Luces de búsqueda

...

–Te encontré...

El ambiente se había visto impregnado de una ligera capa de curiosidad.

El joven se había acercado a su mochila y rebuscado entre prendas un sobre, se acerco de nuevo a Sakura, extendiendo la hoja hacia ésta, quien lo miraba curiosa y extrañada. Sin prisa alguna abrió la cinta del sobre en la cual había una fotografía de su familia. De sus padres, ella sobre los brazos de papá y con su mamá sonriendo frente a la academia. Recordaba ese día, fue su primer día en la escuela. Miró con todos los sentimientos a flor de piel, el sobre entre sus manos, anhelando que esa fotografía jamas desaparezca, que no fuera un simple sueño.

–Te he estado buscando todo el día, la ingrata de Saeko no quiso decirme dónde encontrarte. ­– se lamentó el chico mientras la veía como si hubiera encontrado el significado de la vida. – pero nunca perdí la esperanza, sentía el calor del chakra de Satoshi así que sabría que podría llevarte a casa.

– ¿A casa? Sakura-chan... está es su casa.

–Solo te queremos en el festival este año. Sabes que la celebración será en un mes, tenemos muchas cosas que hacer y tú tienes mucho que aprender. – ignoró el comentario del rubio haciéndolo indignar. – Solo este sábado las puertas serán abiertas para los del exterior, Haruka-san dijo que tendría que venir por ti y por aquellos a los que quisieras llevar.

–He estado un poco ocupada estos días, yo...

–Satoshi volverá, dentro de tres días. Y ha rogado por poder verte en casa, dentro de lo que es suyo.

Dentro de tres días, volvería a verlo. Habían pasado casi de 8 años desde la última vez que lo vio...
Esa noche había sido eterna, los principales del clan solicitaron a un Haruno externo para que fungiera como embajador. Al ser ellos nietos de Hibabaru Haruno tenian que dar el frente como representantes. Desde el principio Sakura tenia que tomar ese papel, el cabello rosa era lo distintivo a la linea de sangre, Kizashi ya estaba viejo para aquel trabajo. Asi que, sin mas Satoshi se ofrecio tributariamente.

-Incluso si aceptará soy supervisora en el Hospital General, no puedo dejar mis responsabilidades -Eso había sonado mas como una excusa molesta.

Sakura tomó sus cosas, dejo dinero en la barra y salio esquivando al forastero.

-Haruno'Chan - Se angustio al ver salir a la joven - Por favor, usted es mi mision.

Todos habian salido del local, siguiendo a la chica que se esforzaba por estar calmada. El forastero de cabello Verde se inclinó rogando por ser escuchado, mientras el equipp siete permanecia al margen de la discusion.

-Mi última palabra es No...

Eso creía ella hasta ese día :V