✭ First Love

12.7K 1.3K 372
                                    

El pequeño Jungkook subio las escaleras de su cuarto a toda velocidad, resbalandose en reiteradas ocasiones pero sin importarle nada, el seguia corriendo. Cuando llego a la ultima habitación de su casa, abrio la puerta y lanzo su mochila al suelo.

—¿Que hago?—se preguntaba el castaño, preocupado por su apariencia —¿Debería cambiarme el uniforme?

¿Por que el Jungkook de 10 años estaba preocupado por su aspecto? Si a los niños de su edad solo les importaba jugar, y no era que a él no le gustaran los coches y los videojuegos. Pero es que hace unas horas su mama le aviso que sus vecinos vendrian a comer a la casa.

La familia Park eran unas personas muy agradables que siempre que podian venian personalmente a dejar un pastel o culaquier postre que la señora Park se molestaba en cocinar para los Jeon.

Asi que la mama de Jungkook cordialmente invito a los vecinos para darles una muy buena comida como agradecimiento por los constantes detalles.

A Jungkook siempre le a llamado la atencion el pequeño hijo de 7 años de los señores Park. "Un niño de tes clara, rostro fino, un diente chueco que lo hacía ver adorable y una linda sonrisa que provocaba que sus pequeños ojos se encogieran aún más." O eso era lo que pensaba Jungkook de aquel niño travieso, que todos los dias salia a jugar al patio trasero de su casa. El castaño por pena, no le hablaba y solo se limitaba a observarlo desde el balcon de su habitacion, viendo como el pequeño Jimin corria de un lado a otro, sonriendo y riendo de todo.

✷ ✷ ✷ ✷ ✷ ✷ ✷ ✷ ✷ ✷

Cuando Jungkook ya estaba totalmente cambiado y arreglado, tomo su mochila y saco un pequeño dibujo que hizo en la escuela. La maestra les pidió que dibujaran algo que les gustara mucho. En la pequeña hoja blanca habia un retrato de el personaje animado mas conocido por los niños ahora: El dinosaurio Dooly, y no es por que a Jungkook le gustara ese personaje, todo lo contrario. Pero el castaño sabia perfectamente que Jimin era fanatico, siempre lo veia con playeras y peluches de aquel personaje. El lo hizo con todo su esfuerzo para poder regalarselo a su vecino. Doblo aquella hoja de papel y con mucho cuidado la guardo en uno de sus bolsillos.

—¡Jungkook! ¡Baja! ¡Los Park ya llegaron!— Gritó su mama desde el piso de abajo. Con todos los nervios del mundo, abrio la puerta de su habitacion y salió de esta.

Bajaba lentamente las escaleras con el sudor en las manos y el corazon a estallar. Cuando finalmente llego al pasillo, visualizo a la mamá de Jimin en la cocina, tomando una taza de te junto a su mamá. Miro por todos lados y no vio al mas pequeño de la familia. Su cara se torno triste hasta que alguien le toco el hombro, espantandolo.

—¡Boo!— Jungkook se volteó rápidamente al dueño de esa voz, iba a reclamarle por asustarlo pero cuando vio de quien se trataba, simplemente se quedo callado. —¿Te espante? Lo siento, crei que ya me habías visto— Sonrió, mostrando su diente chueco que tanto le gustaba al mas grande.

—N-no, bueno... si p-pero no te preocupes... e-estoy bien—Jungkook estaba con los nervios a mas no poder, sus mejillas estaban rojas y sus pequeñas manos sudaban mas de lo normal.

—¿Seguro? Estas muy blanco, pareces un fantasma... pero un fantasma muy bonito, esos que son tiernos y no dan miedo... como Casper— Dijo Jimin riendo, y eso hizo que Jungkook muriera en vida. Al escuchar su risa creyo que su corazon iba a dejar de latir en cualquier momento. Apesar de que Jungkook era apenas un niño de 10 años, sabía perfectamente que era el amor. Aunque claro, el no sabia las experiencias de los adultos sobre este tema, que al parecer eran muy complicadas y tampoco era como que le importara. El solamente pensaba en que si el amor era sentir mariposas en el estomago cuando ves esa persona especial, entonces el estaba muy enamorado.

—G-gracias— Le dio una pequeña sonrisa.

—¡Niños!— Les hablo la señora Park. Estos fueron hasta la cocina ante el llamado de la mama de Jimin.
—Mientras terminamos la comida, ¿Que les parece si juegan un rato?

—Jungkook, ¿Por que no le enseñas tus juguetes a Minie?— Hablo ahora la señora Jeon. Jungkook asintio y sin poder decir algo, sintio como una mano lo tomaba de la muñeca.

—¡Vamos Jungkook! ¡Quiero jugar contigo!—Jimin sonriendo, jalo al mayor mientras subían las escaleras.

✷ ✷ ✷ ✷ ✷ ✷ ✷ ✷ ✷ ✷

Ambos niños se encontraban en la habitación del más grande, jugando con las figuras de acción que tenía el rubio.

Jungkook creía que era el momento perfecto para regalarle su dibujo a Jimin, pero empezaba a atormentarse con cosas negativas. "¿Y si no le gustaba? ¿Y si le decía que dibujaba feo y lo tiraba a la basura?" Sus mejillas se volvieron totalmente rojas al momento en el que se dio cuenta que en su mano se encontraba la hoja de papel extendida, mostrando al dinosaurio gigante caminando sobre la ciudad.

—¡Oh! ¿Que es eso? ¿Es para mi?—Jimin preguntó con una sonrisa enorme en su rostro. Jungkook ni cuenta se dio de que asintió con la cabeza, el solo estaba perdido en aquella sonrisa tan deslumbrante que podría dejar ciego a cualquiera.

Jimin tomó el papel y sus mejillas se coloraron al ver en una de las esquinas de la hoja su nombre y un corazón rojo a un lado. El pequeño Park pensó que era su día de suerte al haber recibido un dibujo por parte del niño tímido que siempre lo miraba desde su ventana. A Jimin le gustaba Jungkook, para el más pequeño, el castaño era la persona más penosa y linda de todo el planeta. Amaba cuando hacía esas muecas extrañas al ser obligado a sacar la basura en las mañanas, Jimin siempre lo observaba desde la puerta principal de su casa, todas los días le pedía a su mamá que lo despertara a las 8:35 de la mañana para poder ponerse sus pantuflas de gatito y salir corriendo a mirar a su vecino.

—¿T-te gusto?— Preguntó un temeroso Jungkook. Quien veía como Jimin observaba el dibujo con mucha atención.

Jimin levantó la mirada y miró su pálido rostro con un tono rojizo en sus mejillas, sonrió.

—¡Me encanto! Muchas gracias Jungkook— El más pequeño se acercó al castaño y depósito un tímido beso en su mejilla. Fue un pequeño roce que hizo que ambos sintieran un mundo de mariposas removerse en su interior.

Por qué Jimin era el primer amor de Jungkook y Jungkook el primer amor de Jimin.

First ⋙ KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora