuntes a algun cerebrito"
Tan rápido como pude, guarde mis cosas y sali no sin antes despedirme de mis amigas. Y con la mirada de todos salí corriendo del aula.
Mismo autobús, misma hora.
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Al otro lado de la ventana
Random-Todos los días tu reflejo en la ventana me hacía sentir vivo. *** -Y aunque no me mires, yo siempre te miraba. HISTORIA CORTA, NO TAN CORTA. #AOLDLV
