Analía despertó en la habitación de la casa. Se paró de un salto asustada, "pero si yo estoy sola..." pensó para sus adentros, y se acomodó la ropa y el pelo. Estaba totalmente consciente de que se había dormido en el sillón de la sala, pero prefirió no pensarlo mucho más y fue a la cocina a prepararse un té.
Su cabeza se sentía tan aliviada de toda la sociedad apabullante, que ni siquiera se percató de que todo estaba perfectamente listo cuando fue a prepararse el té. Se sentó en la mesa y mientras desayunaba unas tostadas, recordaba toda su vida con detalle: su infancia... sus amistades perdidas y sus amores fallidos. Pensó en si debía seguir en Pilar, o si debería realmente quedarse donde estaba, tan tranquila en esa casa, incluso si fuese sospechosa toda la situación. Recordó como era su infancia, era una pequeña niña tímida de 10 años en la escuela que estaba sentada en un rincón siempre, haciendo sus tareas... Con pesar recordó parte de su infancia, aquella parte que, ella sabe bien, marcó su vida completamente...
[flashback...]
- Ani!!! ¡La comida está lista!!
- ¡Ya voy mama! – dijo la pequeña Analia mientras bajaba las escaleras del pasillo que daba a su cuarto con paso lento.
- Esta niña se fue a fabricar las escaleras para bajar!! ¡Analiaaaaaa!!!
- ¡YA VOY MAMA! – grita mientras pisa el último escalón y corriendo se dirige a la cocina.
- Al fin llegas! – la madre pone un plato de polenta con salsa y queso enfrente de ella - he hablado con tus maestros hoy, me han dicho que has bajado mucho tus notas...- la niña miro hacia abajo con tristeza
- Ya lo sé... me olvidé de los trabajos prácticos..
- Deberás poner más empeño, Analía, ¡si sigues así vas a repetir el año!
- No quiero repetir mama...
- Si no quieres entonces deberás poner más ganas, de ahora en más revisare tu cuaderno todos los días para asegurarme de que no te falte nada – miro los ojos vidriosos de la niña que comenzaron a lagrimear-¿Qué te pasa Ani? ¿Por qué estás tan floja en la escuela?
La niña no articulo palabra y lloro en silencio por varios minutos.
-hija, no estés mal, me preocupa verte así, ¿Algo sucede en el colegio? Cuéntame...
-es que... nadie me cree... - se limpia las lágrimas con las mangas de su suéter- nadie me cree que tengo amigos imaginarios. Y que ellos hacen cosas asombrosas...
La madre de Analia se detiene a mirarla en seco y le pregunta con serenidad:
- ¿Y qué hacen tus amigos imaginarios?
- Ellos tienen poderes... existen varios, cada uno tiene su nombre, y hacen trucos de magia, abren puertas, uno incluso me salvó de que un perro me mordiera... mamá ¡debes creerme!
La mujer, sorprendida pero a la vez aliviada, suspiro en alivio, pensando que podría ser alguna molestia debido a sus compañeros ya que ella es muy tímida e introvertida, pero al escuchar esto solo sonrió y le dio un abrazo.
- Quiero que me presentes a tus amigos imaginarios luego, y tomaremos el té con ellos, ¿Te parece? – besó la frente de la pequeña que instantáneamente sonrió y la abrazo de vuelta
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El Show Debe Continuar
HorrorAnalía, una joven de 21 años, se ve acechada por la imponente sociedad, y decide mudarse a una casa fuera de la ciudad, para descubrir un circo con integrantes que poseen habilidades increíbles, y un secreto aterrador.