Ese Dios es Sólo MIO (Zamasu x Black) [Terminado]

Cap.7

¿Qué fue lo que paso? ¿Acaso esto es un sueño? ¡¿Realmente sucedió?!

-¡HAAAA! ¡Maldito!-Grito con todo el aire que sus pulmones podían guardar, había pasado apenas 5 minutos de que Zamasu se había ido, y Black apenas se enteraba de lo que había pasado

-¡Me las pagaras muy caro!-Estaba muy sonrojado, furioso, nervioso, confundido, se podría decir que en esos momentos tenía un licuado de emociones, no entendía la razón por la cual no había reaccionado antes y haber apartado de un puñetazo al mayor, simplemente, lo dejo que él se aprovechara de él y su estado de impresión

-Tsk…maldición…y ese era mi primer beso…-Toco sus labios delicadamente, al momento de hacerlo recordó la extraña e incómoda sensación que experimento al momento de tener los labios de Zamasu junto con los de el

-Se sentía como…si quisiera más…-Abrazo sus rodillas y hundió su rostro en ellas, no negaba que estaba confundido en esos momentos, solo quería olvidarlo todo y regresar a su vida normal…o eso quería creer él...

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Pasaron algunos minutos de haber sido visitado por el peliblanco, ahora mismo el azabache se encontraba caminando hacia el templo en busca del kaio-shin, que según Zamasu este lo buscaba

-¡Ho joven Black! Finalmente lo encuentro-Decía Gowasu al mismo tiempo que se acercaba al pelinegro

-Zamasu me ha dicho que me estaba buscando

-Y es verdad-Sonrió el Kaio-shin y coloco una de sus manos en la espalda del menor para después ambos comenzaran a caminar por los pasillos del palacio

-¿Para qué me necesitaba?-Pregunto Black, aun después de cómo ha tratado a Zamasu él era un chico educado cuando se necesitaba o que el supiera con quien estuviera tratando

-Bueno, con lo que me has contado en la tarde al parecer no es muy seguro el que regreses ahora-Los dos se detuvieron quedando uno frente al otro, Black estaba nervioso mientras que Gowasu un poco preocupado por la situación de aquel pequeño humano

-Es por es que me gustaría que te quedaras unos días aquí, sé que estas muy preocupado por tu hermano pero en las condiciones con las que te encuentras ahora mismo va ser un poco imposible el que puedas ayudarlo en algo-El azabache suspiro resignado, después de todo lo que el Kaio-shin decía era verdad, si el iba a hora mismo a la tierra no sería más que un estorbo para su hermano, un poco desanimado asintió con su cabeza, dándole a entender a Gowasu que se quedaría ahí por unos días

-Descuide señor, aquí me quedare, no habrá de que preocuparse-Intento sonreír un poco forzado, estaba triste al saber que tardaría en regresar a su hogar y el tener que ver nuevamente al peliblanco, que ahora, después de aquel beso, ya le sería imposible mirarlo a los ojos

-Me disculpo mucho joven Black, sé que no es mucho de su agrado el estar aquí, pero…es la única manera ahora mismo-Suspiro cansado el Kaio-shin, Black no era muy bueno ocultando sus emociones, así que él se había dado cuenta de la tristeza que este lo inundaba

-Puede pasar a su habitación, esta al fondo a la derecha de este pasillo, no es difícil de encontrarla

-Gracias Señor, que descanse

-No te preocupes joven Black, le prometo que todo se arreglará-El azabache comenzó a caminar y escuchar las palabras de aliento que aquel anciano le brindaba, después de todo no hacía daño a nadie el tener algo de esperanza

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-Ahora veamos…. ¿Dónde dijo que era?-No había pasado ni tres segundo que se había alejado del punto en donde momentos atrás Gowasu y el hablaban y ya estaba perdido, pero para su desgracia ahora no había nadie que lo pudiera ayudar en esos instantes ¿A dónde debería de ir? Estaba a punto de rendirse e ir a cada pasillo para buscar al Kaio-shin hasta que cerca de donde él estaba pudo observar una puerta entre abierta, tenía la luz prendida y al parecer alguien se encontraba dentro, ya que se escuchaban algunos ruidos en el