Cap 4: El Trato

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-Hola chicos estaba esperando su llamado -dijo una voz, apareció el señor Marcos junto con la misma niebla espesa de la primera vez- 

-Hola señor Marcos -dijo John- gusta sentarse? -pregunto este-

-Claro John no hay problema -dijo Marcos sentándose- estoy sorprendido de que aun estén vivos -dijo este sorprendido-

-Oye ya eso no los dijiste ayer no te acuerdas? -pregunte-

-Lo siento joven Jake pero nosotros no hemos hablado desde ese día -dijo el mirando la niebla-

-Entonces que fue lo que paso ayer Jake -pregunto John- ayer supuestamente habíamos hablado con el anciano -dijo molesto por no entender lo que pasa-

-Bueno John no importa -dije restándole importancia- 

-Aquí me tienen si me llamaron es por que aceptaran el trato -dijo el anciano con una gran sonrisa en su rostro- 

-Porque tan feliz? -pregunto John- aun no hemos dicho nada del trato -dijo este-

-John ya déjate de bromas! -le reclame- ambos sabemos que si haremos el trato -dije decidido-

-Muy buena decisión Jake y John -dijo Marcos aplaudiendo- 

Nos mostró lo que parecía ser un pergamino llevaba escrito con lo que parecía ser sangre, decía lo siguiente:

Queridos Jake y John antes que nada les envió un cordial saludo de mi parte y de todo el inframundo sin nada mas que agregar podemos seguir. Si están leyendo esto es por que aceptaron el trato, solo tienen que darme sus almas a cambio de su vida si, sus almas valen mucho para mi les dare la vida eterna. Pronto nos conoceremos Jake y John por ahora disfruten de su nueva vida. Sin nada mas que agregar me despidos de ustedes.

 -Bueno Jake, John ya que terminaron de leer continuemos por favor -dijo este-

Nos dio dos cuchillas, ya que teníamos que firmar el contrato con nuestra sangre, ambos nos hicimos una raya larga en la palma de nuestras manos, John se corto la mano izquierda y yo la mano derecha, cayeron 10 gotas de sangre de cada uno el dolor era insoportable para ser unas simples cortadas con cuchillas.

Luego de firmar el trato el señor Marcos desapareció sin decir nada junto con la niebla, a decir verdad no sentía nada extraño como para haber hecho un pacto con "EL", bueno en realidad el dolor de mi mano no había desaparecido mientras yo me retorcía de dolor en mi mente John estaba recostado en el baranda de la terraza mirando las estrellas.

-Hey John que tienes? -le pregunte- ven vamos a sentarnos -dije sentándome en mi lugar-

-Pienso en como afectara el trato en nuestra vida Jake -respondió este sin mirarme- no te has puesto a pensar que pasaría si cambiáramos de aspecto -dijo sentándose en su lugar frente a mi-

-SI ya lo he pensado John muchas veces -dije serio- pero ya no hay marcha atrás -dije levantándome de mi asiento-

-Si lo hecho hecho esta! -exclamo este levantándose también de su asiento- Jake hagamos una promesa -dijo este serio-

-Claro John -dije feliz a pesar de lo que había pasado- que clase de promesa? -pregunte sorprendido-

 -Prometamos que a pesar de las consecuencias y/o cambios que traiga este trato que acabamos de hacer no nos molestaremos el uno con el otro -dijo el extendiendo su mano hacia mi- lo prometes? -pregunto este-

 -Ok John así sera -dije estrechando su mano- lo prometo y tu? -pregunte aun estrechando su mano-

-Si Jake, lo prometo -dijo estrechando mi mano- bueno ya vamos a dormir que en hora y media amanecera -dijo el bostesando- 

Los ExiliadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora