WHISKY ›› V-Hope ‹‹

Parte uno

-¡Kookie! ¡Kookie! Mira esto. –El segundo más joven de los Bangtan Boys, corría entusiasmado con una larga caja negra en su mano derecha. El nombrado lo miró y se acercó a él con una expresión neutra en el rostro.

-¿Qué pasa, V-hyung?

-Una fan me regaló una botella de Whisky –el rubio le mostró la larga caja, poniéndola enfrente del rostro del maknae. Éste miró al rubio con enojo, un poco más y le estrellaba la caja en las narices.

-A mí también me regalaron una. –dijo JungKook serio, demasiado serio.

-Sí, pero es que es tan... tan... -Taehyung comenzó a dar pequeños brincos en su lugar, acentuando su sonrisa.

Estaba realmente emocionado.

-No entiendo por qué tanta alegría, hyung. –volvió a hablar JungKook.

-Ella me dijo que el whisky era para hombres –dejó de brincar y miró al maknae-, eso quiere decir que soy un hombre. –irguió su espalda y acomodó el cuello de su camisa, poniendo toda la seriedad posible en su rostro.

-Claaaaro... -alargó la palabra y comenzó a reír.

-Yah –el rubio golpeó en el hombro a JungKook- ¿De qué te ríes?

-Es que, V-hyung tiene de hombre lo que Jin-hyung de buen bailarín –y soltó una sonora carcajada, llamando la atención de todos en el lugar.

Los flashes de las cámaras no tardaron en dirigirse a ellos y las miradas de sus compañeros tampoco. Las fans comenzaron a gritar al ver a la linda pareja, mientras el castaño reía, el rubio estaba hecho un tomate. Taehyung de lo emocionado que estaba por su regalo, había olvidado que estaban rodeados de fans, cámaras, etc.

-¿Qué pasa aquí? –el más bajo de estatura del grupo se acercó a la pareja. -¿No pueden esperar a que las fans se vayan para demostrarse su amor? –el de cabello grisáceo bromeó. Pero para sus dos amigos no era gracioso. JungKook dejó de reír y Taehyung le dedico una mirada seria.

El maknae carraspeó y desvió la mirada, mientras Taehyung negaba con la cabeza hacia Jimin, quien no entendía que era lo que había hecho o dicho.

-¿Qué haces de entrometido? –una voz ronca se escuchó detrás de ellos, los tres voltearon. Yoongi estaba detrás de Jimin. JungKook volvió a desviar la mirada.

-No estoy de entrometido, Yoongi-hyung –respondió un tímido Jimin.

-Sí, sí lo está –Taehyung comenzó a decirle a Yoongi- Yo creo que Jiminnie se merece un castigo.

El nombrado abrió los ojos como platos y sus mejillas se tornaron de un carmesí intenso. Claro, para eso estaban los amigos, para ayudar a empeorar las cosas.

-De eso me encargo yo, Taehyung –la voz del pelinegro sonó amenazadoramente ronca y Jimin tuvo que fingir que Hoseok le hablaba para escapar de ahí. Yoongi sonrió de lado y fue a su lugar.

Taehyung también sonreía, su mejor amigo a veces era demasiado cobarde. Pero su sonrisa se borró al ver la cara del maknae, miraba hacia el piso y mordía su labio inferior.

-Kookie... -Taehyung se acercó a él y lo abrazó, pasando su brazo encima de los hombros de JungKook- ¿Sigues pensando en él?

El castaño lo miró y asintió con lentitud. En sus ojos se reflejaba la tristeza que sentía.