¿QUE PASO EL 7 DE NOVIEMBRE?

SIN RECUERDO

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PERSPECTIVA DE SARUHIKO

El sonido de un cristal rompiéndose lo despertó. Posiblemente un vaso mal puesto o algún animal habían entrado a su departamento. ¿Qué hora serían? La cortina impedía que la luz del sol entrara pero seguramente eran más de las 12. Al abrir los ojos completamente corroboró que estaba en su departamento. Pero no recuerda cómo había llegado ahí.

Su PDA sonó tal vez por enésima vez, se oía lejos. Con pereza comenzó a moverse pero algo lo detuvo. Un peso extra en su brazo izquierdo, ya decía por qué no lo sentía.

—¿eh?... —

Ahí estaba, aquel chico pelirrojo dormido profundamente sobre su brazo y ahora que lo ve bien, sobre él. ¿Qué hacía ahí? No, ¿cómo llegó ahí? Un escalofrío lo recorrió al verlo desnudo... ¡ambos lo estaban! Su vista bajó a su abdomen y en el transcurso notó varias marcas que tal vez él haya hecho y no recordaba.

¿Qué paso entonces?

Se movió despacio cuidando de no despertarlo porque seguramente le haría un escándalo. Salió de la cama buscando su ropa entre la que estaba regada en el suelo. Y de paso su PDA que comenzó a sonar. Escarbó hasta dar con él y poder responder porque ya empezaba a tener dolor de cabeza y seguro una resaca de las malditas.

—Fushimi al...—

— ¿Dónde estás?—ni tiempo le dio de responder, la mujer tras la bocina ya había comenzado a sermonearle y a decir cosas que no podía procesar porque el dolor de cabeza era más fuerte. Le colgó.

Se metió a la ducha para así tratar de recordar qué fue lo que ocurrió y cómo es que Misaki yacía dormido a su costado en su departamento. Cielos, llevaba ya varios años imaginando una escena similar pero no creyó que fuera así tan... ¡que no recordara nada! ¿Maldición que le habían dado de beber? Fue entonces que recordó algunas escenas pero no las que deseaba... no ahora.

Misaki gimiendo bajo su cuerpo mientras su espalda era rasguñada de una forma salvaje... de su agitada boca salían deliciosos gemidos que componían su nombre...

—Maldición...eso no me llevará a nada— cerró la llave quedándose un momento contra la pared, ambas manos apoyadas en la misma mientras las gotas resbalaban de su cabello hasta el resto de su cuerpo. Pero no lograba despejar la mente, el dolor de cabeza le impedía pensar y el hecho de que Misaki despertara armando un escándalo estaba cerca —tsk—

— ¿Saru?... — y pasó.

◀◀

Días antes, sus subordinados comenzaron a actuar extraño. Cuchicheaban entre ellos y en ocasiones le evadían la mirada. Por supuesto no era de su incumbencia pero el hecho de que dejaran el trabajo a medias para irse a platicar como señoras en el parque le irritaba y en varias ocasiones les llamó la atención.

El tercero al mando estaba consciente de que en los próximos días estaría de cumpleaños. Aunque en realidad no le importaba, no desde que dejó HOMRA y dejó atrás todas esas cosas no consideraba importantes...salvo el amor que sentía por el vanguardista. Uno que se llevó con pesar en el pecho. Pero pronto lo volvió un amargo recuerdo junto con las celebraciones que Misaki se empeñaba en hacer, con esos estúpidos regalos y adornos que le molestaban.

Más ahora que tenían una "reconciliación" entre clanes, prometieron verse y hablar, mejor dicho, él lo prometió sin darle alguna esperanza. No estaba dispuesto a hacerlo, era muy pronto aunque sentía una necesidad de tener de nuevo su atención. Aquella pelea donde fueron un equipo le dejó un amargo sabor de boca. Tampoco es que Misaki le haya insistido, sólo un mensaje "nos vemos cuando puedas" olvidado en su PDA y para ser sincero, mataba todas las ganas de querer entrar alguna plática para que entendiera.

—Fushimi –san, ¿está ocupado el fin de semana? — fue cuando todo empezó. La pregunta inocente de Andy le llevó a sacar miles de conclusiones y entre ellas que iba a tener una fiesta.

➤

Salió de la ducha notando que Misaki seguía dormido. Considerando que el vanguardista tenía el sueño pesado, sumando el mal aguante con el alcohol tardaría un día en despertar. Eso le daba muchos puntos a su favor y tiempo para pensar en qué hacer cuando despertara, tiempo para recordar todas las cosas que pasaron y deseó que así sea. Sin embargo Misaki dormido era una maravilla para contemplar.

Se colocó unos jeans y una camisa, después cubrió a Misaki con la sabana y acarició su rostro con cuidado de no molestarlo. A pesar de ser un hombre, el rojo poseía facciones tan finas que a Saruhiko le fascinaban. Pasó los dedos por las mejillas rojas y los labios entre abiertos. Acomodó sus alocados mechones quedándose unos segundos así. En el fondo deseaba que no despertara pronto. Porque al hacerlo, todo podría acabarse entre ellos. Echaría la culpa al alcohol y quedaría en un mal entendido con la típica frase "olvidemos que no paso".

—Misaki...— retiró la mano levantándose de la cama para dejarlo dormir. Ahora necesitaba un café y concentración.

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¡HOLA!

Les traigo una pequeña historia quizá de dos capítulos (?).
Últimamente el WP me ha estado fallando y no sube los capítulos largos xc, como ahora que me borro la historia e__é)9

Espero les guste y que me perdonen por no subir capítulos, but, esta semana lo haré. Serán recompensados <3 

Les agradezco sus votos y comentarios, trato de responderlos todos y en ocasiones son desde el trabajo x'DD, pero me dan ánimos para seguir. ¡Los amo! <3