Soy un idiota.
Me desperté con un dolor de cabeza infernal. No debí haber tomado tanto.
Es que realmente me excedí, lo último que recuerdo es haberme tirado a la piscina con ropa y chicas en ropa interior rodeándome. ¿Acaso todas las fiestas de Freddie tenían que ser como Proyecto X? Ayer definitivamente no me puse límites, y sabía exactamente cual fué la razón.
Maldita Sam, maldita ella y su estado. Estaba tan acostumbrado a que las chicas se derritieran por mí que me frustré demasiado al no ver su reacción cuando me saqué el polerón. Lo acepto, me piqué, pero es que estar con alguien así siendo alguien como yo es frustrante. Soy un egocéntrico. Soy una mierda.
Me levanté a duras penas y encendí la ducha. Me bañé con agua helada, necesitaba despertar de una vez. Me vestí y bajé. En la cocina estaba Fred y Louis, ambos sentados en la mesa conversando.
- ¡¡Está vivo!! - gritó Freddie mientras se paraba de su silla eufóricamente.
- Agua... - me dirigí rápidamente al mueble, tomé un vaso y lo llené con agua.- ¿Podrías no ser tan escandaloso? Me duele la cabeza.
- Con el reventón que te mandaste ayer, ¡a quien no! - rió Louis.
Me senté y apoyé mi cabeza en mi mano. Lo único que quería era agua.
- ¿Que hora es? - ni siquiera me había molestado en mimrar la hora desde que me levanté.
- Son casi las tres. Con Lou ya comimos algo.
Que mierda. Dormí demasiado. Soy de esas personas que se acuestan temprano y se levantan temprano.
Me hice un sandwich, tomé mucha agua y salí a caminar. Donde vivimos es difícil hacer eso porque son muchas colinas, vivimos en el cerro, el barrio alto.
Paré en una pequeña plaza donde habían unos cuantos columpios y juegos varios. Encendí mi celular y me senté en una banca.
¿Donde estás? - Sam
Estás haciendo el ridículo, bájate de esa mesa -Sam
¿Donde estás, guapo? - Melanie
Me encantó que te hayas sacado la polera en la piscina, ¡quiero ver más! - Lola.
Muy bueno ayer - Savannah
Me encantas cuando te emborrachas - Mackenzie
Wow ¿Tan borracho estaba? En serio me acordaba de la mitad de lo que había pasado la noche anterior. Después de Sam me había largado a tomar como loco y perdí el control, como siempre. Pero hey, al menos la chica se preocupó por mí. Vamos por buen camino, Seth.
-
Me levanté a las 7:00 AM, más cansado de lo normal. Me duché y me puse el uniforme del insituto. Hoy iba a llegar mas tarde, tenía que ir al Insituto Washington - donde mis hermanos estudiaban- para ver si me aceptaban nuevamente.
- Seth, apuráte, la reunión es a las 8:00. - estaba comiéndome mis cereales y mi mamá ya estaba estresada.
- Calma, ya casi termino.
La mujer se dirigió al jeep y encendió el motor. Recuerdo que nos esperaba ahí todas las mañanas antes de que me expulsaran. Ahora tenía que irme con el vecino. Mamá se maquillaba en su preciado Ford Explorer mientras los chicos y yo nos lavábamos los dientes y nos terminabamos de arreglar. Como todo buen galán, me perfumé, me lavé los dientes y me heché un último vistazo al espejo.
Y ahí estaba. Pelo oscuro, piel tostada, ojos grandes y cafés. Nada fuera de lo común. Mi cabello era crespo y casi siempre lo llevaba corto. Tenía pestañas largas y onduladas, mi nariz era delgada y respingada, como la de mamá. No era ni alto ni bajo, estatura promedio. Delgado, con la polera se podían apreciar los músculos de mis brazos. Me abrí un poco el cuello de la polera para no verme como un idiota, y para darme mas estilo.
- ¡Seth! ¡Baja! - gritó Freddie desde el primer piso.
El trayecto no se hizo largo, Louis trataba de convencer a mamá de ir a su viaje con sus amigos a Brasil. Sin duda le iban a dar permiso, es el hijo perfecto.
Nos estacionamos y los chicos se dirigieron al edificio de secundaria, mientras que con mi mamá nos quedamos esperando en el hall para que nos llamaran de rectoría. Como hay que pasar por este para llegar al edificio de secundaria, recreé mi vista un poco. Varias chicas pasaron y detuvieron su mirada en mi, algunas conocidas con cara de "¿que hace aquí de nuevo?" y otras simplemente pasaron sin dirigirme la mirada.
- Seth Jenner. - alzó la voz una secretaria desde su oficina. Mi mamá se asomó por su puerta. - El director del instituto los está esperando.
Hora del juego.
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Sam
Teen FictionMas del 7% de los adolescentes padecen de depresión. El suicidio en adolescentes es la tercera causa mundial de muerte. ¿Han escuchado el dicho "cuidado con tratar de arreglar a alguien roto, porque te puedes cortar con los pedazos"...